Alfonso Cuar¨®n: regreso a Roma

El director vuelve al barrio de Ciudad de M¨¦xico donde se crio y rod¨® su pel¨ªcula
HAY UN PERSONAJE clave en la pel¨ªcula Roma que no est¨¢ en los cr¨¦ditos y que aparece en pantalla tan solo durante un momento. Sobre todo lo escuchamos, pero no lo vemos. Sin embargo, deja una profunda huella emocional en el filme.
Se trata de un vendedor de camotes, o batata, un personaje antiguo en la populosa comunidad de vendedores ambulantes de Ciudad de M¨¦xico. De ¨¦l tan solo escuchamos su llamado distintivo en varias ocasiones a lo largo de la pel¨ªcula: un silbato de vapor que emite un pitido agudo que se desvanece, poco a poco, en tono y volumen. Es quiz¨¢ uno de los sonidos m¨¢s tristes que haya escuchado; evoca el anhelo y la pena, las oportunidades desaprovechadas, el amor perdido.
¡°Supermelanc¨®lico¡±, dijo Alfonso Cuar¨®n, quien escribi¨® y dirigi¨® la pel¨ªcula aclamada por la cr¨ªtica. ¡°Siempre hay un sentimiento de soledad que acompa?a a ese silbido¡±.
Cuar¨®n, de 57 a?os, estaba conmigo en una camioneta atascada en el tr¨¢fico en Ciudad de M¨¦xico una ma?ana reciente. El director, que ahora vive en Londres, hab¨ªa vuelto a la capital mexicana para un breve viaje promocional de su pel¨ªcula, una de las favoritas para los Oscar. All¨ª habl¨® de Roma y me ense?¨® la colonia donde creci¨®, tambi¨¦n llamada ¡°la Roma¡±.
En la pel¨ªcula, el vendedor de camotes tiene compa?¨ªa: el recolector de basura que toca la campana, el afilador que toca una flauta, el vendedor de miel que grita como quien llama a un perro perdido. Estos pregones y llamados son parte del ca¨®tico paisaje auditivo de Ciudad de M¨¦xico, y tan conocidos entre los residentes actuales como lo fueron en los a?os ?setenta, ¨¦poca en la que ocurren los sucesos retratados en Roma.

La pel¨ªcula, basada en la infancia de Cuar¨®n, trata la relaci¨®n entre una trabajadora dom¨¦stica y sus patrones, una familia mexicana de clase media que se desintegra.
No obstante, el filme tambi¨¦n habla de un lugar ¡ªla misma Ciudad de M¨¦xico¡ª en un momento convulso de su historia moderna. La pel¨ªcula desencadena cuestionamientos importantes acerca del clasismo, de las diferencias entre grupos raciales y de las aspiraciones de un pa¨ªs en v¨ªas de desarrollo. Gran parte de la cinta fue grabada en interiores, sobre todo dentro de una casa que se adapt¨® para que se pareciera al hogar de la infancia de Cuar¨®n.
Sin embargo, incluso cuando la c¨¢mara est¨¢ dentro del hogar, los sonidos de la ciudad la siguen. Durante algunas de las escenas m¨¢s silenciosas, el rugido distante del tr¨¢fico y los cl¨¢xones, los ladridos de los perros y el coro de los vendedores callejeros logran entrar al lugar, como para recordarnos que esta enorme ciudad, un monstruo creciente, acecha al otro lado de la puerta: quiz¨¢ insistiendo en que se trata de un personaje que, por m¨¦rito propio, exige respeto.
Cuar¨®n: ¡°El punto de partida fueron las heridas personales y las familiares, y tambi¨¦n otras que compart¨ª con todo el pa¨ªs¡±
Le expongo esta idea a Cuar¨®n para ver si entend¨ª bien. ¡°Esa fue la intenci¨®n¡±, dijo. ¡°Todas las ciudades tienen su propio paisaje sonoro¡±. El director opina que, de la familia al centro de la historia, la pel¨ªcula trata del contexto social m¨¢s amplio. ¡°El punto de partida eran las heridas personales, las heridas familiares, pero tambi¨¦n otras heridas que compart¨ª colectivamente con todo el pa¨ªs y quiz¨¢ con la humanidad¡±, se?ala. ¡°La presencia de la ciudad, en ese sentido, es fundamental¡±.
El conductor de la camioneta se adentr¨® en la colonia Roma. Dentro de la burbuja del veh¨ªculo, el estruendo de la ciudad sonaba como un ronroneo lejano. ¡°Qu¨¦ bonita colonia¡±, dijo Cuar¨®n, al se?alar una cuadra de edificios con toques de art nouveau y art d¨¦co. ¡°Mira nada m¨¢s la arquitectura. Hay zonas que s¨ª tienen ¨¢rboles. ?Aqu¨ª, en Ciudad de M¨¦xico!¡±. La colonia se desarroll¨® en su mayor parte a principios del siglo XX, pensada para la ¨¦lite de la ciudad. Hab¨ªa enormes mansiones frente a bulevares llenos de ¨¢rboles, y se establecieron plazas frondosas y parques para emular el estilo de los espacios verdes en las capitales de Europa Occidental. La popularidad de la zona entre los m¨¢s adinerados comenz¨® a desaparecer alrededor de mediados del siglo XX, cuando muchos residentes se mudaron a ¨¢reas cada vez m¨¢s de moda lejos del centro de la ciudad o a suburbios. Los reemplaz¨® en el vecindario la clase media ¡ªprofesionales liberales, bur¨®cratas, propietarios de negocios¡¡ª, como explica Enrique Krauze, prominente historiador y escritor mexicano. El crimen y otras dificultades de la vida urbana tambi¨¦n prevalecieron. ¡°En 1970 y 1971, los a?os que Cuar¨®n recrea en Roma, el vecindario era un laboratorio de coexistencia real, no idealizada, con sus escuelas de prestigio y sus cabar¨¦s y prost¨ªbulos¡±, escribi¨® Krauze en un ensayo reciente acerca de la relevancia social y cultural de la Roma.

Cuar¨®n viv¨ªa en una calle en la zona conocida como Roma Sur. Cuando era peque?o, la Roma Sur era menos pr¨®spera y m¨¢s desgastada que la otra mitad de la colonia, la Roma Norte. La gente menospreciaba esta zona; la llamaba ¡°la Ro?a¡±.
Le dije al cineasta que yo viv¨ªa en Roma Norte. ¡°El mejor lado¡±, dijo, quiz¨¢ con un toque ir¨®nico.
La Roma se vio muy afectada por el devastador terremoto de 1985, que aceler¨® la salida de la gente adinerada y la desintegraci¨®n del vecindario. Sin embargo, durante la ¨²ltima d¨¦cada, la zona se ha recuperado y se ha convertido una vez m¨¢s en un v¨®rtice de la clase burguesa y en lugar de moda, con una vida social en auge y cafeter¨ªas, galer¨ªas de arte, boutiques, restaurantes y bares. Con el renacer, las fronteras que distingu¨ªan a la Roma Norte de la Roma Sur se han desdibujado, aunque no por completo.

¡°Creo que la Roma Sur todav¨ªa es m¨¢s atrevida¡±, dijo Cuar¨®n, y agreg¨® que valoraba que la Roma Sur a¨²n cuenta con muchos negocios familiares y talleres de oficios, algunos con las mismas texturas que recuerda de su infancia.
Nos estacionamos a unos pasos de la avenida de los Insurgentes, una gran v¨ªa p¨²blica que separa a la Roma Sur de la Condesa, su colonia vecina. Las puertas de la camioneta se abrieron y nos encontramos con un ca¨®tico paisaje auditivo de vendedores ambulantes y de tr¨¢fico. Caminamos por la acera, llena de comerciantes que venden carcasas para celulares y joyer¨ªa barata, as¨ª como dulces y lentes oscuros, servicios de manicura y lustrado de zapatos. Cuar¨®n se detuvo en la intersecci¨®n de las avenidas de los Insurgentes y el Eje 3, Baja California, donde confluyen r¨ªos de peatones, veh¨ªculos particulares, transporte p¨²blico y vendedores ambulantes. Una r¨¦plica de la intersecci¨®n ¡ªcreada para lucir como lo hac¨ªa a principios de los a?os setenta¡ª aparece en la pel¨ªcula cuando el personaje principal, Cleo, corre tras los ni?os del hogar. La intersecci¨®n es m¨¢s tranquila y ordenada en pantalla, la manera en que Cuar¨®n la recuerda.
El director de Roma dijo que en su juventud era un lugar lleno de aspiraciones; que busc¨® reflejar ese esp¨ªritu a trav¨¦s de los negocios que eligi¨® mostrar en la pel¨ªcula, como una agencia de viajes y el consultorio de un veterinario. ¡°Costaba m¨¢s llevar al hospital a tu perro que a los ni?os¡±, dijo Cuar¨®n, quien alz¨® la voz casi al punto de gritar en medio del estr¨¦pito. ¡°Cuando ven¨ªas aqu¨ª, era el sue?o del cosmopolitismo y la modernidad que M¨¦xico comenz¨® a experimentar durante ese periodo¡±.
El papel de la actriz Yalitza Aparicio ha avivado el debate de la escasa representaci¨®n ind¨ªgena en la cultura popular mexicana
Sin embargo, ahora hay un tumulto urbano sin mucho ton ni son. Esa tarde hab¨ªa tiendas de abarrotes y salones de u?as al lado de edificios de oficinas y tiendas de ropa. ¡°Conmoci¨®n, as¨ª¡±, dijo el director, mientras ve¨ªa a su alrededor. Su mente regres¨® al pasado de nuevo: ¡°Casi se sent¨ªa la emoci¨®n de llegar a un lugar sofisticado, moderno, ?sabes?¡±. Regresamos al auto, desde donde una vez m¨¢s esquivamos las densas multitudes de peatones y vendedores sobre Insurgentes. Pasamos por donde hab¨ªa anuncios de Roma cerca de una parada de autobuses. La pel¨ªcu?la ha sido muy bien recibida en M¨¦xico tanto por los cr¨ªticos como por el p¨²blico. En un puesto de revistas, Cuar¨®n vio una foto de Yalitza Aparicio, quien interpreta a Cleo, en la portada de una revista mexicana. ¡°Eso me hace muy feliz¡±, dijo, al se?alar la fotograf¨ªa. Las im¨¢genes de Aparicio en las revistas han despertado debates acerca de la falta de representaci¨®n de los ind¨ªgenas mexicanos en la cultura popular y la publicidad y, de manera m¨¢s general, acerca del racismo y el clasismo tan arraigados en M¨¦xico. ¡°Estoy feliz de que el tema haya salido a flote y se est¨¦ analizando¡±, coment¨®.
De regreso en el auto, Alfonso Cuar¨®n pidi¨® al conductor que se dirigiera a la calle de Tepeji, el lugar donde creci¨® y que estaba a unas cuantas cuadras de ah¨ª. Es una calle residencial estrecha donde la mayor¨ªa de las construcciones son casas modestas de dos pisos. Cuar¨®n lament¨® los tipos de cambios que han hecho los propietarios de varios edificios desde los a?os sesenta y setenta y que cubrieron algunos de los detalles que conformaban el encanto de la arquitectura de la colonia. ¡°Cuando tuvieron un poco de dinero, las personas comenzaron a modernizar sus casas porque quer¨ªan ser parte de la nueva ¨¦poca¡±, explic¨®. ¡°?Ves esas ventanas con aluminio?¡±, a?adi¨®, al se?alar una casa. ¡°Se supon¨ªa que eran modernas. Ve esas puertas¡±, dijo se?alando otra casa, ¡°est¨¢n horribles¡, o todos esos azulejos ah¨ª que cubren lo que hab¨ªa sido hermoso¡±.

Cuar¨®n y su equipo de producci¨®n fueron meticulosos al recrear c¨®mo eran las cosas y c¨®mo las recordaba ¨¦l. Busc¨® poder filmar en tantas localizaciones originales como fuera posible y lo lograron en algunos casos, incluida la recreaci¨®n de la masacre del Corpus Christi, o el Halconazo, cuando fuerzas paramilitares atacaron a estudiantes durante una manifestaci¨®n en 1971. Sin embargo, en otros casos las localizaciones originales hab¨ªan sido transformadas muy radicalmente, en ocasiones debido a la reconstrucci¨®n despu¨¦s del terremoto de 1985, y el equipo se vio obligado a recrearlas desde cero.
El proceso comenz¨® con largas conversaciones entre Alfonso Cuar¨®n y el dise?ador de producci¨®n de la pel¨ªcula, Eugenio Caballero, quien tambi¨¦n creci¨® en la colonia Roma. Ambos complementaron estas charlas con una exhaustiva investigaci¨®n de archivos. Construyeron desde cero una r¨¦plica de dos cuadras de la avenida de los Insurgentes y tambi¨¦n la adaptaron para una escena que deb¨ªa recordar la avenida de Baja California. Adem¨¢s, recrearon partes de un hospital.
No obstante, su atenci¨®n m¨¢s fiel al detalle se aplic¨® en la recreaci¨®n de la casa de la infancia de Cuar¨®n. La original ¡ªen la calle de Tepeji, 21¡ª hab¨ªa pasado por tantos cambios que no era apta para la producci¨®n. Adaptaron la fachada de una casa del otro lado de la calle para las escenas exteriores en la misma calle de Tepeji. Adaptaron una segunda localizaci¨®n para las escenas en la azotea. Para el patio y las escenas en el interior utilizaron otro edificio, que iba a demolerse, y lo remodelaron para que fuera una r¨¦plica de la casa familiar de Cuar¨®n, con much¨ªsima atenci¨®n a los m¨¢s nimios detalles: contrataron a un artesano para que reprodujera con fidelidad los azulejos originales con t¨¦cnicas de principios del siglo XX. Le pregunt¨¦ a Cuar¨®n por qu¨¦ hab¨ªa recreado de manera tan obsesiva hasta los m¨¢s peque?os detalles de la casa familiar, pese a que en realidad muchas personas no iban a notar la diferencia. ?l respondi¨® rotundamente: ¡°Yo me iba a dar cuenta¡±.
Una trabajadora dom¨¦stica estaba barriendo la calle y la acera enfrente de la casa junto al hogar de su infancia; las cerdas de su escoba raspaban el hormig¨®n. ¡°Ese sonido¡±, dijo Cuar¨®n emocionado. ¡°Tambi¨¦n lo tenemos en la pel¨ªcula¡±. Despu¨¦s la mujer sac¨® una cubeta de agua y comenz¨® a enjuagar la banqueta y la fachada de la casa. ¡°?Ese sonido!¡±, exclam¨®, con un brillo en los ojos. El filme arranca con una escena en la que Cleo est¨¢ lavando la entrada de la casa con agua y una escoba, y Cuar¨®n se mostr¨® complacido ¡ªquiz¨¢s incluso reconfortado¡ª por esta intersecci¨®n de la vida que imita al arte que imita a la vida.
A pesar de todo lo que hab¨ªa cambiado, al menos hab¨ªa algunas cosas que se manten¨ªan tal como las recordaba.?
? 2019 New York Times News Service
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