?Invertir o no invertir? Claves para sacar partido a su dinero
El comienzo de un a?o invita a reorganizar la vida. Por ejemplo, a mover nuestro dinero para conseguir ganancias. Sin embargo, antes de lanzarse al ruedo econ¨®mico, no est¨¢ de m¨¢s observar algunas claves
SON MALOS TIEMPOS para la l¨ªrica y vaya por delante que tambi¨¦n lo son para las inversiones. ?El motivo? Muy sencillo: los tipos de inter¨¦s oficiales son todav¨ªa cercanos a cero. As¨ª que sacarle algo de rendimiento a nuestra hucha va a entra?ar algunos riesgos. Vayamos por partes.
Antes que nada es preciso definir qu¨¦ significa ahorrar: es aplazar un consumo presente. Es justo lo opuesto a endeudarse, que consiste en gastar hoy ingresos futuros. Esto, que puede parecer una obviedad, es fundamental para decidir c¨®mo emplear el dinero. ?Por qu¨¦? Pues porque si ahorrar es diferir un consumo presente, quiere decir que lo que invertimos est¨¢ destinado a ser utilizado en un futuro, y no conservado eternamente. Por lo general, las personas acaban olvidando este hecho. Guardar dinero se convierte en una actitud atemporal: viven acumulando riqueza y cuando tienen necesidad de disponer de su dinero sienten desaz¨®n e incluso culpa. ¡°?C¨®mo vamos a romper la hucha?¡±, se preguntan. ?Pues claro que s¨ª! Para eso est¨¢: para los momentos dif¨ªciles o para cuando llega la edad en que los ingresos menguan y los gastos corrientes exceden los beneficios.
No tiene nada que ver invertir como forma de ahorro con hacerlo para enriquecerse. Por tanto, la primera pregunta que hay que formularse antes de lanzarnos a la piscina es: ?con qu¨¦ objetivo voy a gastar? El segundo punto a tener en cuenta es que cuando guardamos el dinero, este tiende a erosionarse. Y la causa es la inflaci¨®n. Debido a la coyuntura de los ¨²ltimos a?os, la subida general de precios ha sido muy baja. Pensemos que en situaciones de inflaci¨®n negativa, como ha sucedido en Jap¨®n, esconder el dinero bajo el colch¨®n produce beneficios. De hecho, entre expertos financieros, igual que se habla de Bolsa, obligaciones o bonos, existe la expresi¨®n under the mattress (bajo el colch¨®n) como una tipolog¨ªa oficial de inversi¨®n. Con una deflaci¨®n del 5%, un billete de 100 euros guardado llega a un poder adquisitivo de 105 euros al cabo de un a?o. El billete es el mismo, el ahorro tambi¨¦n y¡ hemos ganado dinero.
Un error que debemos evitar es el ¡®s¨ªndrome del cu?ado¡¯, que consiste en estar satisfecho de que mi inversi¨®n ha obtenido mejores resultados que la de un pariente
Pero este a?o la inflaci¨®n es ya positiva y se acercar¨¢ al 2%. Esto nos lleva a comprender algo esencial: se gana cuando la revalorizaci¨®n de la inversi¨®n supera a la inflaci¨®n. En caso contrario, perdemos aunque el saldo aumente. Por ejemplo, un 3% de intereses cuando la inflaci¨®n ha sido del 5% significa que el ahorro ha perdido un 2% de poder adquisitivo. Por esto mismo hay que ser muy conscientes de que no existe el riesgo cero. Es fundamental saber que el tipo de inter¨¦s considerado sin riesgo (el que da una entidad como un Banco Central) es el nivel del que debemos partir. A m¨¢s rentabilidad por encima de tal frontera, m¨¢s aumenta el peligro. La ilusi¨®n del ser humano por ganar dinero es tan elevada que nos creemos a pies juntillas que una inversi¨®n de elevad¨ªsima rentabilidad puede tener un riesgo muy bajo porque es lo que piensa mi gestor, que sabe mucho. Nunca es as¨ª. Jam¨¢s lo olviden. Rendimiento alto significa riesgo alto. Es decir, posibilidad de perder parte de nuestros ahorros.
Otro gran error que suele cometerse es lo que denomino el s¨ªndrome del cu?ado: es decir, cuando estoy satisfecho de que mi operaci¨®n financiera ha obtenido mejores resultados que la que ha realizado el hermano de mi pareja. Recuerde el lector que las personas tienden a explicar sus ganancias y a callarse las p¨¦rdidas. Si tuvi¨¦semos que calcular la riqueza de Espa?a en funci¨®n de lo que se escucha, concluir¨ªamos que todo el mundo se forra. Y el ¨²ltimo concepto: hay inversiones que producen rendimientos expl¨ªcitos (una acci¨®n de una empresa, adem¨¢s de revalorizarse, puede dar dividendos cada a?o). Y otras no. Un bitcoin, por ejemplo, produce beneficios por lo que se revaloriza. No tiene nada que ver invertir en algo por lo que da anualmente que por lo que aumenta de precio. En el primer caso se invierte por lo que realmente vale algo. En el segundo caso, solo con la idea de revender aunque el precio est¨¦ muy por encima de su valor real. Cuidado. Estas ¨²ltimas son las que de vez en cuando contienen burbuja. Ya lo dijo Machado: ¡°Todo necio confunde valor y precio¡±.?
Las virtudes del buen inversor
- Tener una personalidad fuerte. Por ejemplo, para actuar de forma distinta a lo que hace la mayor¨ªa. Las personas somos gregarias, nos da seguridad el reba?o. El inversor 10 en realidad es un lobo solitario.
- Tener sangre fr¨ªa. Necesaria para entrar en momentos en los que nadie comprar¨ªa. Las buenas operaciones se logran cuando se adquieren activos que est¨¦n bien de precio, no cuando est¨¢n por las nubes. El problema es comprar cosas que nadie quiere, por baratas que est¨¦n.
- La rapidez es uno de los factores clave en inversiones a corto plazo, dado que los algoritmos financieros ahora plantean inversiones especulativas que duran segundos.
- Fortaleza mental. Algunos estudios muestran que los inversores sufren un desgaste neuronal cada vez que rechazan una operaci¨®n. Esto proviene de la dificultad de todos los seres humanos en decir no. El br¨®ker tiene que estar preparado para dar una negativa sin que ello repercuta en su car¨¢cter.
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