Richard Sennett: ¡°Si hici¨¦ramos lo que la gente quiere acabar¨ªamos construyendo urbanizaciones valladas¡±
El soci¨®logo estadounidense particip¨® este lunes en el seminario 'To gather' ('Juntarse') en el que debatir¨¢n ponentes como Saskia Sassen, Teresa Gal¨ª-Izard, Lacol, Enric Batlle, Carmen Espegel o David Gianotten, el arquitecto que dirige OMA (acceso gratuito tras inscripci¨®n)
Richard Sennet ha tomado prestado el subt¨ªtulo de su ¨²ltimo libro,0 Construir y habitar: ¨¦tica para la ciudad (de reciente aparici¨®n en Anagrama), de su mujer, la urbanista Saskia Sassen que ¡ªsiempre indagando en lo ambiguo¡ª cont¨® que anda ahora empe?ada en buscar la manera de hacer ciudades m¨¢s ¨¦ticas y menos morales. Ese libro habla de la diferencia entre la ciudad f¨ªsica y la ciudad construida por las percepciones. Algo as¨ª como la ciudad del hombre y la de dios, en San Agust¨ªn o la ville y la cit¨¦ en franc¨¦s. Como gran defensor de la complejidad, Sennett es capaz de apoyar una causa social, la participaci¨®n ciudadana, y de alertar del peligro de escuchar acr¨ªticamente lo que la gente quiere.
¡°Debemos escuchar a la gente. Los arquitectos deben escuchar. Pero una cosa es escuchar y otra dejar de pensar. Si hici¨¦ramos lo que la gente quiere acabar¨ªamos construyendo urbanizaciones valladas. Segregar¨ªamos a la poblaci¨®n por raza, creencias o clase social. ?De verdad consideran que se deben apoyar esos prejuicios?¡±
Sennett explic¨® que, durante a?os, tuvo su despacho junto al Media Lab del Massachusetts Institute of Technology. ¡°Un centro de innovaci¨®n donde est¨¢n siempre dispuestos a equivocarse porque est¨¢n convencidos de que de las respuestas equivocadas es de donde se aprende¡±. Para aclarar m¨¢s esa loa a los errores, Sennett compar¨® el Media Lab ¡ªun laboratorio en una universidad¡ª con Microsoft ¡ªuna empresa donde se investiga¡ª. ¡°A Microsoft le interesa: hip¨®tesis, prueba y resultado. Pero a ese tipo de investigaci¨®n, que prima acortar el tiempo de investigaci¨®n, en el MIT lo llaman creepy science¡±.
Sennett habl¨® del miedo a los inmigrantes y dijo que la gente que lo sent¨ªa se estaba equivocando de miedo: ¡°Es a la automatizaci¨®n del trabajo a lo que hay que tener miedo
La diferencia entre el Media Lab del MIT y Microsoft le sirvi¨® a Sennett para distinguir entre las ciudades abiertas y las cerradas, las complejas y las claramente comprensibles. ?l es un defensor de lo complejo y lo abierto. Cree que los l¨ªmites deben ser porosos, como el que separa el mar de la arena que se rehace continuamente. Por eso defiende lugares como Nehru Place, en Nueva Delhi, donde se juntan mercados de inform¨¢tica, paseantes, productos nuevos y viejos y, sobre todo, hind¨²es y musulmanes. Sennett est¨¢ en contra de cualquier decisi¨®n urbana que a¨ªsle. Invita a apropiarse de los lugares, es decir, a utilizarlos, y cree que es la utilizaci¨®n que la gente hace de un espacio p¨²blico lo que crea el sentido de lugar, no una imposici¨®n arbitraria.
Por otro lado, el autor de La corrosi¨®n del?car¨¢cter?declar¨® estar totalmente en contra del mantra moderno: la forma sigue a la funci¨®n. ¡°Simplemente porque esa es la receta para crear obsolescencia programada¡±, dijo. Para ilustrar esa idea cont¨® que Norman Foster dise?¨® la estaci¨®n de coches el¨¦ctricos bajo Masdar, la publicitada como ciudad 100% sostenible que es, en realidad, un barrio, aislado, junto a Abu Dabi. ?Qu¨¦ ocurri¨®? ¡°Que para cuando la estaci¨®n estuvo lista, los del Media Lab del MIT hab¨ªan conseguido dise?ar coches el¨¦ctricos m¨¢s peque?os. Como consecuencia, resultaba peligroso aparcar en los muelles que hab¨ªan construido para cargar los coches. La estaci¨®n se cerr¨®¡±.
Por ¨²ltimo, Sennett habl¨® del miedo a los inmigrantes y dijo que la gente que lo sent¨ªa se estaba equivocando de miedo: ¡°Es a la automatizaci¨®n a lo que hay que tener miedo. Desde UN Habitat alertamos de que en 35 a?os el 35% de los trabajos urbanos estar¨¢n automatizados. Esos empleos no se recuperar¨¢n. El Partido Laborista brit¨¢nico no incluye en su programa la m¨¢s m¨ªnima preocupaci¨®n por la automatizaci¨®n. Y el mundo anglosaj¨®n es una cultura en la que la ¨¦tica del trabajo es fundamental para desarrollar el amor propio. Esa esencia est¨¢ ahora amenazada¡±.
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