Roger y Jules, promesas inseparables de la danza africana
El d¨²o de bailarines tiene en cartel tres espect¨¢culos que les llevar¨¢n a escenarios europeos este oto?o con una fusi¨®n desacomplejada de estilos urbanos con otras t¨¦cnicas
Est¨¢n acostumbrados a las preguntas: ?Eres Roger o Jules? ?Jules o Roger? Es tanta la confusi¨®n que los dos han acabado por responder a ambos nombres. Roger Sarr (Dakar, 1992) y Jules Romain Djihounouck (Richard Toll, 1992) llevan bailando juntos desde hace 11 a?os y son inseparables. Indispensables hoy en la escena art¨ªstica de Saint Louis, estos j¨®venes bailarines senegaleses se perfilan como promesas en el panorama nacional e incluso continental de la danza contempor¨¢nea.
Asiduos al Festival Duo Solo desde sus primeros a?os, la edici¨®n de 2019 les ha rendido una suerte de homenaje con la programaci¨®n de dos de sus espect¨¢culos en d¨²o y una obra coral con sus compa?eros del Centro Cultural Le Ch?teau, donde se forman desde hace cinco a?os. ¡°Es un orgullo para el festival promocionar a artistas locales que hoy en d¨ªa forman parte de la plataforma emergente de la danza en Senegal¡±, explica Alioune Diagne, director art¨ªstico y fundador del Duo Solo. Recoge as¨ª parte de los frutos de un evento que lleva trabajando durante una d¨¦cada la profesionalizaci¨®n de la danza contempor¨¢nea en Saint Louis.
En primicia, Sarr y Romain presentaron en esta ciudad la pieza Sans Issues (Sin salidas), un d¨²o autocoreografiado y que trata sobre su recorrido personal y profesional en el que se cuestionan su relaci¨®n ¡ª?como amigos o hermanos?¡ª, su interdependencia profesional, sus diferencias y como estas les han ayudado a repensarse y crecer.
La cuesti¨®n religiosa se aborda de forma expl¨ªcita: la diferencia de creencias les permite cuestionar la mirada de los dem¨¢s y la simbiosis de sus vidas. ?Se habr¨¢ transformado Jes¨²s en el profeta Mahoma? Ellos piensan que s¨ª: que ¡°solo cambia el atuendo, pero la ambici¨®n y la esencia es la misma¡±.
Sin m¨¢s atrezo que una silla que representa aquello que comparten, los dos bailarines se entregan en el escenario desplegando sus dotes art¨ªsticas: la combinaci¨®n del baile con cuadros m¨¢s teatralizados, la mezcla de estilos de danza de calle y de academia, la fuerza f¨ªsica de ambos y el juego de miradas con el p¨²blico, al que incluyen en la pieza, sin pudor.
Seg¨²n el core¨®grafo y bailar¨ªn Hardo K?, la magia de este espect¨¢culo reside "en lo revolucionario que es hoy en d¨ªa profundizar en los sentimientos: lo inaudito que es decirse 'te quiero' sin pensar c¨®mo te juzgar¨¢ el resto¡±. En una sociedad donde bailar no est¨¢ bien visto entre hombres adultos y ser artista es raramente considerado una profesi¨®n digna, la pieza trata algunas de las preocupaciones de estos j¨®venes core¨®grafos. ¡°Queremos que el oficio sea respetado, ya que la danza exige mucho trabajo y reflexi¨®n: antes de expresarte como bailar¨ªn est¨¢s obligado a observar y a aprender, saber lo que puedes aportar a tu sociedad¡±, explica Roger Sarr, que ha vivido con mucho dolor la incomprensi¨®n de su padre por su carrera.
Talento y visi¨®n
Tanto Roger como Jules vienen de un universo hip-hop en el que pronto encontraron sus l¨ªmites y, superando sus propios prejuicios hacia la danza contempor¨¢nea, empezaron a frecuentar el Duo Solo y los bailarines que por all¨ª pasaban, hasta apreciar la libertad que esta nueva t¨¦cnica les permit¨ªa. El director de la prestigiosa escuela de danza L¡¯?cole de Sables, Patrick Acogny, con quien se han formado en diferentes ocasiones a lo largo de estos ¨²ltimos a?os, dice de ellos que representan una nueva tendencia en Senegal, "aquella que no duda en mezclar estilos ¡ªurbano con tradicional y moderno¡ª para, simplemente, expresar lo que tienen que decir¡±. Acogny considera que ser¨¢n los bailarines como Roger y Jules los que contribuyan a hacer emerger definitivamente la danza senegalesa en todo el mundo, con una nueva generaci¨®n (en la que incluye nombres como Babacar Top, Baidy Ba o Fatou Ciss¨¦) ¡°abierta y desacomplejada¡± a los que hay que ¡°seguir la pista¡±.
Acogny es optimista sobre el despegue de estos artistas, que han seguido lo que para ¨¦l es clave para un bailar¨ªn: formarse. Primero, desde la t¨¦cnica, como llevan haciendo desde hace un lustro con figuras de renombre de la escena africana como Salia Sanou o internacionales como la espa?ola A?da Colmenero, entre otras. Y segundo, desde el ¨¢mbito acad¨¦mico. ¡°Para ser un buen artista hay que reflexionar y abordar el trabajo desde una perspectiva cr¨ªtica, y el no seguir los estudios puede suponer un obst¨¢culo¡±, afirma Acogny, que sabe que tanto Roger como Jules han frecuentado las bancadas universitarias.
Roger y Jules saben que es dif¨ªcil vivir de la danza, pero tienen claro que para hacerlo es necesario diversificarse
El que los bailarines llaman su mentor, Alioune Diagne, dice de ellos que, adem¨¢s de por talento, destacan por su ¡°enorme voluntad de aprender¡±. Con ambos, el core¨®grafo y director de la Compa?¨ªa Diagn¡¯art tiene en cartel el espect¨¢culo Banlieu, el proyecto Sleep well para p¨²blico joven y?Las aventuras de Leuk la liebre, una coreograf¨ªa inspirada en la popular f¨¢bula senegalesa escrita por L¨¦opold Sedar Senghor y que ha llevado a Sarr y Romain a importantes escenarios de Francia y Holanda; de hecho, estos volver¨¢n a acogerles durante una gira en octubre y noviembre de este a?o.
Fue Diagne quien les dijo una vez que ¡°cuando se es bailar¨ªn nunca se est¨¢ en paro¡± y han hecho de esta frase su m¨¢xima. Saben que es dif¨ªcil vivir de ello, pero tienen claro que para hacerlo es necesario diversificarse. Por eso han puesto en marcha una estrategia que est¨¢ siendo relativamente exitosa: ¡°Hemos entendido que la danza es un oficio amplio, por lo que combinamos ser int¨¦rpretes en Diagn¡¯art con ser core¨®grafos de nuestros propios trabajos personales y tambi¨¦n formadores en nuestra escuela Ndar Danse, o para otras entidades. Entre todo ello conseguimos ser independientes econ¨®micamente, ?aunque sin ning¨²n lujo!¡±, comenta Jules Romain, quien afirma que uno de sus objetivos es poder vivir de su arte y tener ¡°un salario al final de mes¡±, como todo el mundo.
L¨ªderes entre los j¨®venes
Cuando Jules y Roger crearon el primer grupo de baile con sus amigos del barrio, con apenas 17 a?os, sab¨ªan que aunque fuese una diversi¨®n, habr¨ªa que guardar unas reglas: ¡°Estaba prohibido fumar o beber y, o ten¨ªas una media de 12 sobre 20 en los estudios o no pod¨ªas seguir en el grupo¡±, r¨ªen al recordar que hasta se miraban los boletines trimestrales para comprobar que as¨ª era.
Ejerc¨ªan entonces un liderazgo que hoy es a¨²n mayor: ¡°Es incre¨ªble c¨®mo los j¨®venes bailarines de Saint Louis los tienen en cuenta, ven en ellos el ejemplo de que si trabajas duro puedes cumplir tus sue?os¡± explica el core¨®grafo F¨¦ri de Gues, con quien llevan cuatro meses aprendiendo t¨¦cnicas de hip-hop, danza contempor¨¢nea y teatro junto con una decena de chicos y chicas no profesionales.
Ellos entienden esa responsabilidad y trabajan muy estrechamente con la treintena de bailarines que entrena como ellos en Le Ch?teau, situado en un barrio pesquero de Saint Louis con unas condiciones socioecon¨®micas bastante precarias. ¡°Les acompa?amos en lo personal y tambi¨¦n en lo profesional, repitiendo formaciones en las que hemos participado en otros lugares. Queremos aumentar el nivel de la danza en Saint Louis y para ello hemos creado tambi¨¦n la Ndar Urban Week, una plataforma de baile urbano que este a?o celebra su tercera edici¨®n del 30 de septiembre al 5 de octubre y de la que siempre salen nuevos talentos¡±, explica Sarr. Asegura tambi¨¦n que las creaciones de los j¨®venes de su generaci¨®n est¨¢n cargadas de mensajes sociales y respuestas de la juventud a problemas globales.
Les queda mucho por hacer, pero soplan vientos favorables. Tienen en mente la preparaci¨®n del a?o de ?frica Creativa en Francia y la Bienal de la Danza en ?frica (principal encuentro continental del sector) que se celebrar¨¢ en Marrakech en 2020 y en donde sue?an con presentar sus trabajos. Algunos en d¨²o y otros en solitario, pero siempre juntos.
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