Los Casiraghi que no van a las fiestas son negociantes
La familia del primer marido de Carolina de M¨®naco conforma un poderoso y adinerado clan con el que trabaja Pierre, el hijo menor de la princesa
El olfato para los negocios convirti¨® a los Casiraghi en una de las familias m¨¢s ricas de Italia. En la estirpe no faltan eruditos de la econom¨ªa y los consejos de administraci¨®n son su h¨¢bitat natural. Las dotes empresariales han pasado de generaci¨®n en generaci¨®n. Pierre, el hijo menor de Carolina y el desaparecido Stefano hered¨® de su familia paterna la pasi¨®n y el instinto para las finanzas. Entre otras cosas, estudi¨® Econom¨ªa en la prestigiosa Universidad Bocconi de Mil¨¢n y en la actualidad comparte con su t¨ªo Marco las labores de direcci¨®n de la reconocida constructora Engeco, que fund¨® su padre en 1984 en Montecarlo y de la que ¨¦l es principal accionista desde el a?o 2009.
Marco Casiraghi, el hermano predilecto de Stefano es el padrino de Andrea. Discreto, como toda la familia y muy poco dado a aparecer en los medios, vive a caballo entre el Principado y Mil¨¢n. Es ingeniero, un apasionado de la divulgaci¨®n cient¨ªfica y director ejecutivo de la constructora familiar, que es l¨ªder en el sector inmobiliario de lujo en M¨®naco. Junto a su sobrino ha firmado grandes ¨¦xitos de la compa?¨ªa como el nuevo Club N¨¢utico de M¨®naco, que dise?¨® el renombrado arquitecto Norman Foster.
La matriarca de la familia, Fernanda Biffi Casiraghi, de 94 a?os, procede de una larga familia de empresarios y lleva tambi¨¦n las finanzas en la sangre. Naci¨® y creci¨® en Mil¨¢n y con su marido, Giancarlo Casiraghi, transform¨® la sociedad familiar que se dedicaba al carb¨®n. Juntos hicieron fortuna como distribuidores de la petrolera Esso en Italia. A¨²n conserva la conexi¨®n con el mundo empresarial. Referente hist¨®rica de los empresarios italianos en Montecarlo, ahora, adem¨¢s de ser la presidenta honoraria de la compa?¨ªa de la familia tambi¨¦n lo es de la Asociaci¨®n de emprendores italianos del Principado de M¨®naco. Vive en la lujosa villa Cicogna, el centro neur¨¢lgico del clan, una espl¨¦ndida hacienda en Fino Mornasco, cuna de los Casiraghi que est¨¢ cerca Como. Siempre ha mantenido el cari?o y los v¨ªnculos familiares con Carolina, que la sigue considerando parte de la familia real monegasca, como prueba su presencia destacada en el enlace del pr¨ªncipe Alberto y Charlene en 2011. Es com¨²n verlas juntas en bodas, bautizos y otros eventos familiares, algunos aciagos, como el funeral de Daniele, hermano de Stefano, que tambi¨¦n estaba volcado en los negocios familiares y que falleci¨® en 2016 a los 60 a?os.
Fernanda, discreta y muy poco propensa a aparecer en p¨²blico y a las entrevistas, en sus escasas conversaciones con los medios ha contado que la princesa Carolina todav¨ªa la llama mamma, como hac¨ªa antes de casarse con Stefano. Tambi¨¦n ha recordado en varias ocasiones que la primera vez que la vio qued¨® fascinada por su sencillez y que el pr¨ªncipe Raniero III le dijo ¡°no cre¨¢is todo lo que le¨¦is de nosotros, mi hija es una buena chica¡±. Siente pasi¨®n por sus nietos y en alguna entrevista ha comentado que Andrea fue quien m¨¢s sufri¨® la muerte de Stefano. ¡°A veces se pone su ropa¡±, ha dicho. Define a Carlota como ¡°determinada y esquiva¡± y de Pierre destaca que ¡°ama la vida¡±; a menudo recuerda con humor alguno de sus devaneos, como la ocasi¨®n en la que fue fotografiado en Mil¨¢n pintando un grafiti en las paredes de un edificio, de noche. ¡°En casa le tiraron de las orejas¡±, dijo su abuela. El episodio tuvo gran repercusi¨®n y el concejal de cultura de la ciudad de entonces apod¨® el suceso como ¡°una revoluci¨®n que marca una ¨¦poca¡±, en declaraciones al Corriere della Sera. ¡°Los grafitis han pasado del pueblo, de las calles a la nobleza¡±, dijo.
Otro pilar de la familia es Rosalba Casiraghi, la ¨²nica t¨ªa por parte de padre de Andrea, Carlota y Pierre. Entrenada desde la cuna para el mundo de los negocios, tambi¨¦n lleva grabado el talento empresarial en el ADN. Es una reputada economista formada en la cantera de la Universidad Bocconi. Reservada como todos sus parientes, ha mantenido cierta independencia de las compa?¨ªas familiares y se ha labrado un exitoso camino por libre. Ha pasado por los consejos de administraci¨®n de varias grandes empresas y actualmente trabaja en la petrolera italiana ENI, donde es presidenta de la junta de auditores estatutarios. Durante mucho tiempo fue la ¨²nica mujer de la c¨²pula del coloso bancario Intesa Sanpaolo. ¡°En general un hombre tiene m¨¢s alternativas, mientras que para una mujer acceder a las primeras posiciones resulta tan complejo que haber llegado se convierte en lo m¨¢s gratificante y la retribuci¨®n se convierte casi en algo accesorio¡±, declar¨® a Il Sole 24 Ore en 2009. Lleva una vida tranquila y com¨²n y va en tren a trabajar. ¡°La gente se imagina ch¨®feres y coches oficiales, no se esperan ver a una Casiraghi en el mismo vag¨®n¡±, bromeaba en otra entrevista con el mismo diario, en la que tambi¨¦n confes¨® que en casa los caprichos y los excesos estuvieron siempre prohibidos. ¡°Tambi¨¦n Stefano era as¨ª y cuando se cas¨® con Carolina no cambi¨® nada¡±, dijo.
28 a?os del fatal accidente de Stefano
La matriarca del clan vive en la lujosa villa Cicogna, el centro neur¨¢lgico del clan, una espl¨¦ndida hacienda en Fino Mornasco, cuna de los Casiraghi que est¨¢ cerca de Como. Siempre ha mantenido el cari?o y los v¨ªnculos familiares con Carolina, que la sigue considerando parte de la familia real monegasca, como prueba su presencia destacada en el enlace del pr¨ªncipe Alberto y Charlene en 2011. Y eso que ya hace 28 a?os de la muerte de Stefano Casiraghi, quien falleci¨® el 4 de octubre de 1990 al volcar la embarcaci¨®n que tripulaba, en el Campeonato del Mundo de Offshore, en aguas del Principado. Es com¨²n verlas juntas en bodas, bautizos y otros eventos familiares, algunos aciagos, como el funeral de Daniele, hermano de Stefano, que tambi¨¦n estaba volcado en los negocios familiares y que falleci¨® en 2016 a los 60 a?os.
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