Reencuentro con la familia ant¨¢rtica

Han transcurrido casi seis meses desde que volv¨ª de la Ant¨¢rtida y siguen muy frescos en mi memoria los recuerdos del viaje y la estancia en la BAE Juan Carlos I, en isla Livingston. En todo este tiempo, he seguido manteniendo el contacto con algunas de las personas con las que compart¨ª aquella gran experiencia; la mayor¨ªa de ellos, investigadores polares. El colectivo de compatriotas que investigan en la Ant¨¢rtida y el ?rtico, as¨ª como los que participan en las campa?as cient¨ªficas, no supera las 500 personas. Pr¨¢cticamente todas ellas se conocen entre s¨ª, por lo que se trata de una gran familia. Tras mi participaci¨®n, como divulgador cient¨ªfico, en la XXXI Campa?a Ant¨¢rtica Espa?ola, tambi¨¦n me siento miembro de ella, donde he sido muy bien acogido.

A principios del mes de septiembre, reci¨¦n terminadas las vacaciones de verano, tuve ocasi¨®n de reencontrarme con un nutrido grupo de compa?eros de aventuras ant¨¢rticas. Esto fue posible gracias a la celebraci¨®n del IX Simposio de Estudios Polares, que, organizado conjuntamente por el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC) y el Instituto Geol¨®gico y Minero de Espa?a (IGME), consigui¨® reunir en la sede central del CSIC de Madrid a algo m¨¢s de 150 cient¨ªficos polares, que durante tres d¨ªas ¡ªdel 5 al 7 de septiembre¡ª dieron a conocer sus investigaciones y compartieron sus experiencias. El anterior simposio ¡ªel octavo¡ª se remonta al a?o 2011, por lo que la familia polar llevaba siete a?os sin reunirse por completo. En el Comit¨¦ Organizador del? simposio estaban pesos pesados de la investigaci¨®n polar en nuestro pa¨ªs, empezando por el presidente del mismo, Jer¨®nimo L¨®pez (actual presidente del Comit¨¦ Nacional del SCAR), y pasando por Antonio Quesada (actual secretario t¨¦cnico del Comit¨¦ Polar Espa?ol), Andr¨¦s Barbosa (Gestor del Programa de Investigaci¨®n Polar), Francisco Navarro y Leopoldo G. Sancho, entre otros.

El ambiente del simposio fue magn¨ªfico, existiendo una gran camarader¨ªa entre todos los participantes. Tambi¨¦n fue magn¨ªfica la calidad cient¨ªfica de los trabajos presentados, tanto a trav¨¦s de las 20 ponencias que se llevaron a cabo, como del casi centenar de posters que se expusieron. Todo ello ofreci¨® una visi¨®n muy completa de los diversos estudios que llevan a cabo nuestros investigadores en las regiones polares. La mayor¨ªa de esos trabajos (un 85%) estuvieron centrados en la Ant¨¢rtida, ya que es all¨ª donde Espa?a tiene instalaciones polares permanentes (las dos bases). En el ?rtico tambi¨¦n se llevan a cabo campa?as, pero participan en ellas muchos menos cient¨ªficos y no requieren de una log¨ªstica comparable a la de las campa?as ant¨¢rticas.

La diversidad de los temas abordados (glaciares, impactos medioambientales, permafrost, ping¨¹inos, l¨ªquenes, microbiolog¨ªa, clima, geomorfolog¨ªa¡­) dieron al simposio un gran atractivo, ya que puso al d¨ªa de todo lo que se est¨¢ haciendo a cualquier especialista o persona interesada en la investigaci¨®n polar, como es mi caso. Adem¨¢s, se celebraron tres mesas redondas que dieron mucho juego. El Comit¨¦ Organizador tuvo a bien invitarme como moderador de una de ellas, que llev¨® por t¨ªtulo Ciencia y log¨ªstica Polar. Las otras dos las moderaron la periodista cient¨ªfica Rosa Trist¨¢n y el periodista (y tambi¨¦n ant¨¢rtico) Valent¨ªn Carrera, y versaron sobre ?rtico-Ant¨¢rtida y el futuro de la investigaci¨®n polar, respectivamente.

Aunque el Simposio estaba centrado en la ciencia polar, su presente y su futuro, los debates que generaron las tres mesas redondas pusieron encima de la mesa un tema que no estaba en el guion: el de la divulgaci¨®n cient¨ªfica y el importante papel que debe de desempe?ar para dar a conocer a la sociedad lo que hacen nuestros cient¨ªficos en el ?rtico y la Ant¨¢rtida. Todo el mundo estuvo de acuerdo en que divulgar estos temas es crucial, pero se destaparon las dificultades que el actual sistema tiene para favorecer y potenciar esa labor divulgadora, no solo por parte de los cient¨ªficos implicados, sino tambi¨¦n a trav¨¦s de los profesionales que nos dedicamos a la divulgaci¨®n cient¨ªfica. En el futuro, conf¨ªo poder seguir formando parte de la familia ant¨¢rtica, unirme a la ¨¢rtica y contribuir a la difusi¨®n de la ciencia polar, formando parte de algunos de los proyectos, como un miembro m¨¢s.