Ampliar la baja maternal para alcanzar los seis meses de lactancia exclusiva

El debate contin¨²a en torno a los permisos de maternidad y paternidad. La propuesta admitida a tr¨¢mite en el Congreso plantea la equiparaci¨®n a 16 semanas para el padre a trav¨¦s de permisos de car¨¢cter intransferible. Quienes defienden esta f¨®rmula alegan que es la ¨²nica forma de lograr la verdadera ¡°igualdad¡±, evitar la discriminaci¨®n laboral e implicar a los padres en los cuidados. Algo que no comparten desde la Asociaci¨®n Espan?ola de Pediatri?a de Atencio?n Primaria (AEPap), como han expresado p¨²blicamente a trav¨¦s de un comunicado.

Explican a este peri¨®dico Rosa Alba?il, coordinadora del Grupo de Trabajo de Patolog¨ªa Infecciosa de la AEPap y Concha S¨¢nchez Pina, presidenta de AEPap, que los permisos maternos ¡°no deben implicar discriminaci¨®n laboral ni profesional per se, solo significan discriminaci¨®n si el conjunto de leyes que regulan la actividad laboral lo permite¡±. En ese sentido las portavoces recuerdan que los derechos laborales y profesionales deben garantizarse para las madres trabajadoras como para otros colectivos. ¡°No olvidemos que los permisos maternales son derechos adquiridos, que ha costado mucho que se reconozcan y que en gran parte de las sociedades desarrolladas, en las que las mujeres tienen un papel activo y plenamente reconocido, son de una duraci¨®n claramente m¨¢s prolongada que en nuestro pa¨ªs¡±, a?aden.

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Permisos de paternidad: iguales e intransferibles

Ni un solo d¨ªa de permiso de paternidad en casi un centenar de pa¨ªses

La postura de la AEPap es compartida por M.? Teresa Hern¨¢ndez Aguilar, pediatra y coordinadora Nacional de la Iniciativa para la Humanizaci¨®n de la Asistencia al Nacimiento y la Lactancia (IHAN), quien a?ade que ¡°la sociedad tiene que reconocer el trabajo reproductor y de cuidados de la mujer porque hacemos un doble trabajo¡±, refiri¨¦ndose a la maternidad y la contribuci¨®n laboral remunerada. Para la coordinadora de IHAN, no reconocer esta labor es una discriminaci¨®n.

El reto de los seis meses en exclusiva

El Comit¨¦ de Lactancia Materna de la AEPED, la Asociaci¨®n Americana de Pediatr¨ªa, UNICEF y la OMS, coinciden en que la lactancia materna es el alimento m¨¢s adecuado para los beb¨¦s y ni?os. En exclusiva durante los primeros seis meses de vida y complementada con alimentos saludables a partir de entonces, y sin fecha de caducidad: hasta que madre e hijo deseen. Seg¨²n la ¨²ltima Encuesta nacional de salud, en Espa?a un 73,9% de las madres dan el pecho a sus hijos a las seis semanas de vida, una cifra que desciende hasta el 39% al llegar a los seis meses de lactancia. Unos datos que pese a ser mejorables han ido en ascenso si pensamos en las cifras que arrojaba esa misma encuesta en 1995: un 60,5% a las seis semanas y un 15,1% a los seis meses.

Para facilitar el mantenimiento de la lactancia materna, y cumplir con las recomendaciones de las sociedades cient¨ªficas y la OMS, la AEPap considera que el objetivo prioritario debe ser ¡°prolongar el permiso de las madres al menos durante seis meses y que las licencias de los padres sean transferibles. Ambos deben ser remunerados¡±. Se?alan tambi¨¦n que ¡°si la modificacio?n legislativa no recoge este aspecto, las madres espan?olas no veri?an ampliada su baja en un solo di?a y seguiri?an siendo junto con las maltesas, las madres europeas con menos tiempo disponible de licencia remunerada¡±.

Para Jos¨¦ Mar¨ªa Paricio Talayero, pediatra y presidente de la Asociaci¨®n para la Promoci¨®n cient¨ªfico-cultural de la Lactancia Materna (APILAM), la idea de que los padres sean copart¨ªcipes de la crianza y que acabe habiendo igualdad de condiciones laborales para mujeres y hombres es muy positiva pero recuerda que no somos iguales biol¨®gicamente: ¡°Amamantar es el proceso natural que asegura la mejor salud para los hijos¡±. Confiesa el pediatra que no le ha sorprendido que ¡°cuando se trata de legislar algo que favorece a los hombres¡±, se haya aprobado a tr¨¢mite de inmediato mientras que para alargar el permiso de maternidad de las mujeres y adaptarlo a lo que preconizan las autoridades e instituciones sanitarias siempre ha habido excusas econ¨®micas o de otro tipo. ¡°Ni siquiera cumplimos la recomendacio?n 191 de la Organizaci¨®n Internacional del Trabajo, que preconiza desde el a?o 2.000 las 18 semanas de licencia de maternidad; y la recomendaci¨®n del parlamento europeo de hace unos a?os de llegar a 20 semanas fue retirada por motivos econ¨®micos. Es puro machismo que no se quiera encontrar presupuesto para ampliar 10 semanas a las madres y no exista ning¨²n problema para encontrarlo para los padres¡±, dice.

?Se facilitar¨ªa el amamantamiento a las madres que lo desean si, al menos, esas otras 16 semanas fueran transferibles? Opinan las pediatras Rosa Alba?il y Concha S¨¢nchez que la ley actual, 16 semanas de permiso remunerado para la madre, hace muy complicado a la inmensa mayor¨ªa de mujeres trabajadoras mantener una lactancia materna exclusiva y en muchos casos tambi¨¦n dificulta una lactancia materna y artificial simult¨¢nea. ¡°La ¨²nica forma de hacer posible una lactancia materna exclusiva hasta los seis meses de edad a todas las madres trabajadoras, y no solo a las que puedan permitirse solicitar permisos sin sueldo, es asegurar a la madre trabajadora un permiso remunerado con esa duraci¨®n, seis meses¡±, aseguran.

Lactancia en diferido o llevar al beb¨¦ al trabajo, las ¨²nicas opciones

Muchas mujeres se encuentran con verdaderos obst¨¢culos para amamantar despu¨¦s de las 16 semanas. Las necesidades econ¨®micas, las distancias al lugar de trabajo y los horarios imposibles hacen que madre e hijo pasen en la mayor¨ªa de casos un elevado n¨²mero de horas separados. Lo ha vivido Leticia B. D¨ªaz, periodista y madre de un hijo de seis a?os que tuvo que incorporarse a trabajar cuando su hijo ten¨ªa cinco meses y medio. ¡°Se lo llevaba su padre a la escuela infantil a las seis de la ma?ana, as¨ª que mis ma?anas comenzaban sobre las cinco d¨¢ndole el pecho a mi hijo y un rato m¨¢s tarde me extra¨ªa leche para hacer acopio de reservas que le pudieran dar a lo largo del d¨ªa las cuidadoras¡±, cuenta.

Recuerda aquella ¨¦poca como un momento muy dif¨ªcil. A la angustia por la separaci¨®n durante m¨¢s de doce horas se un¨ªa la necesidad de llevar el extractor de leche a todas partes: ¡°El extractor se convirti¨® en mi mejor amigo. Lo limpiaba y me lo llevaba al trabajo y all¨ª me extra¨ªa entre dos y tres veces al d¨ªa. Pero lo hac¨ªa presa de un estr¨¦s que no ayudaba a que la cosa fluyera. Me costaba bastante llegar a la cantidad que mi hijo necesitaba diariamente. Una vez en casa volv¨ªa a darle el pecho y, antes de irme a dormir, me volv¨ªa a sacar leche¡±. Mantuvo la lactancia en diferido hasta que cumpli¨® el a?o y empez¨® a tomar leche de vaca, pero su hijo ha seguido mamando hasta los cuatro a?os y medio todo el tiempo que han pasado juntos. Explica Leticia que aunque lo volver¨ªa a repetir igual, es un parche que se solucionar¨ªa con un permiso maternal de un a?o. ¡°No se me ocurre tarea m¨¢s importante que cuidar y formar a los ciudadanos del futuro¡±, dice.

Seg¨²n la propuesta presentada, ¡°la equiparaci¨®n de los permisos de ambos progenitores proporcionar¨ªa una situaci¨®n sustancialmente m¨¢s favorable a la lactancia materna que la actual¡±, ya que cuando las madres vuelvan al trabajo, el otro progenitor estar¨¢ disponible para contribuir a la alimentaci¨®n del ni?o con la leche de la madre. Las v¨ªas que encuentran para hacerlo son dos: facilitando el acceso a la criatura por parte de la madre en los tiempos de permiso una vez incorporada ella al puesto de trabajo, o la alimentaci¨®n en diferido con ayuda de las actuales ¡°facilidades¡± para conservar la leche materna. Una argumentaci¨®n ¡°rid¨ªcula¡± y que sigue siendo un ¡°parche¡± en opini¨®n del presidente de APILAM, quien se pregunta por qu¨¦ no hacer las cosas f¨¢ciles de entrada. ¡°Ya que parecen reconocer que la lactancia materna es importante durante m¨¢s tiempo que el permiso actual, si la madre tuviese una licencia adecuada no ser¨ªa preciso ni que le lleven al trabajo al beb¨¦ ni que se tenga que empezar a extraer leche de forma obligatoria¡±, a?ade Paricio.

Sobre la argumentaci¨®n de Podemos, las portavoces de AEPap recuerdan que el amamantamiento ¡°no se trata de una actividad ocasional o espor¨¢dica, sino de un acto que se realiza varias veces al d¨ªa, todos los d¨ªas, sin horario fijo, dependiendo de la demanda impredecible del beb¨¦¡±. Adem¨¢s, a?aden que ¡°en muchos centros laborales no existen espacios adecuados para la extracci¨®n ni conservaci¨®n de la leche ni el tiempo necesario para realizar la extracci¨®n para muchas mujeres¡± por lo que consideran que la mejor manera de crear condiciones para que las mujeres que desean lactar a sus hijos puedan hacerlo durante el mayor tiempo posible y al menos seis meses, ¡°es asegurar mediante un derecho propio y personal que pueda disponer de ese tiempo y con la proximidad que desee respecto a su hijo¡±.

Por ¨²ltimo, el presidente de APILAM cree que se debe lograr por pasos una ampliaci¨®n de la licencia materna inicialmente hasta los seis meses ¡°sin olvidar que se puede ir a m¨¢s¡±, y, alcanzados esos seis meses, elaborar un plan para aumentar la licencia parental. Tambi¨¦n ser¨ªa recomendable para el pediatra la adecuaci¨®n de salas de lactancia en las empresas para quienes contin¨²en amamantando tras la incorporaci¨®n a los seis meses.