Ni?os de tres a?os que no se mueven. ?C¨®mo hemos llegado hasta aqu¨ª?
Los ni?os espa?oles est¨¢n entre los m¨¢s obesos de Europa
El Departamento de Salud de EE UU ha publicado sus nuevas recomendaciones sobre ejercicio f¨ªsico y por primera vez en la historia incluye a los m¨¢s peque?os de las casas: el nuevo documento aconseja que los ni?os de entre tres y seis a?os realicen como m¨ªnimo tres horas de actividad f¨ªsica diaria. No es la primera vez que se emiten estas recomendaciones en el mundo. Hace a?os que en Espa?a se viene aconsejando una actividad m¨ªnima para los menores. La ¨²ltima, la de la Sociedad Espa?ola de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) en 2017, que indica que los menores de cinco a?os deben realizar cualquier actividad f¨ªsica durante 180 minutos diarios. ?Es que los juegos no son suficientes?
Cuando hablan de actividad f¨ªsica los expertos no se refieren a poner a un ni?o peque?o a levantar pesas ni a correr maratones: el informe sugiere que salten o correteen para mantener una buena salud ¨®sea y muscular; acciones que suelen estar incluidas en los juegos de los m¨¢s peque?os de forma natural, por lo que estas sugerencias pueden resultar un poco extra?as. Los datos de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) ayudan a explicar por qu¨¦ no lo son.
La prevalencia del sobrepeso y la obesidad en ni?os ha aumentado a un ritmo alarmante. M¨¢s de 41 millones de menores de cinco a?os y 124 millones de entre cinco y 19 a?os (unas diez veces m¨¢s que hace cuatro d¨¦cadas) engrosan las estad¨ªsticas de lo que se considera una epidemia. El problema es m¨¢s grave en los pa¨ªses pobres y en desarrollo de Asia y ?frica, pero ninguna parte del mundo se libra.
Seg¨²n la OMS, los ni?os espa?oles est¨¢n entre los m¨¢s obesos de Europa: un 18,1% sufre esta enfermedad y otro 23,2% tiene sobrepeso, apunta el estudio Aladino, realizado por la Agencia Espa?ola de Consumo Seguridad Alimentaria y Nutrici¨®n (Aecosan). Y en EE UU la obesidad infantil se sit¨²a en un 18,5%. Con estos n¨²meros es f¨¢cil entender las recomendaciones que se han hecho tanto en Espa?a como en EE UU. Pero, ?por qu¨¦ ganan tanto peso los ni?os?
Los ni?os pasan cada vez m¨¢s tiempo frente a dispositivos tecnol¨®gicos
El aumento de la obesidad en edades tan tempranas tiene su origen en el mismo factor que engorda a los adultos: la vida sedentaria. Los ni?os de corta edad pasan cada vez menos tiempo jugando en el parque o trasteando en los columpios, lo que implica una disminuci¨®n sustancial de su actividad f¨ªsica. "Solo el 30% de los espa?oles menores de 10 a?os cumple con las horas de deporte recomendadas al d¨ªa", destaca Gerardo Rodr¨ªguez, coordinador del Comit¨¦ de Promoci¨®n de la Salud de Asociaci¨®n Espa?ola de Pediatr¨ªa (AEPED), quien cita datos del proyecto Internacional Idefics, del Instituto Leibniz de Prevenci¨®n, Investigaci¨®n y Epidemiolog¨ªa. Y la situaci¨®n es m¨¢s grave entre las ni?as, solo 12% cumple con el tiempo de actividad f¨ªsica que necesita.
En lugar de estar jugando al aire libre, muchos se quedan m¨¢s tiempo en las guarder¨ªas o colegios hasta que sus padres pueden recogerlos y, dependiendo del tama?o del centro, de las aulas y del patio, las posibilidades de correr libremente var¨ªan. Adem¨¢s, al salir es cada vez m¨¢s frecuente que los padres, agotados tras la jornada laboral, opten por quedarse en casa y los dispositivos tecnol¨®gicos se convierten en una forma de pasar el tiempo. "Es un ocio sedentario que conforma a los padres, porque saben que el ni?o est¨¢ entretenido y a los peque?os les encanta por el despliegue de luces y colores. A cambio, pierden tiempo de estar en el exterior, que es un valor seguro para su salud y para el desarrollo motor", indica el experto.
Los mayores de cinco a?os tampoco cumplen con las recomendaciones
Tanto el nuevo documento del Departamento de Salud de EE UU como la semFYC recomiendan una hora diaria de actividad f¨ªsica a los mayores de cinco a?os. Tampoco se cumple y cada a?o la cosa va a peor. Entre otras razones, se apunta a un cambio en el ocio en edad escolar. Si antes se jugaba al bal¨®n prisionero o a la comba en la calle, ahora lo habitual es recluirse en casa ante una pantalla.
La ¨²ltima Encuesta de Salud de Espa?a (2017), publicada por el Ministerio de Sanidad, revela que el 76,1% de los menores entre los cinco y los nueve a?os pasan una hora o m¨¢s al d¨ªa frente a una pantalla y a partir de los 14 la cifra asciende hasta el 83,7%. La pauta es m¨¢s o menos similar en todos los pa¨ªses desarrollados.
"Vamos hacia una generaci¨®n de ni?os inactivos que los sit¨²a en un sendero muy peligroso", afirma el profesor Mark Tremblay, presidente de Active Healthy Kids e investigador en el CHEO Research Institute de Canad¨¢. "Tenemos una responsabilidad colectiva para invertir esa tendencia, ya que los ni?os sedentarios corren mayores riesgos desarrollar problemas f¨ªsicos, mentales y cognitivos. Y es la generaci¨®n que tendr¨¢ que hacer frente al cambio clim¨¢tico y a la r¨¢pida incorporaci¨®n de las tecnolog¨ªas. Esto exige que tengan buena salud para convertirse en adultos resilientes y capaces de sobrevivir en un mundo cambiante", sentencia.
Las horas de educaci¨®n f¨ªsica en los colegios no son suficientes
Detectado el problema, lo siguiente es atajarlo. "En los colegios, las clases de educaci¨®n f¨ªsica trabajan en ese sentido, pero no son suficientes", apunta Rodr¨ªguez. Transferidas las competencias de educaci¨®n a las comunidades aut¨®nomas, cada cual decide c¨®mo distribuir la carga lectiva. Lo m¨ªnimo, en primaria y secundaria, suele rondar las dos horas a la semana, que es poco.
"Dado que el centro educativo es el lugar m¨¢s apropiado para instaurar y mejorar un estilo de vida saludable, es urgente que se tomen las medidas necesarias para que la materia de Educaci¨®n F¨ªsica tenga un m¨ªnimo de tres horas lectivas obligatorias en todas las Comunidades Aut¨®nomas", reclama Alicia Mart¨ªn P¨¦rez, presidenta del Colegio de Licenciados en Ciencias de la Actividad F¨ªsica y el Deporte de Madrid (COPLEF Madrid).
Ense?arles a evitar los ascensores
Pero tampoco podemos delegar toda la responsabilidad en los colegios: "Las familias tienen que desempe?ar un papel importante para que esto no se quede solo en las clases, y que en vacaciones el menor no vuelva al sedentarismo. De ah¨ª, la necesidad de hacer campa?as de concienciaci¨®n globales que involucren a las autoridades educativas, ayuntamientos, famosos, etc¨¦tera, hacia la pr¨¢ctica del deporte en edades tempranas", apunta Rodr¨ªguez.
La estrategia, para este experto, debe ser la de aumentar la oferta de actividades extraescolares municipales de car¨¢cter deportivo a precios asequibles, aumentar las dotaciones de uso p¨²blico y movilizar a los propios progenitores a llevar una vida m¨¢s activa: "Gestos como evitar el ascensor, ir caminando a los sitios siempre que sea posible, salir con la bicicleta o forzarse los fines de semana a realizar alguna actividad f¨ªsica contribuyen a implantar esos patrones saludables en los ni?os, que est¨¢n en la edad en la que adquieren h¨¢bitos para toda la vida y hay que aprovecharlo", a?ade el experto.
Y nada de esto es balad¨ª, la OMS afirma que "los ni?os obesos y con sobrepeso tienden a seguir siendo obesos en la edad adulta y tienen m¨¢s probabilidades de padecer, a edades m¨¢s tempranas, enfermedades no transmisibles como la diabetes y las cardiovasculares". Lo importante es que tanto el sobrepeso como la obesidad y otras enfermedades "son en gran medida prevenibles", aclara la organizaci¨®n.
?Cu¨¢ndo puede mi hijo hacer 'running'?
Pero cuidado con las lesiones¡
Cuando los expertos recomiendan aumentar la actividad f¨ªsica de los ni?os no est¨¢n diciendo que haya que calzarles unas zapatillas y llevarlos a correr a la velocidad a la que lo hace un adulto. "Los padres entusiastas pueden ser un peligro para los cr¨ªos", avanza Juan Carlos ?lvarez, profesor de la Facultad de Ciencias de la Actividad F¨ªsica y el Deporte de la Universidad Europea: "Si un ni?o corre con un adulto, lo har¨¢ a un ritmo excesivo para sus posibilidades".
Dicho esto, ?running despu¨¦s del pa?al? S¨ª, pero con una retah¨ªla de condiciones, como esperar a los cuatro o cinco a?os, idear un plan personalizado para el menor (a usted que le acompa?e el vecino) y "no superar los 20 minutos diarios tres veces a la semana", concreta el profesor.
Adem¨¢s, ha de practicarse desde una perspectiva l¨²dica. "No recomendar¨ªa la competici¨®n hasta los 10 o 12 a?os", sigue. David Mu?oz Gonz¨¢lez, especialista en podolog¨ªa del hospital HM San Francisco, en Le¨®n, propone una distancia de entre 50 y 1.000 metros para los menores que empiezan. Y asegura que a los 8 a?os, estos ya podr¨ªan ingresar en alg¨²n club de atletismo, "pues el pie est¨¢ casi formado por completo".
Antes, recomienda ir al pod¨®logo para un estudio biodin¨¢mico y comprarle al ni?o unas zapatillas de running. El problema de la ausencia de tallas (muchas marcas no tienen por debajo de la 35) se resuelve buscando en Internet, interviene ?lvarez.
Aunque puedan para correr, los ni?os no son peque?os adultos, advierte un estudio de Clinical Journal of Sports Medicine: "Su anatom¨ªa y psicolog¨ªa se est¨¢n desarrollando y a¨²n no est¨¢n maduras". Se sabe que no amortiguan el trote como los mayores, por lo que su riesgo de lesi¨®n crece.
Y los expertos desaconsejan el marat¨®n hasta los 18 a?os. En algo s¨ª superan a sus padres: se recuperan antes de la fatiga, seg¨²n un estudio de Nature que midi¨® la frecuencia cardiaca de distintas franjas de edad tras un ejercicio intenso.
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