Por qu¨¦ los hombres con pareja arrasan entre las mujeres y no al rev¨¦s

?Cu¨¢ntos hombres han dicho alguna vez que cuando tienen pareja ligan m¨¢s? Aunque en algunos casos se trate m¨¢s de un farol que de una realidad, distintos estudios apuntan a que puede haber una explicaci¨®n cient¨ªfica de por qu¨¦ los hombres con pareja pueden resultar irresistibles a algunas las mujeres.

Se trata de un fen¨®meno que trasciende la especie humana: tambi¨¦n ocurre en algunas especies de peces, aves, insectos y mam¨ªferos. El llamado mate-choice copying consiste en copiar la elecci¨®n de pareja de otras hembras. Es decir, que las mujeres podr¨ªan elegir pareja en funci¨®n del compa?ero de viaje que ya han escogido o rechazado otras mujeres.

La primera demostraci¨®n de la copia de elecci¨®n de pareja se realiz¨® en la d¨¦cada de los 90 con peces guppy ¡ªuna especie de agua dulce¡ª y desde entonces se ha podido comprobar en otros animales e insectos como las moscas de la fruta, las codornices, los pinzones cebra y las ratas.

En los experimentos, lo primero que se ha observado es la preferencia de una hembra entre diversos machos. Despu¨¦s se le permite observar la elecci¨®n de otra y c¨®mo tiene relaciones sexuales con el macho que ha escogido. Finalmente, se le deja volver a elegir. "Muchas veces la hembra que ha observado a otra interactuar cambia su preferencia y elige al mismo macho que ha visto tener relaciones con la hembra observada", se?ala el psiquiatra Pablo Malo, autor del blog Evoluci¨®n y Neurociencias.

Copiar la elecci¨®n de pareja sirve para ahorrar tiempo y evitar peligros

Elegir a una pareja es tan dif¨ªcil como importante para los individuos de las distintas especies. A mejor elecci¨®n, mayores posibilidades de tener m¨¢s descendencia y perpetuar la gen¨¦tica. As¨ª, gracias al fen¨®meno del mate-choice copying se explica por qu¨¦ las hembras que copian las elecciones de otras tienen mayor ¨¦xito reproductivo que las que no lo hacen.

La elecci¨®n de pareja reproductiva "es un fen¨®meno especialmente costoso para las hembras, porque realizan una mayor inversi¨®n parental y deben ser m¨¢s selectivas", explica Malo. Los costes a los que se refiere son el tiempo y la energ¨ªa que deben dedicar, los riesgos de ser atacadas por depredadores, y la incertidumbre. Por eso, "copiar la elecci¨®n de pareja ahorra esfuerzo, de manera que se aprovecha el trabajo de otras hembras. Es como si el macho elegido hubiera pasado un examen de calidad. Si una hembra lo ha elegido antes es porque tiene las cualidades deseadas".

Funciona por pura atracci¨®n, sin reflexi¨®n

El mate-choice copying tambi¨¦n podr¨ªa agilizar la evaluaci¨®n de rasgos de inter¨¦s de la pareja como las capacidades de un macho como padre y ayudar ante la falta de experiencia que pueden tener las hembras j¨®venes para evaluar con ¨¦xito la calidad de sus parejas, a?ade Pau Carazo, investigador del laboratorio de Etolog¨ªa del Instituto Cavanilles de Biodiversidad y Biolog¨ªa Evolutiva de la Universidad de Valencia: "En determinadas circunstancias resultar¨ªa adaptativo atender a lo que se denomina informaci¨®n p¨²blica (lo que hacen las dem¨¢s hembras) y no depender exclusivamente de la percepci¨®n propia".

Esta forma de actuar de las hembras no es algo consciente, indica Carazo: "No es que la hembra de pez guppy reflexione sobre el hecho de que otras hembras han escogido a un macho y eso pueda significar que no est¨¦ tan mal como ella pensaba inicialmente. Simplemente se trata de que percibir que un macho se ha apareado o ha sido escogido por otras hembras hace que resulte m¨¢s atractivo, y viceversa".

Y los hombres, ?tambi¨¦n prefieren a mujeres con pareja?

Este mismo fen¨®meno ocurre tambi¨¦n en los seres humanos, seg¨²n han descubierto otras investigaciones del campo de la psicolog¨ªa evolucionista. En 2006, un peque?o estudio publicado en el Canadian Medical Association Journal concluy¨®, tras estudiar el comportamiento de 38 mujeres con una media de 20 a?os, que los hombres casados resultan m¨¢s atractivos que los solteros,?algo que en la psicolog¨ªa popular recibe la denominaci¨®n del "efecto del anillo de bodas", como ahondaba una investigaci¨®n de Human Nature en 2003, a cargo de la Universidad de Gotemburgo. Otro estudio de 2008 en el Personality & Social Psychology Bulletin encontr¨® que las mujeres ven m¨¢s atractivos a hombres a los que se presenta rodeados de mujeres especialmente atractivas.

La duda que asalta es si esto ocurre tambi¨¦n a la inversa. Es decir, si los hombres se sienten m¨¢s atra¨ªdos por mujeres casadas o que gustan a muchos. El fen¨®meno, apunta Carazo, est¨¢ mucho menos estudiado en machos que en hembras en el campo de la biolog¨ªa. "La raz¨®n fundamental es que la elecci¨®n de pareja es un proceso mucho m¨¢s importante en hembras que en machos", se?ala este investigador.

Los machos de la mayor¨ªa de las especies, destaca este bi¨®logo evolucionista, invierten menos tiempo y recursos que las hembras en el desarrollo y la cr¨ªa de la progenie, desde la producci¨®n de los gametos femeninos (relativamente m¨¢s costosos en comparaci¨®n con los espermatozoides) hasta la gestaci¨®n. "El resultado de esta asimetr¨ªa fundamental es que machos y hembras desempe?an papeles diferentes. La evoluci¨®n favorece a los machos capaces de monopolizar la descendencia del mayor n¨²mero de hembras invirtiendo lo menos posible en cada cr¨ªa, y a las hembras que se apareen preferentemente con los machos de mayor calidad gen¨¦tica o con aquellos que aporten m¨¢s recursos a la reproducci¨®n", describe Carazo.

El fen¨®meno no se da con la misma intensidad en hombres que en mujeres, comparte el psiquiatra Pablo Malo, aunque algunas investigaciones muestran que las mujeres casadas pueden provocar la misma atracci¨®n, algo que tambi¨¦n puede ocurrir en otras especies. ¡°En el estudio mencionado del Personality & Social Psychology Bulletin se encuentra precisamente lo contrario: las mujeres rodeadas de hombres atractivos atraen menos a los hombres. Adem¨¢s, en algunos casos, las mujeres no se sienten atra¨ªdas hacia los hombres casados, porque los ven inalcanzables o fuera del mercado. Pero hay que analizar cada investigaci¨®n con cuidado y ver el contexto. Es importante definir bien las condiciones del estudio¡±, recalca este psiquiatra.

Tambi¨¦n funciona con otros objetos de deseo

La copia de elecci¨®n de pareja tambi¨¦n podr¨ªa ir m¨¢s all¨¢ del ¨¢mbito de las relaciones personales. Seg¨²n un estudio publicado por Scientific Reports, la informaci¨®n social influye en nuestra elecci¨®n de caras atractivas, pero tambi¨¦n de manos y, m¨¢s all¨¢ de los atributos f¨ªsicos, afecta en la selecci¨®n de obras de arte. "Imitar a los dem¨¢s tiene ventajas porque reduce costes", afirma Malo. Por esto, a?ade, "deber¨ªa ser una estrategia a emplear siempre que estemos ante una elecci¨®n dif¨ªcil".

"Est¨¢ demostrado que imitamos lo que hace la mayor¨ªa, y lo que hacen las personas de prestigio. Esto se observa en la vida diaria, en campos como la moda, y la psicolog¨ªa popular lo refleja con refranes como al pa¨ªs donde fueres haz lo que vieres. Es evidente que copiar a las personas exitosas es un movimiento l¨®gico si queremos tener ¨¦xito", contin¨²a Malo.

Otra cuesti¨®n que suscita este comportamiento corresponde a si la copia de elecci¨®n de pareja tambi¨¦n se aplica al otorgar valor a objetos que otras personas poseyeron antes, como sucede en las subastas o de las reliquias. "Es un tema muy debatido. Los psic¨®logos evolucionistas explican el fen¨®meno como algo limitado a la elecci¨®n de pareja, pero otros autores dicen que esto es un fen¨®meno de dominio general", explica este psiquiatra.

La estrategia de la elecci¨®n de pareja tambi¨¦n se relaciona con otro tipo de comportamiento cuando hay que tomar decisiones. "Dentro de las llamadas leyes de la magia simp¨¢tica, tendr¨ªa que ver con la ley del contagio", contin¨²a Malo. El experto explica que esto se ocurre, por ejemplo, "cuando se paga mucho dinero por el piano de John Lennon porque la gente supone que algo que estuvo en contacto con ¨¦l tiene alguna propiedad especial". Pero esa ley tambi¨¦n tiene su reverso: "Otros experimentos han mostrado que la gente no querr¨ªa vestir prendas que hubieran sido utilizadas por Hitler o por un asesino m¨²ltiple, aunque estuvieran lavadas y esterilizadas", apunta Malo.