Pol¨¦mica en Canad¨¢ por los concursos para matar al mayor n¨²mero de lobos, pumas o coyotes
Los cazadores pueden abatirlos a cambio de premios econ¨®micos y bajo el argumento de proteger al carib¨² y al borrego cimarr¨®n
Grupos defensores de la vida silvestre exigen al Gobierno de Columbia Brit¨¢nica que ponga fin a concursos organizados por clubes de caza y tiendas de armas en esta provincia canadiense. Los cazadores reciben premios en met¨¢lico si matan el mayor n¨²mero de depredadores salvajes. Lobos, pumas, coyotes y mapaches son las presas a abatir para, supuestamente, proteger a las poblaciones de carib¨² y borrego cimarr¨®n, argumento refutado por los conservacionistas.
El pasado 10 de marzo, la Coalici¨®n para la Protecci¨®n de la Vida Salvaje, un grupo que re¨²ne a 54 organizaciones de Canad¨¢ y Estados Unidos, envi¨® una carta a Doug Donaldson, ministro provincial de Bosques, Recursos Naturales y Desarrollo Rural, para que se proh¨ªban estos torneos. ¡°Nuestra Coalici¨®n pide con urgencia al Gobierno de Columbia Brit¨¢nica que ponga fin a estos concursos, que asesinan a la vida salvaje, y que modernice las regulaciones de caza para lograr que estos aborrecibles concursos sean ilegales en el futuro¡±, aparece en la misiva.
Los inconformes citan en la carta tres eventos espec¨ªficos. El primero ha sido organizado por una tienda de armas en la poblaci¨®n de Williams Lake para matar al mayor n¨²mero de lobos entre el 1 de diciembre y el 31 de marzo. El segundo, que tendr¨¢ lugar en la comunidad de Yahk del 16 al 24 de marzo, dar¨¢ tres puntos en un concurso para quien mate a un lobo o a un puma, dos por un coyote y uno por cada mapache. Este concurso es una idea de un club de caza y concede premios en met¨¢lico a los ganadores. El tercero, tambi¨¦n una iniciativa de un colectivo de cazadores, ofrece en estos primeros meses del a?o 500 d¨®lares canadienses (unos 330 euros) por cada lobo abatido en la regi¨®n de Kootenay. Adem¨¢s, los participantes tienen derecho a conservar la piel del animal, que puede alcanzar los 200 d¨®lares en el mercado (133 euros).
El Ministerio de Bosques, Recursos Naturales y Desarrollo Rural de Columbia Brit¨¢nica emiti¨® un comunicado en respuesta a los conservacionistas. ¡°El Ministerio no condona ni incentiva este tipo de eventos. No existen actualmente reglas que impidan estos concursos, siempre y cuando los cazadores tengan las licencias adecuadas y cumplan con todas las leyes¡±, escribieron las autoridades.
En las redes sociales, algunos participantes de estos torneos expresaron que se trata de una divertida actividad para cuidar a las poblaciones de carib¨² y borrego cimarr¨®n. Sin embargo, otros usuarios de Facebook y Twitter comentaron que la protecci¨®n de la vida salvaje debe contemplar tambi¨¦n a los depredadores. Adem¨¢s, se?alaron que incluir a los mapaches como presas refleja que la iniciativa no es necesariamente para velar por los rumiantes.
El Comit¨¦ de Vida Salvaje del Oeste de Canad¨¢ manifest¨® que estos torneos tienen fines de entretenimiento y no cuentan con respaldo cient¨ªfico sobre los supuestos beneficios de la eliminaci¨®n de depredadores. El problema para ciertas especies, seg¨²n esta asociaci¨®n, tiene que ver m¨¢s bien con la destrucci¨®n de su h¨¢bitat. En el mismo sentido, Tommy Knowles, director de la Liga de Defensa de la Vida Silvestre, declar¨® a Daily Hive Vancouver que estos concursos no reciben asesor¨ªa de bi¨®logos u otros expertos. ¡°Pueden tener consecuencias muy negativas en la salud del ecosistema¡±, coment¨®.
Los cr¨ªticos de estos torneos no bajan la guardia, ya que cuentan con un precedente a su favor: en diciembre de 2017, tras a?os de protestas, el Gobierno de Columbia Brit¨¢nica prohibi¨® la caza del oso grizzli. La ¨²nica excepci¨®n es para miembros de comunidades ind¨ªgenas que lo maten para obtener alimento o con fines ceremoniales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.