Los ¡®productos menores¡¯ en el comercio justo internacional
Las organizaciones productoras critican la falta de apoyo para explorar mercados
Despu¨¦s de varios a?os de comercializaci¨®n nacional de ciruelas en forma asociativa, Coopeumo decide empezar el proceso para conseguir la certificaci¨®n seg¨²n el esquema Fairtrade International. A trav¨¦s de varios contactos y el apoyo de un programa CORFO, la cooperativa trabaj¨® en 2011 una propuesta de est¨¢ndar Fairtrade para las ciruelas: "Nosotros fuimos los primeros, no hab¨ªa ninguna organizaci¨®n de peque?os productores con certificaci¨®n para ciruelas. Sin embargo, no recibimos ninguna respuesta desde la casa central del sistema Fairtrade, as¨ª que empezamos a dialogar con la oficial de enlace aqu¨ª en Chile para certificarnos como organizaci¨®n".
Sin embargo, despu¨¦s de conseguir la certificaci¨®n en 2013, Coopeumo solo logr¨® dos peque?as exportaciones de 3.000 y 1.000 kilos a Inglaterra, donde las ciruelas no son un producto de consumo masivo. Sobre un potencial de un mill¨®n de kilos, obviamente estas peque?as exportaciones no resultaron ser un negocio atractivo y los socios se desencantaron con el comercio justo internacional. Adem¨¢s, porque el premio de comercio justo que se recibi¨®, ni alcanz¨® para cubrir la totalidad del costo de la certificaci¨®n. A finales de 2017, Coopeumo congel¨® la certificaci¨®n, comunicando al sistema que se desertificar¨ªan voluntariamente hasta encontrar un negocio con un comprador dispuesto a comprar bajo criterios Fairtrade.
La experiencia de Coopeumo con el sistema Fairtrade fue muy decepcionante por el poco inter¨¦s en apoyar a una cooperativa de productores de un producto ¡°menor¡±
Jorge Quintanilla, gerente de Coopeumo, subraya que la cooperativa nunca recibi¨® apoyo internacional para explorar mercados y buscar potenciales compradores de ciruelas certificadas. De hecho, esta es una de las mayores cr¨ªticas que las organizaciones de los llamados ¡°productos menores¡± certificados dirigen al sistema de comercio justo internacional. Estos productos no alcanzan los vol¨²menes y los facturados necesarios para que el sistema decida invertir en su promoci¨®n o, por lo menos, en la construcci¨®n del relativo est¨¢ndar. Lo opuesto acontece con productos como el caf¨¦, los bananos o el cacao, que mueven cotidianamente enormes ingresos para el sistema, los productores de todo el mundo y los compradores certificados.
Otra de las cr¨ªticas, como nos menciona Jorge, es que "el pago de la certificaci¨®n deber¨ªa ser proporcional a los ingresos generados por las ventas certificadas, no estandarizado sobre la base del n¨²mero de socio. Porque al final, son los ingresos que hacen atractivo mantener la certificaci¨®n". Finalmente, la experiencia de Coopeumo con el sistema Fairtrade fue muy decepcionante, sobre todo por el poco inter¨¦s en apoyar a una cooperativa de productores de un producto ¡°menor¡±, o poco rentable, que adem¨¢s estaba dispuesta a colaborar en la construcci¨®n de los criterios para ciruelas.
Hoy la cooperativa sigue vendiendo ciruelas deshidratadas de forma asociativa en ¨¢mbito nacional. Tiene un potencial de un mill¨®n de kilos, sin embargo, de momento, solo se alcanza un 15%. Sobre todo, como subraya Jorge Quintanilla, por falta de compradores y de exigencias que mantengan alta la fidelidad de los socios en cuanto a la entrega del producto a la cooperativa: "La cooperativa naci¨® esencialmente por la necesidad de insumo y asistencia t¨¦cnica que ten¨ªan los socios. El negocio de la comercializaci¨®n de productos agr¨ªcolas vino despu¨¦s y sin exigencias claras. Sin embargo, ya estamos viendo la necesidad de incluir algunas para los socios activos que comercializan sus productos a trav¨¦s de la cooperativa. De esta manera, tendr¨ªamos vol¨²menes m¨¢s altos para concretizar negocios m¨¢s importantes, como nos est¨¢ pasando con la venta de trigo a la empresa Carozzi".
En la actualidad la cooperativa est¨¢ adecuando su infraestructura y log¨ªstica para aumentar los vol¨²menes de comercializaci¨®n nacional de productos agr¨ªcolas y no depender demasiado de la compra y venta de insumos para sus asociados, ya que grandes distribuidoras se est¨¢n acaparando el mercado con precios baratos, pero sin la contribuci¨®n t¨¦cnica y social que la cooperativa, por su raz¨®n de ser, entrega a los socios y las comunidades. "Para lograr mayores vol¨²menes de productos agr¨ªcolas comercializados vamos a trabajar m¨¢s y mejor en la fidelizaci¨®n de los socios", comenta el vicepresidente Carlos N¨²?ez. "Hay que hacerles entender a los socios que son ellos los due?os del negocio, que la cooperativa no es una entidad de caridad ni una empresa privada con due?os de afuera. Que tanto en las malas como en las buenas, el socio est¨¢ llamado a seguir luchando por su cooperativa, una de las cooperativas campesinas m¨¢s importantes del pa¨ªs y con gran reconocimiento".
Un desaf¨ªo de empoderamiento y educaci¨®n cooperativa que se vuelve fundamental en el pa¨ªs campe¨®n del neoliberalismo en Am¨¦rica Latina.
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