¡°?frica se est¨¢ movilizando y aqu¨ª nos tenemos que enterar¡±
Activistas de cinco pa¨ªses de ?frica Subsahariana participan en el I Foro Internacional Gobernanza, Movimientos sociales y Participaci¨®n ciudadana en Las Palmas de Gran Canaria
¡°?frica se est¨¢ movilizando y aqu¨ª nos tenemos que enterar¡±. Esta llamada de atenci¨®n la dirig¨ªa este lunes el burkin¨¦s Nebon Babou Bassono a los asistentes al I Foro Internacional Gobernanza, Movimientos sociales y Participaci¨®n ciudadana celebrado por el Cabildo de Gran Canaria en la capital isle?a. Bassono y otros cuatro activistas africanos expusieron las dificultades en sus pa¨ªses de origen y las respuestas de la sociedad civil. Mauritania, Senegal, Mali, Burkina Faso y Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo. Cinco Estados con realidades muy diversas pero algunos puntos en com¨²n: la frustraci¨®n y el descontento por la mala gesti¨®n gubernamental que, bien canalizados, pueden conducir a mejoras sociales, y la determinaci¨®n de las nuevas generaciones.
¡°Necesitamos una lectura no arcaica de la religi¨®n¡±
Conducido por el periodista especializado en el continente, Jos¨¦ Naranjo, el Foro arranc¨® con la intervenci¨®n de quien ese mismo d¨ªa hab¨ªa recibido, desde Italia, el premio a La Donna dell'Anno, Aminetou Ely, presidenta de la Asociaci¨®n de Mujeres Jefas de Familia (AFCF son sus siglas en franc¨¦s) de Mauritania. Ely? insisti¨® en la naturaleza multicultural y multi¨¦tnica de una rep¨²blica en la que conviven cuatro comunidades: la mora, la pular, la wolof y la sonink¨¦.
Pese a que Mauritania aprob¨® la ley contra la esclavitud hace cuatro a?os, Ely lamenta que esta no se aplique y que haya un racismo que mina la cohesi¨®n social y que es transversal, desde un acceso desigual a los recursos p¨²blicos, hasta la discriminaci¨®n que sufre la poblaci¨®n negra en todas las esferas y, sobre todo, en el ej¨¦rcito. A juicio de la reconocida activista, otros problemas acuciantes en Mauritania son el extremismo religioso, el blanqueamiento de dinero, la mercantilizaci¨®n de la educaci¨®n, y el retroceso en las libertades de expresi¨®n, reuni¨®n y manifestaci¨®n.
Fruto de la inseguridad reinante y del descontento social, la mauritana alerta de la posibilidad de una guerra civil. ¡°Habr¨¢ una explosi¨®n¡±, declar¨® la activisa, que pide un nuevo enfoque de la religi¨®n musulmana y un esfuerzo real por la reconciliaci¨®n nacional.
¡°Soy producto de los movimientos sociales¡±
Para Aminetou Ely, otros problemas acuciantes en Mauritania son el extremismo religioso, el blanqueamiento de dinero o la mercantilizaci¨®n de la educaci¨®n
Senegal¨¦s que migr¨® por mar a Espa?a, se hizo activista para ayudar a quienes llegaban como ¨¦l y regres¨® para crear su propio proyecto de desarrollo comunitario. Muy resumido, este ser¨ªa el periplo de Mamadou Dia.
Tras aprender castellano (en varios acentos de la geograf¨ªa espa?ola) e instalarse en el pa¨ªs, volvi¨® a su Gandiol natal, cre¨® la asociaci¨®n Hahatay, implic¨® a todos sus habitantes en la construcci¨®n y dinamizaci¨®n del Centro Cultural Aminata y all¨ª invita a j¨®venes europeos para que hagan lo que el viejo continente impide hacer a los africanos: crear v¨ªnculos humanos simplemente ¡°compartiendo un espacio y un tiempo¡±.
Dia destac¨® como h¨¢ndicap para los africanos la falta de reconocimiento de la cultura propia debida a la imposici¨®n de un modelo de desarrollo ajeno, por el que parece que siempre necesiten ¡°a un experto franc¨¦s dici¨¦ndoles c¨®mo vivir sus vidas¡±.
¡°Activista m¨¢s que ciberactivista¡±
As¨ª prefiere definirse Fatouma Harber, quien considera que su compromiso se extiende m¨¢s all¨¢ de su actividad on line. Seg¨²n sus propias palabras, desde que en 2012 la historia se parara en Mali, ¡°todo no es m¨¢s que fachada¡±. Los medios de comunicaci¨®n est¨¢n claramente polarizados a favor o en contra del Gobierno. La televisi¨®n nacional se pasea con el Presidente y su familia. No se hizo nada cuando 12 mujeres fueron secuestradas en un pueblo, por mucho que ella gritara y contactara con organismos como la MINUSMA. Por todo esto, Harber defiende la blogosfera como ¡°la ¨²nica v¨ªa sin corromper¡±.
En 2013 particip¨® en el nacimiento de la comunidad bloguera en el pa¨ªs (Doniblog) y, tres a?os despu¨¦s, cre¨® un espacio de formaci¨®n digital en Tombuct¨². Adem¨¢s, coordina el proyecto Benbere. La maliense aprovech¨® la tribuna del Foro para denunciar los ¡°oportunos¡± cortes de Internet, como el que sufrieron la semana pasada, a dos d¨ªas de una gran manifestaci¨®n contra el Gobierno que estaba convocada en Bamako.
¡°Somos peque?os pero conseguimos logros may¨²sculos¡±
Nebon Babou Bassono, m¨¢s conocido como Babou, empez¨® su alocuci¨®n agradeciendo que les permitieran hablar en primera persona, en lugar de ser explicados por terceras personas, que es a lo que est¨¢n acostumbrados.
Militante en la di¨¢spora del movimiento ciudadano Le Balai Citoyen, el cual lider¨® las movilizaciones que derrocaron a Blaise Compaor¨¦ en 2014, y portavoz en Barcelona de la plataforma Emergencia Frontera Sur, afirm¨® tajante en nombre de la juventud: ¡°ya no pedimos, exigimos. La ¨¦poca del buen negro pas¨® y el esp¨ªritu de las primaveras ¨¢rabes sigue descendiendo hacia el sur".
Babou cree que quienes est¨¢n fuera deben utilizar sus privilegios para alertar de las vulneraciones de derechos que padecen quienes siguen en sus pa¨ªses de origen. Defensor de no entrar en ¡°debates electoralistas baratos¡± sobre la migraci¨®n, quiso dejar tres ideas: que quien pierde con la migraci¨®n es ?frica, que es un continente no pobre sino empobrecido, y que est¨¢ convencido de que la soluci¨®n no vendr¨¢ de las pol¨ªticas europeas y s¨ª de los movimientos sociales.
¡°En Filimbi y LUCHA la mayor¨ªa son mujeres¡±
Su proceso migratorio fue como el de muchas congole?as cuyas familias decidieron sacarlas de Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo por la violencia, especialmente dura contra las mujeres. Nicole Ndongala, directora de la asociaci¨®n Karibu, se enorgulleci¨® de servir como ejemplo para otras que, en la misma situaci¨®n que ella vivi¨® en 1998 cuando lleg¨® a Espa?a, piensan: ¡°si t¨² has podido, yo tambi¨¦n¡±.
Subray¨® el papel de las mujeres en la movilizaci¨®n social de RDC, por su hartazgo ante la impunidad reinante, y el olvido que padecen las numerosas ni?as que malviven en las calles de Kinshasa. Tambi¨¦n advirti¨® de cierto activismo protegido desde el poder y de la importancia de empoderar aqu¨ª, a las migrantes, en vez de enviar dinero a asociaciones que quiz¨¢ all¨ª est¨¦n a las ¨®rdenes del Gobierno. Ndongala cerr¨® el encuentro cantando?Malaika, de la emblem¨¢tica Miriam Makeba.
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