D¨ªa mundial de la salud mental: entender y convivir con la psicosis juvenil
Los padres piden ayuda en situaciones extremas, cuando el joven demuestra una gran desconfianza hacia su entorno, dice cosas extra?as o habla solo
Los episodios psic¨®ticos, caracterizados por cambios en el comportamiento extremos, suelen exteriorizarse a edad temprana, en la juventud y, sobre todo, cuando se est¨¢ atravesado una situaci¨®n vital l¨ªmite que supera los recursos emocionales y las herramientas cognitivas de las personas que los sufren, entrando en una crisis de angustia insoportable que muchas veces les aleja de la realidad. Uno de los s¨ªntomas m¨¢s reconocibles de estos brotes psic¨®ticos son las alucinaciones: hablar, ver, saborear, interrelacionarse con cosas que no existen. Pero, ?c¨®mo es convivir con un joven que padece este trastorno? Para responder a esta pregunta en este martes 10 de octubre, d¨ªa en que se celebra el D¨ªa Mundial de la Salud Mental, contamos con la experiencia de Silvia Parrabera, directora de la Unidad de Atenci¨®n Temprana de Fundaci¨®n Manantial, psic¨®loga y terapeuta.
En Espa?a se detectan unos 4.500 casos nuevos al a?o, en su mayor¨ªa j¨®venes. "Aunque m¨¢s del 10% de la poblaci¨®n escuchar¨¢ alguna voz en su vida cuando no habla nadie", explica la experta. Los primeros episodios psic¨®ticos suelen aparecer en la franja de edad entre los 14 y los 30 a?os, pero podr¨ªa darse a cualquier edad.
¡°Las personas que sufren episodios psic¨®ticos son personas que pueden mantener fuertes creencias que a los dem¨¢s les pueden resultar extra?as. Por ejemplo, la creencia de que est¨¢n siendo controlados sus pensamientos o que existe una conspiraci¨®n contra ellos. Estas creencias han sido referidas como delirios¡±, a?ade Parrabera. Estas experiencias suelen coexistir junto a otras no tan llamativas, como son la falta de energ¨ªa o el exceso, la depresi¨®n, la angustia y la ansiedad, el aislamiento, dejando de ver a los amigos y a la familia, y la falta de rendimiento escolar o laboral. ¡°Todo ello podr¨ªa anunciar una primera crisis psic¨®tica¡±, a?ade Parrabera.
Seg¨²n la experta, algunas personas experimentan estos episodios en una ocasi¨®n y otras de vez en cuando, en per¨ªodos de mucha angustia. En la mayor parte de los casos, el sufrimiento es tan grande que los propios j¨®venes o las personas m¨¢s cercanas buscan ayuda profesional. Parrabera nos pone en situaci¨®n.
PREGUNTA: La primera pregunta es casi obligada: ?c¨®mo se detecta un episodio psic¨®tico?
RESPUESTA: Obviamente es fundamental una detecci¨®n temprana y un tratamiento adecuado para que lo que comienza siendo una crisis no se convierta con el tiempo en un trastorno mental grave. Como la mayor¨ªa de los primeros episodios se dan en la adolescencia o la primera juventud, son las personas que conviven con ellos los que pueden darse cuenta, principalmente la familia, los amigos, la pareja y los profesores. Estos se pueden percatar del estado de angustia, del aislamiento, de los cambios de h¨¢bitos... Pedir ayuda suele coincidir con la percepci¨®n de que el joven vive en una desconfianza extrema, dice cosas extra?as, habla solo o parece estar hablando con voces que ellos no escuchan o con presencias que ellos no perciben.
P: ?Una vez detectado el episodio, cu¨¢l suele ser la primera reacci¨®n de los padres?
R: Se asustan. Una experiencia de este tipo no aparece sin m¨¢s, suele tener un recorrido anterior en el que los padres o allegados se dan cuenta del cambio en su hijo. Antes de llegar a los delirios y las alucinaciones evidentes, es posible que se hayan dado cuenta de c¨®mo se ha ido aislando o de c¨®mo ha dejado de asistir a clase (...) est¨¢ triste o perplejo, no duerme o lo hace de d¨ªa. mientras vive de noche encerrado en la habitaci¨®n. Hasta aqu¨ª se podr¨ªa parecer a una adolescencia especialmente dif¨ªcil, pero cuando aparecen los delirios o las alucinaciones es cuando se dan cuenta de que la situaci¨®n es grave.
P: ?Est¨¢ prepara la Red de Salud Mental para actuar con rapidez?
R: No. En Espa?a ser¨ªa necesario que la Red de Salud Mental desarrollara estrategias de sensibilizaci¨®n entre la poblaci¨®n y diera una formaci¨®n b¨¢sica a m¨¦dicos de atenci¨®n primaria, profesorado y t¨¦cnicos de servicios sociales para saber distinguir las se?ales que indican que una crisis de este tipo est¨¢ sucediendo.
Actualmente, la atenci¨®n temprana a los primeros episodios psic¨®ticos, que incluye el desarrollo de la sensibilizaci¨®n y la divulgaci¨®n de este conocimiento b¨¢sico entre adultos y j¨®venes para detectar los casos de crisis no tiene apenas recorrido, aunque existen algunos servicios especializados, como la Unidad de Atenci¨®n Temprana que Fundaci¨®n Manantial puso en marcha en Alcal¨¢ de Henares en el a?o 2014, en colaboraci¨®n con el Servicio Madrile?o de Salud.
Es objetivo de estas unidades demostrar la necesidad de atender a las personas que atraviesan estas primeras experiencias psic¨®ticas y a sus familias, con el fin de desviar el camino que conduce a un trastorno mental grave de larga evoluci¨®n, con las consecuencias discapacitantes que pueda conllevar en la vida de quienes los padecen y a su entorno.
P: ?A pesar de los pocos recursos, cu¨¢les son lo que existen para estas personas?
R: En nuestro pa¨ªs, hay algunas experiencias puntuales de programas de atenci¨®n temprana, algunas de ellas con un recorrido m¨¢s prolongado, como es el caso de comunidades como Cantabria o Andaluc¨ªa. Pero servicios especializados solo los hay concertados en Catalu?a, y desde hace poco en la Comunidad Valenciana y Navarra. En la Comunidad de Madrid existen algunos programas puntuales en algunos hospitales, como el Gregorio Mara?¨®n.
Hay que entender que cuando se trata de una experiencia psic¨®tica, la situaci¨®n de crisis es compartida por todas las personas que conviven juntas
Pero en Espa?a los profesionales de salud mental no disponen del tiempo necesario para acompa?ar el sufrimiento particular de estas personas y sus familias, ni de herramientas terap¨¦uticas m¨¢s all¨¢ del tratamiento psicofarmacol¨®gico y los ingresos psiqui¨¢tricos cuando la situaci¨®n es muy grave. Y estos recursos no son los ideales para una persona que por primera vez se encuentra en una situaci¨®n de crisis que le genera tanto miedo, desconfianza, confusi¨®n y verg¨¹enza. Generalmente, esta forma de tratar las primeras experiencias psic¨®ticas resulta traum¨¢tica y, como consecuencia, genera rechazo hacia los profesionales que deber¨ªan estar cerca para ofrecer su ayuda en los momentos cr¨ªticos.
P: ?Una vez el joven consigue entrar en una de estas unidades o acude a un especialista privado, c¨®mo ser¨ªa el tratamiento?
R: Hay diversas formas de ofrecer tratamiento dentro del marco de la Atenci¨®n Temprana a los primeros episodios psic¨®ticos. Tradicionalmente en Occidente se atiende en primera instancia a trav¨¦s del uso de psicof¨¢rmacos y si la experiencia psic¨®tica persiste o se repite con actividades terap¨¦uticas de tipo psicosocial. Nosotros preferimos inspirarnos en el marco de Di¨¢logo Abierto proveniente de Finlandia, en el que se da prioridad a la terapia psicosocial en la que participan las familias, tratando de emplear la medicaci¨®n en las menores dosis posibles. Adem¨¢s, lo m¨¢s importante es que la persona pueda pensar porque le vas a ayudar a salir de la crisis y va a poder retomar su proyecto de vida.
P: ?Entonces el tratamiento tambi¨¦n incluye a la familia, cu¨¢l ser¨ªa su trabajo en este proceso terap¨¦utico?
R: Hay que entender que cuando se trata de una experiencia psic¨®tica la situaci¨®n de crisis es compartida por todas las personas que conviven juntas. Su participaci¨®n nos puede ayudar a comprender las circunstancias que han precipitado la crisis, adem¨¢s de que la red de apoyo es fundamental para que la persona se sienta entendida, pueda pensar en lo que necesita en esos momentos y le apoyen con su intervenci¨®n en los periodos cr¨ªticos.
P: ?Estos j¨®venes se llegan a recuperar?
R: Querr¨ªa dejar claro que la recuperaci¨®n total es posible, que muchos de los j¨®venes que se enfrentan a estas experiencias salen reforzados y m¨¢s maduros sin que se vuelvan a repetir estos episodios. Si la atenci¨®n temprana no se recibe desde el principio, sabemos por los estudios y por experiencia propia que las repeticiones continuadas de las crisis desembocan en un diagn¨®stico de trastorno mental grave dif¨ªcil de revertir.
Adem¨¢s, convivir de forma continuada en esta situaci¨®n de crisis deriva en otros problemas de salud mental, tales como el riesgo de suicidio, depresi¨®n, ansiedad y consumo de t¨®xicos que afectan tanto a las personas que viven la experiencia psic¨®tica como a sus familiares.
Los cinco primeros a?os conforman una etapa fundamental para la recuperaci¨®n. Sabemos que aseguran un futuro mejor si el tratamiento es el adecuado, aunque, reitero, el sistema de salud mental habitual en Espa?a no cuenta con recursos para ello. Y obliga a las familias a acudir a centros privados y concertados. Eso s¨ª, como nosotros, est¨¢n preparados para atenderlos.
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