La vida no sigue igual para Julio Iglesias
El cantante, apartado de los escenarios y fuera de los focos, reorganiza su patrimonio y prepara sus memorias
Julio Iglesias siempre vuelve, pero de momento se mantiene en una fase de privacidad y discreci¨®n, sin ganas de focos ni prensa en un a?o de gran contenido simb¨®lico para ¨¦l. En septiembre cumple 75 a?os y 2018 marca el 50? aniversario de la imponente carrera que comenz¨® cuando gan¨® en 1968 el Festival de Benidorm con su cl¨¢sico La vida sigue igual. Pese a que anunci¨® para este a?o una gira conmemorativa, en su agenda no hay ninguna fecha de concierto prevista y su ¨²ltima aparici¨®n es una fotograf¨ªa que public¨® en enero en su cuenta de Instagram en su mansi¨®n de Miami con un perro labrador, sonriente y sentado en un carrito de golf.
Iglesias, uno de los mejores cantantes de baladas latino, es un hombre que ha llegado a una etapa de la vida en la que se est¨¢ preparando sus memorias con tres escritores ayudantes, seg¨²n cuenta su amiga periodista Beatriz Parga: ¡°Le est¨¢ dedicando mucho tiempo al libro y dice que todo lo que la gente quiera saber de ¨¦l lo va a encontrar ah¨ª. Yo creo que est¨¢ en una etapa de tranquilidad, gozando de su familia. ?l ya conquist¨® todo lo que quiso y no le queda sue?o que alcanzar en lo personal o en lo profesional¡±. Sus problemas de espalda, que le llevaron a cancelar conciertos hace dos a?os y que tanto le ven¨ªan atormentando, han remitido seg¨²n afirma Parga: ¡°Hablamos hace poco y me dijo que est¨¢ como un roble¡±. Pero sigue sin haber noticias profesionales de ¨¦l.
Adem¨¢s de destilar recuerdos, el int¨¦rprete de canciones como De ni?a a mujer o Me va, me va est¨¢ poniendo en orden su fortuna, calculada por la revista Forbes en 850 millones de d¨®lares y que incluye un fastuoso patrimonio inmobiliario que el cantante estar¨ªa reorganizando. Seg¨²n algunos medios, el artista estar¨ªa liquidando inversiones que tiene en Republica Dominicana. Fallecido en 2014 su ¨ªntimo amigo dominicano el dise?ador ?scar de la Renta, con una relaci¨®n ¨¢spera con sus socios del Grupo Punta Cana y en medio de subidas fiscales en la isla, Iglesias habr¨ªa decidido vender su participaci¨®n en urbanizaciones, hoteles y campos de golf y quedarse solo con un 5% del aeropuerto del para¨ªso tur¨ªstico, una operaci¨®n que le reportar¨ªa m¨¢s de 200 millones de euros. Aunque mantiene su casa de Punta Cana, donde pasa la mayor parte del tiempo, estar¨ªa en busca de otra mansi¨®n en Panam¨¢, cuyo clima soleado, seguridad, servicios y ventajas fiscales han atra¨ªdo ya al cantante Miguel Bos¨¦ y a sus cuatro hijos.
El movimiento de piezas afecta tambi¨¦n a su patrimonio de Miami. All¨ª Julio Iglesias mantiene la mansi¨®n donde reside su esposa Miranda Rijnsburger con sus cinco hijos, aunque los mayores ya no est¨¢n permanentemente all¨ª porque han iniciado sus estudios superiores. Julio, con su avi¨®n privado, va y viene a la casa familiar, y ha puesto a la venta por unos 120 millones de euros el terreno adyacente sin construir de m¨¢s de tres hect¨¢reas y 250 metros de borde marino. Se encuentra en la isla de Indian Creek, conocida en Miami como "el b¨²nker de los millonarios" por la seguridad y la privacidad que ofrece a sus residentes. Su otra gran propiedad, donde estuvo unos d¨ªas el pasado verano, es su finca de Oj¨¦n (M¨¢laga), que compr¨® al torero Curro Romero.
Contando a sus tres hijos con Isabel Preysler, Julio Iglesias tiene ocho descendientes, si bien tiene pendiente la demanda de paternidad de Javier Santos. ¡°Si Julio resulta ser el padre, se comportar¨¢ como tal¡±, ha declarado a una revista su primera esposa Isabel Preysler. Y el pasado lunes, en Madrid, su hijo Julio Jos¨¦ coment¨® sobre Javier, al que conoce: ¡°Me cay¨® bien, es un chico simp¨¢tico, pero de ah¨ª a llamarle hermano, no¡±. Una demanda de paternidad basada en unas pruebas de ADN obtenidas a trav¨¦s de restos biol¨®gicos tomados a Julio Jos¨¦ fueron las que permitieron a los abogados de Santos demostrar que este es, en su opini¨®n, hijo del cantante. Ahora se est¨¢ pendiente del fallo de los tribunales.
Mientras, el hijo m¨¢s c¨¦lebre del cantante, Enrique Iglesias, sigue su vida aparte, estrenando paternidad y sin contacto con su padre pese a que ambos tienen casa en la ciudad de Florida. Ninguno admite abiertamente que su relaci¨®n est¨¢ rota pero la brecha entre ambos contin¨²a.
A Julio Iglesias, en lo profesional, a¨²n se le espera. Han pasado los d¨ªas cumbre del m¨²sico hispanohablante que ha vendido m¨¢s discos en toda la historia, unos 350 millones de copias; el que ha dado m¨¢s de 5.000 conciertos para unos 60 millones de personas en los cinco continentes. Pero como dice a EL PA?S su exm¨¢nager Alfredo Fraile ¡°necesita cantar, viajar y recibir aplausos como el comer¡±.?
Fraile dej¨® a Julio Iglesias tras 15 a?os e infinidad de peripecias juntos, como la primera noche que Julio cant¨® en Miami y, c¨¢ndido, dijo que le gustar¨ªa actuar en Cuba: ¡°Salimos de all¨ª corriendo entre sillas al vuelo y gritos de comunista de mierda¡±. Sin relaci¨®n con ¨¦l pero sin rencores, Fraile advierte que Julio Iglesias no se ha ido: ¡°Solo tiene que modernizar al crooner legendario que es¡±, opina, ¡°porque como ¨¦l no ha habido otro desde Sinatra¡±.
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