El 1% de la poblaci¨®n con m¨¢s ingresos gana el doble que el 50% m¨¢s pobre en el mundo

La desigualdad de ingresos ha aumentado en todas las regiones del mundo desde la d¨¦cada de los ochenta. Sin excepci¨®n. Pero en unas la inequidad ha alcanzado cotas m¨¢s elevadas que en otras. Oriente Medio es la primera en la lista: all¨ª, el 10% de personas con m¨¢s ingresos goza del 61% de la renta nacional. En ?frica subsahariana, del 54%, mientras que en Estados Unidos y Canad¨¢, del 47%. En Europa, la menos desigual, ese 10% que m¨¢s gana representa el 37% de los ingresos totales. Esta es una de las muchas conclusiones a las que llegan los m¨¢s de 100 investigadores de los cinco continentes que han participado en la elaboraci¨®n del Informe sobre la Desigualdad Global 2018 publicado este jueves por el World Inequality Lab. "El 1% con mayores ingresos a escala global, recibi¨® el doble de ingresos que el 50% m¨¢s pobre", destacan los autores.

"Este informe es el m¨¢s completo hecho hasta ahora porque incluye informaci¨®n de todo los pa¨ªses, incluso de aquellos de los que no la hab¨ªa hasta ahora como China, Rusia o Brasil", asegura por tel¨¦fono desde Londres Clara Mart¨ªnez-Toledano, investigadora participante en el estudio. Los datos arrojados son una fotograf¨ªa muy detallada de la evoluci¨®n de la desigualdad (tanto por ingresos como de riqueza) en el mundo hasta la actualidad.

Los autores, coordinados por el economista Thomas Piketty, especialista en desigualdad econ¨®mica y distribuci¨®n de la renta, no se limitan a exponer las estad¨ªsticas obtenidas tras cruzar millones de datos, sino que adem¨¢s apuntan las causas que las explican. "Puede ayudar mucho a analizar la situaci¨®n de los pa¨ªses y poder dise?ar pol¨ªticas encaminadas a combatir la desigualdad", a?ade Mart¨ªnez-Toledano. Este no es un objetivo caprichoso de los redactores del documento, sino que lo manda el n¨²mero 10 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU que, entre otras metas, llama a "lograr progresivamente y mantener el crecimiento de los ingresos del 40% m¨¢s pobre de la poblaci¨®n a una tasa superior a la media nacional" para 2030.

Oriente Medio es la regi¨®n m¨¢s desigual del mundo: el 10% de personas con m¨¢s ingresos se apropian del 61% de la renta nacional

De la lectura de los datos, los investigadores describen los factores que han influido en el mayor o menor aumento de la desigualdad en cada regi¨®n y pa¨ªs. "La diversidad de tendencias observadas desde 1980 muestra que la din¨¢mica de la desigualdad de ingresos se encuentra influida por los contextos institucionales y pol¨ªticos nacionales", aseguran. Ejemplo de ello es el diferente ritmo de aumento de la desigualdad que han experimentado pa¨ªses que antes eran comunistas o con una r¨ªgida regularizaci¨®n y han vivido procesos de desregulaci¨®n y privatizaci¨®n de la econom¨ªa. "El incremento fue particularmente abrupto en Rusia, moderado en China y relativamente gradual en India, reflejando diferentes tipos de pol¨ªticas de desregulaci¨®n y apertura llevadas adelante por estos pa¨ªses en las ¨²ltimas d¨¦cadas", explican.

"Otro de los factores que afecta es la pol¨ªtica fiscal. Cuando los impuestos son bajos y poco graduales, como en Estados Unidos, se produce m¨¢s concentraci¨®n de los ingresos", expone Mart¨ªnez-Toledano. En este caso, la historia es reveladora. Europa occidental y Estados Unidos contaban con niveles similares de desigualdad en 1980, el 1% de la poblaci¨®n que m¨¢s ingresaba representaba el 10% del total de la renta en cada uno de los territorios. Sin embargo, en 2016, las situaciones son radicalmente distintas. En Europa occidental, ese 1% privilegiado percibi¨® el 12% de todos los ingresos, mientras que en EE UU recibi¨® el 20%.

Y no solo los que m¨¢s ganan se quedan con una parte m¨¢s grande del pastel, sino que los que menos ingresan vieron mermar sus ganancias. El 50% de las rentas m¨¢s bajas se repart¨ªan el 20% del total del ingreso nacional en EE UU en 1980; el a?o pasado, la porci¨®n se redujo al 13%. Esta tendencia es compartida por todas las regiones aunque con n¨²meros distintos. "En Europa, sin embargo, la concentraci¨®n es menor porque hay pol¨ªticas fiscales m¨¢s progresivas", apostilla Mart¨ªnez-Toledano.

Adem¨¢s de las citadas pol¨ªticas fiscales, hay otras causas que explican esta evoluci¨®n. "Tambi¨¦n influye el acceso a la educaci¨®n y el empleo. As¨ª como la proporci¨®n de trabajadores que hay en los comit¨¦s de toma de decisiones de las empresas", detalla Mart¨ªnez-Toledano. En este sentido, el informe dice: "Investigaciones recientes muestran que puede existir una brecha inmensa entre el discurso p¨²blico acerca de la igualdad de oportunidades y las que efectivamente existen en el acceso a la educaci¨®n. En Estados Unidos, por ejemplo, de cada 100 ni?os cuyos padres pertenecen al 10% m¨¢s pobre, apenas entre 20 y 30 acceden a educaci¨®n universitaria, mientras que dicha proporci¨®n asciende a 90 en el caso entre los hijos del 10% m¨¢s rico". Por eso, los autores sugieren "realizar cambios en los mecanismos de admisi¨®n y financiamiento", de tal modo que se iguale el acceso entre todas las capas econ¨®micas de la sociedad.

Las pol¨ªticas fiscales, el acceso a la educaci¨®n y la participaci¨®n de los trabajadores en las instancias de decisi¨®n en las empresas son factores que influyen en el nivel de desigualdad

Pero no se frenar¨¢ el crecimiento de la desigualdad solo con educaci¨®n. "Es importante, pero es insuficiente por s¨ª sola en ausencia de mecanismos que aseguren empleos bien remunerados a la poblaci¨®n m¨¢s pobre. Una mejor representaci¨®n y participaci¨®n de los trabajadores en la estructura de decisi¨®n de las empresas, as¨ª como salarios m¨ªnimos a niveles dignos, son tambi¨¦n claves", escriben los investigadores. Cuestiones que tambi¨¦n aborda la Agenda de Desarrollo Sostenible (los ODS). Concretamente, el Objetivo 8.5 fija que en 2030 se debe lograr "pleno empleo y trabajo decente para todas las mujeres y hombres, incluso para los j¨®venes y personas con discapacidad".

"Y claro, tambi¨¦n el tema de la evasi¨®n fiscal", lanza Mart¨ªnez-Toledano. La evidencia muestra que la progresividad del sistema impositivo es una herramienta efectiva para combatir la desigualdad, seg¨²n el estudio, pero hay muchos (cada vez m¨¢s) a quienes les viene mal y, directamente, se llevan sus rentas y riqueza a pa¨ªses donde tributan muy poco o nada. En el mundo, los gobiernos dejan de ingresar aproximadamente 350.000 millones de euros debido a esta pr¨¢ctica, calculan los autores. "En Espa?a, el 8,6% de la riqueza financiera de los hogares no se declara y est¨¢ en para¨ªsos fiscales; por encima de la media global", apostilla Mart¨ªnez-Toledano.

Distinguen los autores la desigualdad por ingresos (lo que gana una persona) y la que tiene que ver con la riqueza (lo que tiene: activos financieros?¡ªdep¨®sitos, acciones, fondos de inversi¨®n¡ª y no financieros, principalmente la vivienda y el valor de las empresas de los aut¨®nomos). Esta segunda ha aumentado a¨²n m¨¢s que la primera en las ¨²ltimas d¨¦cadas. Menos manos concentran m¨¢s riqueza en el mundo, aunque la informaci¨®n sobre este fen¨®meno es m¨¢s escasa y la fotograf¨ªa es incompleta, advierten los redactores del texto.

Sus conclusiones son que "a escala mundial ¡ªcon datos de China, Europa y Estados Unidos¡ª el 1% m¨¢s rico posee, en 2017, el 33% de la riqueza mundial, cinco puntos por encima que en 1980 (28%). El 50% m¨¢s pobre, la mitad de la humanidad, nunca se ha tenido m¨¢s del 2% de la riqueza global durante todo este per¨ªodo. "Si las tendencias en cuanto al crecimiento de la desigualdad de la riqueza contin¨²an, el 0,1% de la poblaci¨®n m¨¢s acaudalada poseer¨¢ m¨¢s riqueza que la clase media global para 2050", alertan.

En Espa?a, el 10% de poblaci¨®n m¨¢s rica (con 813.000 euros de media por adulto) acapara el 57% de la riqueza; mientras que el 50% m¨¢s pobre posee el 7% (con 18.900 euros por persona)

En Espa?a, Mart¨ªnez-Toledano ha recabado datos suficientes para poder estimar que el 10% de los m¨¢s ricos (con 813.000 euros de media por adulto) acaparan el 57% de la riqueza del pa¨ªs; mientras que el 50% m¨¢s pobre posee el 7% (con 18.900 euros cada individuo). Uno de los factores de que la diferencia no sea mayor es que una amplia clase media tiene viviendas en propiedad y estas, a¨²n tras el pinchazo de la burbuja inmobiliaria, han duplicado su valor en las ¨²ltimas tres d¨¦cadas. Esto ha contribuido a que este tipo de desigualdad no aumente de forma tan alarmante como la de renta. Hace apenas unas semanas, un informe sobre desempleo en la Uni¨®n Europea situaba al pa¨ªs a la cabeza en desigualdad por ingresos. Dec¨ªa ese documento que en Espa?a, el 20% con mayores ingresos ganaba 6,5 veces m¨¢s que el 20% con rentas m¨¢s bajas, un dato por encima de la media europea (5,1). "Una situaci¨®n cr¨ªtica", advert¨ªan los autores.

Por su parte, el World Inequality Lab ha recabado y recogido a?os de investigaci¨®n en un documento de 300 p¨¢ginas y todos los datos est¨¢n disponibles en una base de datos abierta en su p¨¢gina web. El objetivo es "ayudar a los agentes sociales, los medios o las ONG a entender las din¨¢micas de la desigualdad y contribuir al debate p¨²blico informado para intentar reducirla all¨ª donde aumenta mucho", concluye la investigadora espa?ola.

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