La desigualdad comienza en el salario
La brecha salarial aumenta mientras casi un tercio de la poblaci¨®n espa?ola est¨¢ en riesgo de exclusi¨®n
Espa?a va bien. La econom¨ªa crece a un ritmo feroz. Por fin hemos salido de la crisis. Y por fin llega ya la Nochebuena. Todos los cantos de sirena que venimos escuchando en los ¨²ltimos meses acerca de la recuperaci¨®n econ¨®mica quedaron silenciados la semana pasada de un plumazo con un nuevo informe de la Comisi¨®n Europea: la desigualdad econ¨®mica en Espa?a se encuentra en una situaci¨®n cr¨ªtica. Mientras que cada vez menos personas acumulan m¨¢s riqueza, casi el 28 % de la poblaci¨®n espa?ola vive en riesgo de pobreza y exclusi¨®n.
Para la mayor¨ªa de personas, el salario representa la principal fuente de ingresos. Por esta raz¨®n, explorar las desigualdades salariales resulta crucial para poder explicar por qu¨¦ la desigualdad econ¨®mica en Espa?a se ha convertido en una de las principales calamidades. Las diferencias salariales entre los que m¨¢s y menos cobran son obscenas.
Entre 2007, justo antes del inicio de la crisis, y 2016, a?o en que la econom¨ªa creci¨® por encima del tres por ciento, los salarios m¨¢s bajos en Espa?a cayeron un 7,8 por ciento. En cambio, en ese mismo per¨ªodo, los salarios m¨¢s altos aumentaron un 24,5 por ciento. Esta evoluci¨®n desigual de los salarios demuestra que la devaluaci¨®n salarial provocada para recuperar la competitividad ha obrado el gran milagro: las personas que m¨¢s sufrieron las consecuencias de la crisis contin¨²an en ella, y quienes, en realidad, nunca la sufrieron, son quienes principalmente se benefician de la tan cacareada recuperaci¨®n econ¨®mica.
Pero el nivel de obscenidad de las brechas salariales brilla con mucho m¨¢s esplendor cuando observamos qu¨¦ ocurre dentro de las principales empresas. La remuneraci¨®n media que en 2016 percibieron los primeros ejecutivos de las empresas del IBEX 35 fue de 4,2 millones de euros al a?o, esto es, 207 veces el sueldo m¨ªnimo pagado por estas mismas empresas, seg¨²n un estudio realizado por la oeneg¨¦ Oxfam. Es decir, la persona que menos cobra en la empresa necesitar¨ªa trabajar 207 a?os¨C literalmente lo imposible¨C para ganar lo que ingresa el primer ejecutivo de su empresa en un solo a?o. O, lo que es lo mismo, el primer ejecutivo de estas empresas tarda menos de 2 d¨ªas¨C ?2 d¨ªas!¨C en ingresar lo que un trabajador de su misma empresa gana en un a?o. Diferencias repulsivas que solo unos pocos, normalmente, los m¨¢s beneficiados, se atreven a justificar.
El problema es, en realidad, a¨²n m¨¢s grave si tenemos en cuenta el creciente proceso de externalizaci¨®n de servicios. Esto est¨¢ permitiendo a las empresas amortizar puestos de trabajo para despu¨¦s recontratar los mismos servicios que estos prestaban a trav¨¦s de empresas externas, pero pagando salarios a¨²n m¨¢s bajos, hasta un 40 por ciento menos en algunos casos, contribuyendo de ese modo a aumentar los niveles de precariedad laboral que sufre una parte importante de la poblaci¨®n.
Lamentablemente, si eres mujer, la desigualdad salarial te afecta por partida doble. En Espa?a, en 2016, un hombre gan¨® de media 1,25 veces lo que gan¨® una mujer. A la discriminaci¨®n salarial que sufren las mujeres respecto a un hombre por el mismo trabajo se suma el hecho de que las mujeres est¨¢n infrarrepresentadas en los puestos de trabajo de mayor responsabilidad y salario, ocupando, por ejemplo, tan solo un 22 % de los puestos directivos de las empresas del IBEX 35. Adem¨¢s, est¨¢n sobrerrepresentadas en los sectores y puestos de trabajo con salarios m¨¢s bajos y mayores niveles de precariedad laboral como, por ejemplo, en la hosteler¨ªa o los trabajos dom¨¦sticos.
Desde Oxfam Interm¨®n reclamamos cambios en las pol¨ªticas del gobierno y en las pr¨¢cticas de las empresas. No aceptamos que mientras unos pocos reciben sueldos estratosf¨¦ricos, hasta un 13 por ciento de personas en Espa?a, la mayor¨ªa mujeres, sigan recibiendo por su trabajo un salario con el que apenas logran salir de la pobreza. Urge subir el salario m¨ªnimo interprofesional¨C precisamente objeto de negociaci¨®n estas semanas entre patronal y sindicatos¨C hasta llegar a los 1.000 euros brutos anuales, poner fin a la discriminaci¨®n contra las mujeres y limitar las diferencias salariales dentro de las empresas a niveles razonables. As¨ª lo proponemos, entre otras medidas, en el informe ¡®Diferencias abismales¡¯ que hemos publicado.
Hace bien la Uni¨®n Europea en denunciar la gravedad de la desigualdad econ¨®mica en Espa?a. Ahora hace falta que el Gobierno, conjuntamente con otros grupos parlamentarios en la oposici¨®n, adopten las medidas necesarias para asegurar que la recuperaci¨®n econ¨®mica mejore el bienestar de todas las personas. Reducir la brecha entre los que m¨¢s ganan y las que menos deber¨ªa ser una de las principales prioridades para lograrlo.
?lex Prats es responsable del programa de Desigualdad de Oxfam Interm¨®n.
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