Hambre en medio de la abundancia

Hace cuatro semanas estaba en Hait¨ª conociendo los proyectos que apoya Am¨¦rica Solidaria, particularmente en educaci¨®n. Me correspondi¨® asistir a uno de ellos donde est¨¢n las religiosas del Sagrado Coraz¨®n en las cercan¨ªas de Puerto Pr¨ªncipe. Un notable trabajo llevado adelante por profesores y profesoras haitianas, de la mano de las familias y de estas religiosas¨C casi en su totalidad mayores¨C y con el apoyo de la organizaci¨®n Fe y Alegr¨ªa. En medio de la conversaci¨®n me contaron que recib¨ªan alimento del Programa Mundial de Alimentos (WFP), que esas semanas se hab¨ªa entregado solo trigo y con eso se estaban alimentando los alumnos y alumnas.

M¨¢s informaci¨®n

El hambre aumenta por primera vez en casi 15 a?os

?Hambre en 2017?

La FAO el?pasado septiembre nos removi¨® al se?alar que el hambre hab¨ªa aumentado, que 11 de cada 100 personas, es decir, 815 millones no tiene el alimento que requiere para vivir, pasa hambre. Por primera vez desde el a?o 2003 tenemos un alza de subalimentados.

Trabaj¨¦ en Roma la semana pasada y al salir del aeropuerto en el bus que me llevaba a Stazione Termini pas¨¦ por el lado del edificio de la WFP, vi ya de tarde alguna de sus luces encendidas. Medit¨¦ que seguramente quienes trabajan all¨ª y quienes viven hoy en la capital de Italia no han comido solo trigo las ¨²ltimas semanas y me pregunt¨¦ si efectivamente ellos y ellas eran conscientes de lo que ocurre en Hait¨ª y en tantos otros lugares del mundo donde la carencia del alimento necesario lleva a las personas a enfermarse y morir. Me hice la misma pregunta y a quienes me rodean en este mundo desarrollado donde botamos m¨¢s de un tercio de su alimento y cada vez tenemos comidas m¨¢s sofisticadas. Solo me queda pensar que seguimos habitando en una burbuja.

En una de esas noches le¨ª en la prensa internacional que el principal accionista de una importante empresa textil ingresar¨¢ un dividendo de 1.250 millones de euros y me pregunt¨¦: ?los necesitar¨¢? Busqu¨¦ en la p¨¢gina del WFP su presupuesto y lo que encontr¨¦ inmediatamente son las raciones anuales que entregan: 12.600 millones a 0.31 d¨®lares cada una de ellas y los 2.800 millones de d¨®lares que necesitan para evitar m¨¢s muertes. Llevan cerca del 50 % recaudado. Por los programas que logr¨¦ identificar en el WFP la parte central de su misi¨®n va directamente a la entrega de alimento para evitar la desnutrici¨®n y la muerte y fortalece a su vez a las propias comunidades y organizaciones articul¨¢ndose con la Organizaci¨®n para las Naciones Unidas para la Alimentaci¨®n y la Agricultura (FAO) y con el Fondo Internacional de Desarrollo Agr¨ªcola (IFAD).

Me he preguntado al regresar a mi pa¨ªs Chile, en medio de la contienda electoral y de las reformas sociales m¨¢s ambiciosas de las ¨²ltimas d¨¦cadas, ?de qu¨¦ les sirve a las personas acumular m¨¢s riquezas acrecentando sus bienes si agonizan y mueren decenas de millones de personas en el mundo cada a?o por carencia de alimentos? ?Podemos levantarnos cada ma?ana en paz, beber agua potable, alimentarnos y consumir si a¨²n centenares de millones de seres humanos en el mundo no pueden hacerlo?

Valdr¨ªa la pena que nos detuvi¨¦ramos a reflexionar qu¨¦ hacer antes de seguir la rutina de h¨¢bitos alienantes que nos impiden ver y que, al hacerlo, record¨¢ramos los rostros de mujeres, hombres y ni?os desnutridos y agonizando en pleno siglo XXI. La mayor expresi¨®n de privaci¨®n de libertad en el mundo sigue siendo la pobreza. Yo por lo menos creo y estoy convencido de que podemos hacer much¨ªsimo m¨¢s comenzando simplemente por ponernos en el lugar de quienes hoy experimentan a diario la exclusi¨®n, la pobreza y el hambre; lo dem¨¢s vendr¨¢ por a?adidura y de seguro nos juntar¨¢ a tantos otros y otras que aspiran a un mundo m¨¢s justo, seguro y feliz.