Ni?os consentidos: 9 pautas para educar con sentido

?Su hijo no acepta un no por respuesta y se instala en el enfado constante cuando no consigue lo que quiere? Es posible que su educaci¨®n est¨¦ basada en el consentimiento, la permisividad y la falta de l¨ªmites o normas. Un ni?o consentido no nace, se hace y puede crear problemas de convivencia en casa como rabietas, agresividad o enfrentamientos y peleas habituales con personas de su entorno. ¡°Son ni?os muy demandantes y caprichosos. No saben manejar el enfado y de ah¨ª surge la rabia y consigo las rabietas. A medida que crecen, nos encontramos conductas todav¨ªa m¨¢s agresivas, como peleas y conductas impulsivas¡±, explica Gema Jos¨¦ Moreno, psic¨®loga infanto-juvenil.

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Un ni?o consentido se muestra enfadado, insatisfecho, infeliz, dependiente de otras personas. ¡°Carece de habilidad para establecer relaciones afectivas, vive en el enojo constante, por lo que al no recibir lo que quiere de los dem¨¢s compa?eros, suele entrar en conflicto con el resto, retarles y quedarse solo. Suele mostrarse insatisfecho la mayor parte del tiempo, es infeliz porque cuando consigue algo, pierde el inter¨¦s por ello r¨¢pido y a medida que obtiene lo que quiere, su comportamiento empeora¡± explica la psic¨®loga, Gema Jos¨¦ Moreno. Los ni?os consentidos se caracterizan por ser dependientes de terceros debido a que carecen de l¨ªmites y no suelen tener tareas de responsabilidad, como ordenar su habitaci¨®n.

Cuando el ni?o asimila que es ¨¦l quien decide y se convierte en caprichoso e irresponsable, acaba por parecerse a un peque?o tirano, de ah¨ª la denominaci¨®n de s¨ªndrome del emperador para ni?os consentidos, cuyos progenitores evitan ponerles normas y l¨ªmites para evitar enfrentamientos. ¡°Los padres se centran en proveer al ni?o de la mayor parte de cosas materiales que demanda para compensar la falta de tiempo que se le dedica y se opta por entretenerle con la tablet o el m¨®vil, con lo cual se deja de lado la educaci¨®n en valores. Lo que el ni?o aprende as¨ª es que a trav¨¦s de una conducta negativa obtiene una consecuencia positiva, es decir, un consentimiento¡±, aclara Gema Jos¨¦ Moreno.

Pautas para evitar ni?os consentidos en casa

Evitar errores en la educaci¨®n de nuestros hijos que generen actitudes consentidoras con ellos por parte de los progenitores se puede conseguir con pautas como las que apunta, Sonia Buend¨ªa Lozano, Psicopedagoga y orientadora educativa de los colegios de la Fundaci¨®n de Santamarca y de San Ram¨®n y San Antonio (Fusara):

1. Educar a los hijos desde la autoridad y el cari?o.
2. Tener normas coherentes, claras, realistas y adecuadas a su edad, que tengan consecuencias por su incumplimiento.
3. Ser firmes desde el amor.
4. Evitar ceder en las situaciones dif¨ªciles.
5. Ofrecerles una educaci¨®n rica en valores.
6. Darles la oportunidad de tropezar, caer y equivocarse.
7. Aceptar a los hijos de manera incondicional.
8. Dar espacio a la comunicaci¨®n, hablar de todo, compartir tiempo con ellos.
9. Evitar rendirse en el empe?o de educarlos, compartir intereses, preocuparnos por sus aficiones y gustos.

C¨®mo conseguir que el ni?o deje de estar consentido

Una vez que los progenitores detectan que su hijo es un tirano con s¨ªndrome del emperador ?qu¨¦ pueden hacer para reconducir la situaci¨®n?

¡°Lo importante es reconocer la circunstancia en la que nos encontramos con los ni?os, evitar culpabilizarse por ello, establecer nuevas normas familiares e implicar al colegio para reconducir la situaci¨®n. Los progenitores queremos ofrecer todo a nuestros hijos, pero tambi¨¦n debe ir unido a unos l¨ªmites claros, explicados y que el ni?o comprenda bien, para que sepa cu¨¢ndo se excede en su comportamiento y las consecuencias de ello¡±, explica la psic¨®loga Gema Jos¨¦ Moreno, que aclara que tambi¨¦n puede ayudar consultar con profesionales como profesores, psic¨®logos o psicopedagogos.

Cuando se descubre que nuestro hijo est¨¢ consentido conviene evitar culparse o cuestionarse como madre o padre y recordar que no por ello ¡°tu hijo es malo. Es aconsejable tener en cuenta que cuidar y querer deben ir unidos, con el fin de proporcionar a los hijos una educaci¨®n adecuada, pero con normas y l¨ªmites concretos para que crezcan en valores como el respeto, el cari?o o el esfuerzo y aprendan a considerar lo que tienen alrededor y a conseguir, por encima de todo, lo m¨¢s importante, a ser felices¡±.