La Fundaci¨®n Bar?a cambia las reglas del juego
Ni?os y ni?as de diversos pa¨ªses escriben nuevas normas para el deporte a favor de la inclusi¨®n y la integraci¨®n en la primera campa?a global de la organizaci¨®n
M¨¢s all¨¢ del espect¨¢culo y los grandes estadios, el f¨²tbol es un lenguaje universal. Basta con cambiar las reglas para que una botella de pl¨¢stico o un trozo de papel se transforme en una pelota. La calle o el patio del colegio, en un campo improvisado. No importa el n¨²mero de jugadores, nadie se queda fuera. Sin rivales. Como deporte y como juego, a trav¨¦s del f¨²tbol muchos menores que viven en contextos de pobreza y exclusi¨®n recuperan su infancia, se evaden de realidades dif¨ªciles y se convierten en compa?eros e iguales.
Ese poder es el que ha querido potenciar la nueva campa?a global de la Fundaci¨®n Bar?a: Si cambiamos las reglas, cambia todo. Bajo ese lema se propone una revisi¨®n de las reglas del deporte para que no sean excluyentes, un cambio que favorezca la igualdad, el respeto y el trabajo en equipo. Para ello su creador, Jorge Mart¨ªnez (autor de la exitosa campa?a Pastillas contra el dolor ajeno), junto con la agencia Usted y la productora Garlic, ha viajado a tres continentes, hasta Colombia (Latinoam¨¦rica), Senegal (?frica) y Alemania (Europa), donde ha visitado el campo de refugiados de Boostedt. En todos estos lugares, su c¨¢mara ha filmado a ni?os de todas las edades para reivindicar con su acci¨®n y sus voces que nadie debe quedarse fuera de juego.
Oulimata perdi¨® a su padre cuando era solo una ni?a, tuvo que dejar los estudios y ponerse a trabajar a los 16 a?os para ayudar a su madre. El f¨²tbol le permiti¨® recuperar parte de aquella infancia perdida y le dio una v¨ªa de escape
¡°Los adultos estamos acostumbrados a hablar siempre por los peque?os y obviamos la perspectiva que ellos pueden darnos¡±, cuenta Mart¨ªnez. ¡°Su inocencia les otorga la capacidad de creer que todo es posible, que nada es inalcanzable. Una especie de revoluci¨®n que puede cambiarlo todo¡±, contin¨²a. Esa es la visi¨®n que el publicista busca en todas sus campa?as, como sucedi¨® con Un juego llamado esperanza, creada tambi¨¦n para la Fundaci¨®n Bar?a y en la que participaron periodistas de EL PA?S como Juan Cruz o Mart¨ªn Caparr¨®s. En ella, se contaba la historia de cinco ni?os, "cinco ejemplos representativos del m¨¢s de un mill¨®n de ni?os de todas partes que son beneficiarios de los proyectos de la Fundaci¨®n Bar?a, y de los que realiza con alianza con otras entidades".
Entre ellos se encontraba Nupur, una joven de Banglad¨¦s, que gracias al deporte y al f¨²tbol pudo demostrarse a s¨ª misma su propia val¨ªa: ¡°En un pa¨ªs musulm¨¢n en el que ni?os y ni?as no juegan nunca, que ellas puedan hacerlo como iguales, junto a ellos, es incre¨ªble. Gracias a la Fundaci¨®n, he visto como las ni?as se sent¨ªan poderosas y fuertes¡±. Tambi¨¦n fue protagonista Oulimata, una joven senegalesa con la que ahora han vuelto a contar para escribir las nuevas reglas del juego. ¡°Oulimata perdi¨® a su padre cuando era solo una ni?a, tuvo que dejar los estudios y ponerse a trabajar a los 16 a?os para ayudar a su madre. El f¨²tbol le permiti¨® recuperar parte de aquella infancia perdida y le dio una v¨ªa de escape¡±.
Ahora, con estas nuevas "reglas", la Fundaci¨®n Bar?a busca desafiar el concepto de juego, entendido no solo desde una ¨®ptica deportiva, sino vital. ¡°Lo que miles de ni?os y ni?as hacen sobre el campo tiene repercusi¨®n directa sobre ellos. En su formaci¨®n, en su car¨¢cter, en las relaciones que tienen con los dem¨¢s, en su estado de ¨¢nimo, y sus ilusiones. El terreno de juego tambi¨¦n es fundamental para aprender valores y humanidad¡±, cuenta Joan Marcet desde la Fundaci¨®n. Desde una concepci¨®n global, esta campa?a es la primera que lanzan con un car¨¢cter internacional. Por eso, entre sus objetivos tambi¨¦n est¨¢ el de recordar que todos los ni?os y ni?as tienen derecho a la salud, la educaci¨®n y la protecci¨®n, independientemente del lugar del mundo donde hayan nacido.
Los ni?os han hablado. Las nuevas reglas est¨¢n sobre la mesa, 11 l¨ªneas imprescindibles que deber¨ªa tenerse en consideraci¨®n m¨¢s all¨¢ del campo de f¨²tbol. En la calle, en la escuela, en casa y en la vida. Reglas dictadas desde la infancia, que deber¨ªan aplicarse los adultos.
11 normas para todo y todos
Para que se produzca el cambio, la campa?a #Bar?aNuevasReglas propone 11 normas de equipo:
Regla 1: El campo
El mundo es un campo gigante. No importa si no es rectangular. O si es cuesta. O si lo tenemos que pintar.
Regla 2: El equipo
Jugamos todos. Y todos somos todos.
Regla 3: El rival
Ambos equipos ser¨¢n uno. No jugamos contra nadie, jugamos con los dem¨¢s, a su lado. Sin violencia y sin miedo. Si el rival cae, le ayudaremos a levantarse. Si falla, le animaremos. Y si marca, lo felicitaremos.
Regla 4: El resultado
Al final del partido nadie pierde. Todo el mundo gana.
Regla 5: El bal¨®n
El bal¨®n ser¨¢ de cuero, pl¨¢stico, papel o imaginario. Si no hay, nos inventamos uno.
Regla 6: El toque
Se podr¨¢ tocar el bal¨®n con los pies, las manos, la muleta, la silla o lo que a cada uno le sea necesario para participar.
Regla 7: La enfermedad
Una enfermedad no nos podr¨¢ apartar del equipo. Haremos pi?a y con el grupo a nuestro lado tendremos m¨¢s fuerza y m¨¢s ilusi¨®n.
Regla 8: El bullying
Con el bullying no jugamos.
Regla 9: Los refugiados
Antes que refugiados somos ni?as y ni?os.
Regla 10: El ¨¢rbitro
Somos ¨¢rbitros de nuestras vidas. Y para conseguirlo, decidimos jugar siempre que podamos.
Regla 11: Siempre
Estas reglas no solo valen para jugar.
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