Otros 20 flagrantes timos que mancharon la historia del pop

Todo el mundo sabe que Milli Vanilli fue un fraude. ?O hay alguien por ah¨ª que no conoce la historia? Eran dos atl¨¦ticos chicos mulatos que ni sab¨ªan cantar ni mucho menos componer. Eso s¨ª, bailaban muy bien. Suficiente para un avispado productor alem¨¢n, que contrat¨® a unos m¨²sicos y un cantante, grab¨® un disco, y luego les dijo a los dos bailarines que se limitasen a mover los labios en las actuaciones. Y a bailar, claro. Un Grammy, millones de ejemplares despachados y actuaciones (en playback) en todo el mundo.

Todo se descubri¨® cuando el cantante verdadero que grab¨® el ¨¢lbum, Charles Shaw, dijo la verdad. Al d¨²o de bailarines les quitaron el Grammy y su carrera se acab¨®.

Este es uno de los grandes timos del pop, un mundillo con mucho pillastre presto para dar gato por liebre. El caso de Milli Vanilli lo tratamos en nuestra anterior entrega de los timos del pop. Estos son otros 20 nuevos casos...

- Sex Pistols: el enga?o del mill¨®n de libras (e instrumentos desenchufados)

Pionero del punk brit¨¢nico, el grupo Sex Pistols encarn¨®, con total desfachatez, ¡°el gran timo del rock and roll¡±, y hasta lleg¨® a titular as¨ª una pel¨ªcula inspirada en sus tropel¨ªas. Para re¨ªrse de la industria discogr¨¢fica, y, de paso, salir de pobre, el m¨¢nager Malcom McLaren logr¨® que los Sex Pistols ingresaran un mill¨®n de libras sin apenas grabar nada: en 1976, envi¨® al grupo al programa de televisi¨®n Today con la misi¨®n de soltar un mont¨®n de palabrotas. As¨ª, la discogr¨¢fica los expuls¨® y cobraron la abultada indemnizaci¨®n, am¨¦n de hacerse famosos.

Tambi¨¦n desde el prisma estrictamente musical fueron los Sex Pistols una estafa: aunque iban sobrados de actitud, apenas sab¨ªan tocar sus instrumentos. Es m¨¢s, seg¨²n McLaren, el afamado Sid Vicious ¡°tocaba tan mal el bajo que en los conciertos ten¨ªamos que desconectar su amplificador y poner a un m¨²sico detr¨¢s de los altavoces para que tocara su parte¡±.

- Live Aid: ?qu¨¦ fue de los 70 millones que recaud¨®?

En 1985, Etiop¨ªa pasaba por una de las peores crisis de su historia. Para luchar contra el hambre en este pa¨ªs, el cantante Bob Geldof organiz¨® unos conciertos ben¨¦ficos, llamados Live Aid, con las mayores estrellas de rock del mundo. Se celebraron simult¨¢neamente en Londres y Filadelfia el 13 de julio de 1985. En los conciertos participaron, entre otros, Led Zeppelin, Queen, Wham!, U2, Paul McCartney, David Bowie, Dire Straits, Bob Dylan, Madonna, Sting, Santana y Eric Clapton. Se recaudaron m¨¢s de 70 millones de euros, en uno de los mayores hitos del humanitarismo rockero.

Pero, en 2010, la BBC revel¨® en un impactante programa que el 95 % del dinero recaudado en el Live Aid fue a parar a los fondos de la guerrilla et¨ªope. Seg¨²n el testimonio de dos mandos del Woyane, Frente de Liberaci¨®n Popular de Tigrayan, esta organizaci¨®n invirti¨® el dinero del Live Aid en armas. Los guerrilleros se disfrazaron de mercaderes ¨¢rabes y vendieron sacos de arena a las ONGs occidentales, que creyeron comprar granos. Posteriormente, la BBC tuvo que pedir disculpas por algunos datos del reportaje. Sin embargo, el autor del reportaje, Martin Plaut, mantiene que es todo cierto, pero que por falta de pruebas documentales la BBC opt¨® por pedir disculpas.

- Fyre Festival: la estafa del lujo de la era Instagram

De entrada, sonaba bien: un festival para VIPs en una isla privada de las Bahamas, al que asistir¨ªan modelos, famosos y millonarios, y donde actuar¨ªan grupos como Blink 182, Ja Rule, Mayor Lazer o Disclosure. Todos anunciaron (con fotos la mar de sexies) en sus cuentas de Instagram que acudir¨ªan al Fyre. Las entradas, con precios que oscilaban entre los 900 y los 45.000 euros, inclu¨ªan sesiones de yoga, deportes acu¨¢ticos, paseos en yate, chefs con estrellas Michelin y alojamientos de lujo. Pero cuando los asistentes llegaron al festival, no encontraron m¨¢s que una desangelada isla desierta, un pu?ado de s¨¢ndwiches de queso y unas pocas tiendas de campa?a agujereadas: los invitados que no ten¨ªan tienda tuvieron que dormir a la intemperie, en colchones empapados por la lluvia. La cosa acab¨® con el promotor del festival, Billy McFarland, condenado a seis a?os de c¨¢rcel por fraude.

Ahora, Netflix y Hulu han lanzado sendos documentales sobre Fyre, que, mediante pesquisas y entrevistas, compiten para desvelar el misterio de este gran timo.

- Deep Purple: suplantados por unos impostores

Todo empez¨® en 1980, cuando la empresa Advent Talent Associates (especialista en reunir a viejas glorias musicales), trat¨® en vano de juntar a Deep Purple, grandes del rock duro que llevaban casi un lustro separados. Como el ¨²nico exmiembro que estaba por la labor era Rod Evans, cantante de la banda en los tres primeros discos (cuando apenas tuvieron ¨¦xito), la empresa lo junt¨® con varios m¨²sicos mercenarios y lo embarc¨® en una gira bajo el nombre de Deep Purple. Cuando el p¨²blico llegaba al concierto y ve¨ªan en el escenario a aquellos desconocidos que ni siquiera tocaban bien, los fans montaban en c¨®lera y ped¨ªan el libro de reclamaciones.

Finalmente, los verdaderos Deep Purple denunciaron a Advent Talent Associates y a Rod Evans por fraude. Este ¨²ltimo fue condenado a pagar una multa de 670.000 d¨®lares (unos 590.000 euros), pero, como no ten¨ªa dinero, cedi¨® sus futuros derechos de autor de los tres primeros discos de Deep Purple a los demandantes. Despu¨¦s, muy escarmentado, desapareci¨® de la escena musical.

- Black Box: el 'pack' completo, plagio y 'playback'

Verdadero himno del italo dance y ¨¦xito discotequero atemporal, Ride on time, de Black Box, alcanz¨® el n¨²mero uno en medio mundo en 1990. Pero el secreto del ¨¦xito de la canci¨®n resid¨ªa en Love sensation, viejo tema de una casi olvidada cantante de m¨²sica disco, Loleatta Holloway, que tuvo cierto ¨¦xito una d¨¦cada atr¨¢s.

Black Box, es decir, los productores italianos Limoni, Davoli y Semplici, recortaron fragmentos del tema de Holloway y lo pegaron en su canci¨®n Ride on Time. Para hacer el playback llamaron a la ex¨®tica modelo Katrin Quinol, que bailaba muy bien¡­ pero no cantaba ni una s¨ªlaba. Por no avisar, los productores ni siquiera avisaron a Holloway, que al enterarse puso el grito en el cielo, denunci¨® el plagio y no par¨® hasta cobrar la consiguiente indemnizaci¨®n y ser incluida en los cr¨¦ditos del disco de Black Box.

- Bruce Springsteen: la plataforma Ticketmaster y las extra?as entradas

A?o 2016. Bruce Springsteen anuncia varios conciertos en Espa?a, uno de ellos en el estadio Santiago Bernab¨¦u de Madrid. Las entradas para el evento salieron a la venta en la p¨¢gina web de Ticketmaster. En dos horas estaban agotadas. Poco despu¨¦s, cientos de pases para ese mismo concierto se despachaban en la plataforma de reventa Seatwave.es, a un precio muy superior: en algunos casos, las entradas pasaban de los 95 euros a los 180.

Cientos de usuarios denunciaron el caso, y la Federaci¨®n de Consumidores en Acci¨®n pidi¨® a la Comunidad de Madrid que abriera una investigaci¨®n. Adem¨¢s, Doctor Music, promotora del concierto de Springsteen, demand¨® a Ticketmaster por perpetrar un ¡°enga?o orquestado que podr¨ªa ser constitutivo de un presunto delito de estafa¡±, pues las dos webs implicadas se repart¨ªan las abusivas comisiones. En varias ocasiones Springsteen ha declarado estar ¡°furioso¡± con esta plataforma, y los seguidores se quejan de sus m¨¦todos para vender y revender sus entradas en todo el mundo.

- Lime: el d¨²o pop que contrat¨® a otra pareja para hacer los directos

Denis y Denyse LePage. As¨ª se llamaba el matrimonio canadiense que form¨® el d¨²o de pop Lime. Su primer disco, Your love (1981), tuvo un ¨¦xito razonable. Pero el gran pelotazo lleg¨® al a?o siguiente con Babe, we¡¯re gonna love tonight, un rompepistas que dispar¨® las contrataciones de Lime. Abrumado por los compromisos, el matrimonio LePage contrat¨® a una pareja de cantantes, Chris Marsh y Joy Morris, para que actuaran mientras ellos hac¨ªan vida de hogar.

La farsa dur¨® dos a?os, y dio lugar a todo tipo de especulaciones sobre el d¨²o: se llegaron a decir disparates como que Denyse y Denis eran un solo cantante capaz de hacer voces masculinas y femeninas.

Unos a?os m¨¢s tarde, se descubri¨® el enga?o: los LePage se divorciaron y el grupo languideci¨®, pese a que Denis trat¨® de resucitarlo contratando varias cantantes para sustituir a su mujer.

El ya c¨¦lebre 'playback' de Beyonc¨¦ delante de Obama.

- Beyonc¨¦: cantando en 'playback' el himno nacional

No es raro que un artista se olvide de la letra del himno nacional cuando lo entona en una gala. Le pas¨®, por ejemplo, a Shakira en el a?o 2012 cuando asumi¨® la responsabilidad de cantar el himno de Colombia en la VI Cumbre de las Am¨¦ricas. Quiz¨¢ por eso, la estrella del pop Beyonc¨¦ quiso jugar sobre seguro y prepar¨® un playback para afrontar el reto de cantar el himno estadounidense en la Ceremonia Inaugural del presidente Obama en 2013, acompa?ada por la Banda de Marines.

Y fue precisamente el marine Kristin Dubois el primero en quejarse de que ¡°era la voz de Beyonc¨¦, pero una versi¨®n grabada¡±. Los medios le echaron en cara a la diva su poca profesionalidad, con el agravante de no saberse el himno de su propio pa¨ªs. Ella se justific¨® alegando: ¡°Soy una perfeccionista, no tuve tiempo de ensayar. Era un espect¨¢culo en directo y, debido al retraso, a la falta de una prueba de sonido adecuada, no me encontraba c¨®moda cantando en directo¡±. Prometi¨®, eso s¨ª, que no lo volver¨¢ a hacer.

- Mamoru Samuragochi: el Beethoven japon¨¦s ni era sordo ni era m¨²sico

El compositor Mamoru Samuragochi se hizo c¨¦lebre por crear exitosas sinfon¨ªas cl¨¢sicas, am¨¦n de bandas sonoras para videojuegos, como Resident evil. Recibi¨® el calificativo de ¡°el Beethoven japon¨¦s¡± porque dec¨ªa ser completamente sordo.

Pero en el a?o 2014 sali¨® a la luz la cruda verdad, que conmocion¨® a la sociedad japonesa: el verdadero autor de las susodichas sinfon¨ªas era un tal Takashi Niigaki, profesor de una prestigiosa escuela de m¨²sica que durante 17 a?os trabaj¨® como negro de Samuragochi, componiendo m¨¢s de 20 piezas a cambio de un mill¨®n de?yenes (unos 8.000 euros). Adem¨¢s, se supo que Samuragochi o¨ªa perfectamente y solo fingi¨® su sordera para ser comparado con Beethoven.

La farsa tard¨® en descubrirse porque, aunque Niigaki intent¨® destaparla, el falso Beethoven amenazaba con suicidarse. Pero lleg¨® un momento en que Niigaki no pudo m¨¢s y lo cont¨® todo: seg¨²n dijo, ¡°no soportaba seguir enga?ando a la gente¡±. Como consecuencia, sus conciertos fueron cancelados y sus discos retirados de las tiendas.

- New Order: copiaron cuatro canciones ajenas para hacer su gran ¨¦xito, 'Blue monday'

Sin duda, Blue monday (1983) es el gran ¨¦xito de la banda brit¨¢nica New Order y uno de los temas bailables m¨¢s emblem¨¢ticos de los a?os ochenta. Pero, como los cr¨ªticos m¨¢s avispados descubrieron desde la primera escucha, el ritmo de la canci¨®n se parece demasiado a I feel love (1977), un tema interpretado por Donna Summer y producido por Giorgio Moroder que se adelant¨® a su tiempo por un innovador uso de los secuenciadores. Adem¨¢s, la canci¨®n tambi¨¦n fusila un arreglo del tema Dirty talk, de Klein & MBO, y luce una melod¨ªa que recuerda bastante a la de You make me feel (mighty real) (1979), himno discotequero interpretado por el artista de culto gay Sylvester. Para colmo, Blue monday tambi¨¦n incorpora fragmentos del tema Uranium, del grupo alem¨¢n Kraftwerk.

En cualquier caso, la sangre no lleg¨® al r¨ªo ni el plagio a los tribunales, si bien el cantante de New Order, Bernard Sumner, reconoci¨® claramente las fuentes de su ¡°inspiraci¨®n¡± en el libro Manchester, England: the story of the pop cult city, publicado en 1999. M¨¢s vale tarde que nunca.

- Lou Reed: m¨¢s que un disco, una venganza

En 1975, Lou Reed estaba en la cima de su carrera. Tras su paso por The Velvet Underground y la publicaci¨®n de discos en solitario tan sobresalientes como Transformer, Berlin o Sally can¡¯t dance, sus fans recibieron entusiasmados su quinto ¨¢lbum, Metal machine music. Pero el contenido del disco result¨® ser una tomadura de pelo que puso a prueba la paciencia de sus fans: en sus 64 minutos de duraci¨®n no hab¨ªa m¨¢s que cuatro piezas largas, en las que solo se o¨ªa un insoportable y cacof¨®nico sonido de guitarras el¨¦ctricas desafinadas. Ni rastro de voces, melod¨ªas o palabras.

Aunque el m¨²sico siempre defendi¨® Metal machine music como una obra abstracta y algunos cr¨ªticos se lo tragaron, la mayor¨ªa descalificaron el disco, y el mism¨ªsimo cr¨ªtico Lester Bangs, gran fan de Reed, lo tach¨® de ¡°tortura¡±. M¨¢s que tortura, fue una estafa para vengarse de la discogr¨¢fica RCA, que, seg¨²n el propio Reed, ¡°me hab¨ªan dejado en la calle¡± al no renovarle el contrato.

Sin embargo, a la postre la fama y el prestigio de Reed han sido tan grandes, que incluso este disco inaudible ha tenido una reedici¨®n en caja de lujo, que incluye un libreto de doce p¨¢ginas, con notas originales de Reed y comentarios del cr¨ªtico David Fricke, de la revista Rolling Stone

- Los organizadores de un festival barcelon¨¦s que no pagaron a los artistas, estos no actuaron y el p¨²blico organiz¨® una batalla campal

En la primavera de 2015, se anunci¨® a bombo y platillo un festival veraniego de cuatro d¨ªas en Illa Fantas¨ªa, un parque acu¨¢tico con decenas de toboganes y piscinas situado en Vilassar de Dalt, a un paso de Barcelona. Se llam¨® I Am Global y entre los artistas convocados hab¨ªa grandes nombres del rap, el reggae y el R&B, como French Montana, Coyu, Fatman Scoop o Sak Noel.

Pero lleg¨® el d¨ªa del concierto¡­ y no hubo concierto. Durante la primera jornada de festival, solo salieron a pinchar un par de DJs desconocidos. Mientras tanto, bajo un sol de justicia, se calentaban los ¨¢nimos de cientos de asistentes, en su mayor¨ªa turistas de barrios ingleses que hab¨ªan comprado paquetes vacacionales.

Los organizadores, los brit¨¢nicos Courtney Richards, Louise Earle y George Boadi, no pagaron lo prometido a los artistas, ¨¦stos se fueron sin actuar y el festival se cancel¨® con el parque lleno de un p¨²blico impaciente y cada vez m¨¢s irritado. La cosa acab¨® en batalla campal entre los asistentes y el servicio de seguridad del parque, hasta que lleg¨® la polic¨ªa y disolvi¨® la trifulca a porrazos.

En este v¨ªdeo se pueden comprobar las similitudes entre el cl¨¢sico de Radiohead 'Creep' y la canci¨®n de los Hollies 'The air that I breathe'.?

- Radiohead: resulta que su 'Creep' es un plagio

Lanzado en 1992, Creep, de Radiohead, defini¨® su sonido y su identidad como uno de los grupos m¨¢s prometedores del rock alternativo del momento. Sin embargo, Thom Yorke y dem¨¢s integrantes de la banda acabaron aborreciendo la canci¨®n y elimin¨¢ndola de su repertorio.

Por un lado, les sonaba demasiado ¡°comercial¡± para encajar en sus pretensiones de convertirse en una banda de art rock. Por otro, recibieron una demanda interpuesta por el a?ejo grupo The Hollies, que consideraban que Creep se parec¨ªa sobremanera a su canci¨®n The air that I breathe, incluida en su ¨¢lbum de 1972. Los compositores de este tema, Albert Hammond y Mike Hazlewood, ganaron la batalla legal, y Radiohead tuvieron que incluirlos en los cr¨¦ditos como coautores de Creep.

- Triana: de gira sin ninguno de los miembros originales

En verano de 1974, Juan Jos¨¦ Palacios Tele, Jes¨²s de la Rosa y Eduardo Rodr¨ªguez Rodway fundaron el grupo Triana, que revolucion¨® la historia del pop espa?ol fundiendo rock progresivo con ritmos flamencos. Las muertes de Jes¨²s de la Rosa y de Tele provocaron que el ¨²nico superviviente, Eduardo Rodr¨ªguez Rodway, tomara la decisi¨®n de disolver el grupo.

Sin embargo, la viuda de Tele, que hered¨® la propiedad del nombre de la banda, ten¨ªa otros planes. Contrat¨® a unos m¨²sicos de sesi¨®n y los puso a tocar como Triana, desatando las iras de los fans del grupo y del propio Rodway, que amenaza con denunciar a los presuntos impostores. Rodway emiti¨® un comunicado en el que tild¨® a los ¡°falsos Triana¡± de ¡°mercaderes del todo vale¡±, y a sus conciertos de ¡°estafa de m¨²sicos mercenarios, cantante caricato, maletas de viudas y representante mercachifle que manchan, utilizan y equivocan el buen nombre del grupo¡±. Por su parte, Daniel Mart¨ªnez, m¨¢nager de los ¡°falsos Triana¡±, asegura: ¡°Llevamos 20 a?os y cada vez tenemos m¨¢s ¨¦xito. Tenemos los papeles en regla y somos Triana leg¨ªtimamente. Rodway solo tiene ira y rencor y si le pusi¨¦ramos dinero delante se callar¨ªa¡±.

La desastrosa actuaci¨®n de Ashlee Simpson.

- Ashlee Simpson: olvida mover los labios en plena actuaci¨®n

En 2004, la actriz texana Ashlee Simpson, hermana morena y alternativa de Jessica, se esforzaba en iniciar su carrera como cantante. Tras firmar con el sello discogr¨¢fico Geffen, public¨® Autobiography, su primer ¨¢lbum, y lo promocion¨® actuando en programas televisivos de m¨¢xima audiencia.

En el m¨ªtico programa Saturday Night Live, Ashlee sali¨® al escenario muy ufana, pero cuando empez¨® a sonar su voz, olvid¨® mover los labios para fingir que cantaba, quedando claro que estaba actuando en playback. Ella intent¨® disimular forzando un estramb¨®tico baile, pero, a juzgar por su expresi¨®n, rezaba para que se la tragara la tierra.

Tras la actuaci¨®n, la cantante acab¨® de meter la pata echando la culpa de su error a los m¨²sicos: ¡°Me siento fatal. Pero es que mi grupo toc¨® la canci¨®n equivocada¡±.

- El grupo fantasma que enga?¨® a los promotores de conciertos

Jered Eames era un chaval de un pueblo de Missouri que, desde muy joven, form¨® parte de grupos menores de black metal. Aunque siempre tuvo cierto talento para vender humo, nadie imaginaba que iba a perpetrar una de las mayores estafas de la era 2.0 con su grupo Threathin, del que era el ¨²nico miembro. A base de comprar miles de seguidores en redes sociales y hacer v¨ªdeos falsos de conciertos abarrotados, Jered consigui¨® que Threathin pareciera lo que no era: una exitosa y poderosa banda heavy. Fich¨® a m¨²sicos de sesi¨®n y enga?¨® a promotores musicales y due?os de salas europeas para que lo contrataran en una extensa gira en noviembre de 2018, aduciendo que hab¨ªa cientos de entradas vendidas. Como todo era mentira, los conciertos estuvieron vac¨ªos. En la prestigiosa sala londinense Candem Underworld solo aparecieron tres despistados y al recital en el Exchange de Bristol no asisti¨® nadie.

Ahora que lo han desenmascarado, Jered quiere rentabilizar su fracaso, se vende como un genio del marketing y pretende hacernos creer que todo estaba previsto: ¡°Transform¨¦ salas vac¨ªas en titulares internacionales¡±.

En este v¨ªdeo se cuenta la historia: pinchar aqu¨ª.

- Lady Gaga: 400 estafados con entradas falsas para su concierto

"?Sinverg¨¹enzas, nos hemos gastado 200 euros! ?Meses so?ando con este momento para nada!". Exclamaciones como estas se repitieron en la entrada del Palacio de los Deportes de Madrid el 12 de diciembre de 2010. Tras peregrinar desde varios puntos de Espa?a y hacer cola a la intemperie durante varios d¨ªas para coger sitio, 400 fans de Gaga se quedaron sin ver a la estrella porque las entradas eran falsas. Al ver que no los dejaban pasar al concierto, las v¨ªctimas de la estafa montaron en c¨®lera y provocaron avalanchas que obligaron a intervenir a la polic¨ªa.

El fraude fue perpetrado por unos falsificadores que copiaron el n¨²mero de serie y el papel de las entradas originales y lograron vender cientos de entradas falsas a trav¨¦s de internet. Al final, la organizaci¨®n se lav¨® las manos, puesto que las entradas fueron adquiridas fuera de los canales oficiales de venta.

- David Guetta: pinchando con el equipo apagado

Considerado uno de los mejores DJs del mundo, David Guetta ha vendido unos 45 millones de discos. Pero varias c¨¢maras traicioneras han desmontado su leyenda, captando c¨®mo en muchos espect¨¢culos pincha con el equipo apagado, aunque, eso s¨ª, suda la camiseta saltando, bailando y fingiendo que manipula la mesa de mezclas.

Pero tarde o temprano la verdad sale a flote. En 2014, Guetta se vio obligado a detener durante veinte minutos un concierto en Recife, Brasil, porque la conexi¨®n de su pen drive fall¨® y se qued¨® sin m¨²sica. El p¨²blico lo abuche¨® sonoramente, hasta que el DJ consigui¨® un nuevo pen drive y continu¨® con su actuaci¨®n como si nada. Guetta opera as¨ª: viaja con la m¨²sica ya seleccionada en un pen drive y luego lo enchufa en el lugar del concierto. Y listo.

Asimismo, el tambi¨¦n DJ franc¨¦s Joachim Garraud ha reconocido p¨²blicamente que fue negro de Guetta, y que produjo sus primeros ¨¦xitos masivos por encargo.

- Pussy Riot: actuando en dos lugares a la vez

19 de agosto de 2018. Pussy Riot, el colectivo punk ruso que se hizo c¨¦lebre gracias a su defensa del feminismo y de los derechos de LGTB frente a Vlad¨ªmir Putin, act¨²a por primera vez en Colombia. Es en el marco del festival Rock Al Parque, celebrado en Bogot¨¢. Hasta aqu¨ª todo correcto. El problema es que ese mismo d¨ªa, a esa misma hora, Pussy Riot tambi¨¦n estaban actuando en Edimburgo, Escocia.

El esc¨¢ndalo estall¨® a trav¨¦s del Facebook de Pussy Riot, al que subieron im¨¢genes de ambos conciertos, quedando claro que el grupo se hab¨ªa multiplicado misteriosamente. R¨¢pidamente, el muro de Facebook se llen¨® de insultos de p¨²blico indignado, que calific¨® de ¡°estafa¡±, ¡°fachada¡± y ¡°porquer¨ªa¡± lo sucedido.

El grupo organiz¨® este fraude aprovechando que sus integrantes usan pasamonta?as para los espect¨¢culos y, por ello, no se puede demostrar si las que act¨²an son las genuinas componentes de la banda.

- El apadrinado de Jay-Z que guardaba todo el dinero en casa para no pagar impuestos

Posesi¨®n de drogas, conducci¨®n temeraria, impago de la manutenci¨®n de sus hijos¡­ El rapero neoyorquino Earl Simmons, m¨¢s conocido como DMX, siempre ha tenido problemas con la justicia. Y ello forma parte de su leyenda, de su forma de rapear y de sus truculentas rimas. No en vano, cuando Jay-Z, en 2016, fich¨® a DMX para su sello discogr¨¢fico, tuvo que gastarse un mill¨®n de d¨®lares en rehabilitaci¨®n para que dejara las drogas.

Un a?o despu¨¦s, declararon a DMX culpable por evadir 1,7 millones de d¨®lares en impuestos. Seg¨²n el juez, el rapero no ten¨ªa cuenta bancaria y guardaba todo su dinero en casa para no pagar impuestos. La pena ascendi¨® a un a?o de c¨¢rcel y una multa de 2,3 millones de d¨®lares.