Se vende icono de la arquitectura del siglo XX en Finlandia
Los propietarios del sanatorio de Paimio han comenzado a recibir ofertas sobre este edificio que fue candidato a ser Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO
En el sureste de Finlandia, a unos 30 kil¨®metros de la ciudad de Turku, entre bosques centenarios de pinos, abetos y abedules, la historia de la arquitectura europea del siglo XX cambi¨®, o al menos una parte importante. Entre 1929 y 1933 se construy¨® aqu¨ª el Sanatorio Paimio, la primera gran obra cercana al Movimiento Moderno del finland¨¦s Alvar Aalto (1898-1976). Una construcci¨®n funcionalista que posicion¨® al arquitecto dentro de esta corriente, junto a Le Corbusier o el espa?ol Jos¨¦ Luis Sert, y que supuso un punto de inflexi¨®n en su carrera.
El Sanatorio Paimio, nominado en varias ocasiones para ser Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y considerado uno de los edificios m¨¢s importantes de la historia de Finlandia, hoy est¨¢ en venta. Su propietario, el Hospital District of Southwest Finland, acaba de iniciar un periodo de licitaci¨®n del edificio que terminar¨¢ el 23 de agosto. En juego est¨¢ el futuro de este edificio que se construy¨® para enfermos de tuberculosis y posicion¨® a su pa¨ªs en el mapa del racionalismo mundial.
¡°El sanatorio de Paimio es la obra principal de la temprana carrera de Alvar Aalto; casi todos los finlandeses adultos podr¨¢n nombrar sus tres obras principales: la Biblioteca de Viipuri, La Casa Finlandia de Helsinki y el sanatorio de Paimio¡±, cuenta Sarri Vuorisalo-Tiitinen, directora del Instituto Iberoamericano de Finlandia.
Sin precio de partida para la oferta, el sanatorio est¨¢ formado por un grupo de edificios que se articulan hacia el exterior, en horizontal, con una gran terraza en la azotea que funcionaba como b¨¢lsamo curativo diario para los 296 enfermos que all¨ª se alojaron durante d¨¦cadas. ¡°El sanatorio lleg¨® a simbolizar el funcionalismo, deber¨ªa protegerse, no significa que no se pueda cambiar su antiguo uso, pero habr¨¢ que mantener el conjunto, no dividirlo; Finlandia est¨¢ ante una gran reforma de los servicios de salud, y es l¨®gico que su propietario no pueda conservar o quedarse con algo que ya no tiene uso¡±, a?ade Sarri.
El sanatorio pas¨® a ser hospital general en 1960 y, desde 2014, era centro de rehabilitaci¨®n para ni?os. Aalto lo dise?¨® como si fuera un instrumento m¨¦dico, trabajando su arquitectura, por primera vez, con el factor de la escala humana, es decir, con los usuarios como parte imprescindible del edificio, algo que se aplic¨®, a partir de aqu¨ª, a otros centros hospitalarios.
El arquitecto utiliz¨® los colores de sus paredes de forma terap¨¦utica, abri¨® grandes ventanales para que la luz natural ayudara a cuidar a los enfermos de pulm¨®n, increment¨® las transparencias en todo el edificio. ¡°Se teme que ahora alg¨²n propietario privado lo lleve demasiado lejos de su uso inicial, como lugar de descanso y bienestar, durante d¨¦cadas ya se han vendido y han desaparecido varios objetos originales del sanatorio¡±, remata Sarri.
De hecho, el sanatorio da nombre a otro de los iconos internacionales de Aalto, la silla Paimio, con una sola l¨¢mina de manera para asiento y respaldo, y que fue dise?ada para facilitar la respiraci¨®n de los pacientes. El funcionalismo al servicio de la salud de los ciudadanos, para cumplir aquella m¨¢xima que Aalto pronunci¨®: ¡°La arquitectura moderna no significa el uso de nuevos materiales, sino utilizar los materiales existentes en una forma m¨¢s humana¡±.
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