Siria, cortina de humo para tapar a Trump
El Pent¨¢gono intenta refrenar al presidente que busca desviar la atenci¨®n del caos de su mandato
Washington, jueves, 6.03 de la ma?ana. Desde su dormitorio de la Casa Blanca, el presidente Trump, empapado por la visi¨®n del mundo proyectada por su programa de televisi¨®n favorito, Fox and Friends, una tertulia en la ultramontana cadena Fox que fabrica el guion de su presidencia, tuitea: ¡°Yo nunca dije cu¨¢ndo ser¨ªa el ataque contra Siria, podr¨ªa ser muy pronto o no tan pronto¡±. El mundo contiene el aliento porque 24 horas antes, el imprevisible presidente hab¨ªa alertado: ¡°Prep¨¢rate Rusia, porque los que vendr¨¢n ser¨¢n misiles bonitos, nuevos e inteligentes¡±.
Anunciaba as¨ª el castigo contra la Siria de El Asad, apoyada por Rusia, por el supuesto empleo de armas qu¨ªmicas contra la poblaci¨®n civil: 43 muertos y centenares de heridos. El plat¨® circense en que ha convertido a la Casa Blanca funciona desde el amanecer con ocurrencias de 140 caracteres. D¨ªas antes, en el colmo de la contradicci¨®n, Trump hab¨ªa exigido sacar de Siria las 2.000 tropas estadounidenses que permanecen en el pa¨ªs. El Pent¨¢gono hizo tragarse a Trump la idea inmediatamente. Esa misma ma?ana The New York Times advert¨ªa en su editorial, ¡°viene la ley Mr. Trump¡±.
Criticaba con dureza el peri¨®dico la respuesta de Trump ante el registro, ordenado por un juez federal, de las oficinas y el hotel del abogado personal del presidente, a petici¨®n del FBI, que consider¨® un ¡°vergonzoso ataque contra la naci¨®n¡±. Y recordaba lo obvio: ni siquiera el presidente est¨¢ por encima de la ley. El registro buscaba posibles delitos en la financiaci¨®n de la campa?a presidencial, uso de dinero para tapar la boca de un par de amantes de Trump, fraude bancario.
Fue autorizado por el n¨²mero dos del Ministerio de Justicia, a quien el presidente pretende cesar por haber permitido el nombramiento del fiscal especial, Robert Mueller, que investiga el Rusiagate. Tambi¨¦n sopesa Trump cesar a Mueller, replicando la matanza del s¨¢bado por la noche, en la que Nixon, puso en la calle al fiscal del Watergate, que provoc¨® la dimisi¨®n del ministro de Justicia, lo que aceler¨® el final del presidente.
El carnaval de desgobierno en el que se ha sumido la presidencia, con la crisis internacional agudizada, exige una acci¨®n de desv¨ªo radical de la atenci¨®n. El ataque a Siria. Una cortina de humo, como la que describi¨® la genial pel¨ªcula de Hollywood, con ese nombre en Espa?a, con Robert de Niro y Dustin Hoffman. Un presidente de EE?UU tapaba un esc¨¢ndalo sexual provocando una guerra falsa en Albania. Clinton atac¨® Serbia para enmascarar el esc¨¢ndalo de la becaria Monica Lewinsky.
La guerra de Siria puede dejar de ser regional, para enfrentar por error de c¨¢lculo a dos grandes potencias, EE?UU y Rusia, m¨¢s Ir¨¢n, lo que explica la cautela del Pent¨¢gono, que trata de frenar los impulsos de un presidente sin estrategia en Oriente Medio, Rusia o China. Queda confirmar las pruebas del ataque con clorina y coordinar el ataque con Francia y Reino Unido. En la falsa producci¨®n de Hollywood, el presidente se salv¨®. Trump lo tiene dif¨ªcil. Contin¨²a el suspense en Washington.
fgbasterra@gmail.com
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