El problema con el pene de Mario Casas en ¡®Instinto¡¯
La serie est¨¢ recibiendo cr¨ªticas negativas. ?Ha afectado la insistente campa?a promocional centrada en el desnudo integral del actor?
Las cr¨ªticas de la serie Instinto (Movistar) no est¨¢n siendo especialmente buenas. Todas inciden en que su promesa de sexo descarnado se queda en nada y que su idea del lujo y la pasi¨®n se queda apolillada, como en un thriller que ya hayamos visto hace unos cuantos a?os. En que quiere ser provocadora, pero se queda en infantil y beata. Es imposible que lo sea m¨¢s que la estrategia promocional, centrada en el desnudo integral de su protagonista Mario Casas.
¡°Hay cosas que no han emitido¡±, coment¨® Casas en un momento dado. ¡°?Por qu¨¦?", le pregunt¨® Pablo Motos, ¡°?por el tama?o de tu algo?¡±. Risas del p¨²blico. Nada forzado, no
Mario Casas (A Coru?a, 1986) ha repetido hasta la saciedad cu¨¢nto sexo hay en Instinto y ha ensalzado en repetidas ocasiones que podr¨ªamos ver su pene. ¡°Un pito se puede ver, eso est¨¢ en la serie¡±, dijo a F¨®rmula TV. ¡°Aparezco a lo Michael Fassbender en Shame¡±, dijo a Toni Garrido en La Ser. ¡°Vemos a [su personaje] Marco masturb¨¢ndose en la ducha y desnudo¡±, dijo a Shangay. ¡°Mi cuerpo es el que m¨¢s se ve¡±, se?al¨® a Vertele.
La serie consigui¨® crear una intriga gigantesca gracias al dato de que ver¨ªamos el pene de Mario Casas. Una escena especialmente llamativa tuvo lugar en El Hormiguero, donde Mario Casas acudi¨® acompa?ado de su hermano ?scar, que tambi¨¦n aparece en la serie (con las pocas cr¨ªticas positivas que se ha llevado la serie, por cierto). ¡°Hay cosas que no han emitido¡±, coment¨® Casas en un momento dado. ¡°?Por qu¨¦?", le pregunt¨® Pablo Motos, ¡°?por el tama?o de tu algo?¡±. Risas del p¨²blico. Nada forzado, no. En ese momento, Casas se?ala a su hermano: ¡°Bueno, has visto lo que ha hecho, ?eh? Lo primero que le ha salido: ?ha hecho as¨ª!¡±. En ese momento, abre las palmas de sus manos y separa sus brazos, dando entender que su hermano ha hecho el gesto de algo realmente grande.
Pablo Motos le sigue el juego: ¡°Hay un rumor de Internet que dice que tienes los huevos enormes¡±, espeta ante la risa del p¨²blico y los hermanos. ¡°Hay integral¡±, indica Mario Casas respondiendo a una pregunta que nadie le ha hecho. Hagamos un breve repaso: Mario dice que las escenas son muy arriesgadas, Pablo Motos apunta que su miembro es muy grande, Mario Casas lo confirma de modo petulante, Pablo Motos lo recalca, Mario Casas lo vuelve a recalcar.
Si hay algo err¨®neo en la campa?a de Instinto es que es insultantemente pacata para una serie que quiere revolucionar la televisi¨®n hablando de sexo. Todas estas cosas que el equipo comenta sorprendido (desnudos, sexo en grupo, masturbaci¨®n, sadomasoquismo) lleva en el cine espa?ol m¨¢s de cuarenta a?os. ?Penes enormes? Tambi¨¦n. En Arde Madrid hab¨ªa uno, uno tan grande que parec¨ªa que iba a golpear al espectador en la frente. Era el de un amante casual de Ava Gardner, interpretado por el actor porno Bel Gris. Como ese otro desnudo de Javier Guti¨¦rrez en El Autor (2017). Son desnudos casuales, espont¨¢neos, naturales. Lo que deber¨ªan ser casi siempre los genitales en el cine, vaya.
?Cu¨¢l ser¨ªa el problema si fuese una pr¨®tesis? Que la campa?a ser¨ªa enga?osa: no hay un desnudo integral de Mario Casas. ?Cu¨¢l ser¨ªa el problema si no lo fuese? Que en el aplauso generalizado a su tama?o hay una legitimaci¨®n de una virilidad caduca: a m¨¢s pene, m¨¢s hombre
Bien, nos qued¨® claro: vamos a ver completamente desnudo a Mario Casas. Visto est¨¢. Twitter se ha llenado de capturas del momento, como era previsible. Hay much¨ªsimos espectadores contentos y felices por haber visto el pene grande de Mario Casas y comprobar que es grande, que la campa?a no ment¨ªa. Y hay otros que se unen a algunos rumores dentro de la propia industria audiovisual y aseguran que lo que vemos de Mario Casas es una pr¨®tesis.
No sabemos si es una pr¨®tesis o no. Pero s¨ª sabemos que el mero comentario es una consecuencia natural del bombo que se ha dado a la insistente campa?a: el miembro ha opacado a la serie y, como cualquier cosa que se vende a bombo y platillo, ha empezado a ser cuestionado. Es algo llamativo en pleno 2019 y con la existencia de plataformas que ofrecen todos los tipos de porno imaginables a un clic: sigue causando una enorme curiosidad el ¨®rgano viril de un actor famoso. Pero es tambi¨¦n comprensible. "El pene es un ¨®rgano que est¨¢ escondido ¨Cexplica la sex¨®loga Elena Requena¨C y esto genera mucho misterio y mucha expectativa respecto a ¨¦l. El pecho en la mujer es algo que puede intuirse y llevar m¨¢s o menos expuesto; sin embargo, con el pene esto no es as¨ª. Resultar¨ªa rid¨ªculo pensar que las mujeres midi¨¦ramos nuestra feminidad en torno a el aspecto de nuestra vulva". De aquellos polvos, estos lodos: semejante campa?a con el dichoso miembro ha dado lugar a estos comentarios maliciosos.
?Cu¨¢l ser¨ªa el problema si fuese una pr¨®tesis? Que la campa?a ser¨ªa enga?osa: no hay un desnudo integral de Mario Casas. No est¨¢ usando su propio cuerpo en la funci¨®n actoral, sino ayud¨¢ndose de un complemento. ?Cu¨¢l ser¨ªa el problema si no fuese una pr¨®tesis? Que en el aplauso generalizado a su tama?o (enhorabuena, Mario Casas) hay una legitimaci¨®n de una virilidad caduca que afirma que cuanta m¨¢s polla, m¨¢s hombre. "Me resulta muy agobiante pensar c¨®mo puede sentirse este actor con toda la sociedad especulando acerca de su miembro", a?ade la sexologa Requena.
Y contin¨²a: "Si no es una pr¨®tesis, estar¨ªamos escandaliz¨¢ndonos por un cuerpo, que es suyo y de nadie m¨¢s, aunque se exponga por su trabajo. Dando lugar a opiniones muy diversas que funcionan como un juicio p¨²blico sobre atributos que pueden o no ser ciertos sobre el actor, como que es un gran amante, que es m¨¢s hombre por tener un pene m¨¢s grande, etc. Por otro lado, si fuera una pr¨®tesis, tambi¨¦n me parecer¨ªa algo muy llamativo como sociedad que obliguemos a los actores o a las actrices a perpetuar est¨¢ndares que no son tales, en lugar de mostrar cuerpos diversos, con la belleza que esa diversidad implica. Eso sin entrar en c¨®mo debi¨® sentirse el actor ante semejante mandato de la historia".?
Si sorprende la insistente campa?a por el desnudo de Casas es porque vivimos en un momento en el que ya no es tan raro ver genitales masculinos en la ficci¨®n. En Juego de tronos han aparecido penes en momentos puntuales de todos los tama?os y condiciones. Tampoco es tan raro ya ver el de un actor muy famoso. Hace pocos meses se hablaba del de Chris Pine en El rey proscrito. En 2014 del de Ben Affleck en Perdida. En 2012 del de Michael Fassbender en Shame. Tres casos con mucho eco medi¨¢tico y una caracter¨ªstica en com¨²n: eran tres penes, a ojos del p¨²blico, de tama?o generoso.
Tres miembros, vaya, que val¨ªa la pena mostrar al mundo. ?Otro actor famoso que lo ha ense?ado repetidas veces? Ewan McGregor. S¨ª, tambi¨¦n es de tama?o generoso. El mensaje parece que es que si no es digna de ense?ar, no la ense?es. El actor Terrence Howard apareci¨® completamente desnudo en una escena de ducha carcelaria en la pel¨ªcula de 2005 Get rich or die trying. Desde entonces hay cierto pitorreo en Internet porque el tama?o de sus atributos no obedece, al parecer, a lo que sus seguidores esperaban de ¨¦l.
Uno de los muchos tuits que comentan el desnudo de Mario Casas en 'Instinto'.
A menudo, Hollywood ha tenido miedo al desnudo frontal masculino precisamente por esto: porque sigue centrando la atenci¨®n del espectador. Si lo que vemos es grande, porque lo es. Si es peque?o, porque lo es. Uno en pantalla crea hilaridad en el patio de butacas, al parecer, y en Hollywood solo intentan cambiar esa costumbre desde hace unos a?os. En d¨¦cadas pasadas fueron notorios los episodios en los que un plano donde aparec¨ªa el miembro de un actor famoso se qued¨® en la mesa de montaje tras reacciones negativas del p¨²blico en pases previos: el de William Baldwin en Sliver (Acosada) (1993), el de Kevin Costner en Por amor al juego (1999) y el de Colin Farrell en Una casa en el fin del mundo (2004).
Lo m¨¢s llamativo de todo esto es que parece haber un pacto social para obviar una verdad aplastante que anula todos los comentarios y juicios: un miembro fl¨¢cido no es indicativo de absolutamente nada en lo que respecta al tama?o en erecci¨®n y a su funcionamiento para el placer sexual. "Siempre se ha hablado de las distintas formas de pene, donde aparec¨ªan los llamados?showers (o "de carne"), es decir, los que en un estado relajado mostraban un tama?o m¨¢s grande a la media y sin embargo en erecci¨®n no aumentaban llamativamente su tama?o; y, por otro lado, los conocidos como?growers (o "de sangre"), es decir, los que siendo de un tama?o por debajo de la media, aumentaban m¨¢s en erecci¨®n. Al final esto se reduce a una cuesti¨®n anat¨®mica genital, que es dependiente de factores como la gen¨¦tica o la raza", nos informa la sex¨®loga.
Es refrescante que podamos ver penes. Deber¨ªamos verlos de todos los tama?os y colores, para normalizar que todos los hombres (y algunas mujeres) tienen uno. Que empiecen a ense?arlo solo actores de cuerpos esculturales y enormes miembros en estado fl¨¢cido no ayudar¨¢ a normalizar nada. Pero no es nada refrescante que se conviertan en el principal reclamo. No habremos ganado nada: solo habremos pasado de esconderlos como algo vergonzoso a mostrarlos como trofeos. Ninguna de las dos actitudes va a ayudar.
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