Un cuarto de ¨¦xito contra el c¨¢ncer

Llevamos unos a?os saludando a la inmunoterapia como una nueva promesa contra el c¨¢ncer, y la experiencia de los onc¨®logos cl¨ªnicos parece confirmarlo. Lee en Materia una buena puesta al d¨ªa sobre el tema, con las esperanzas y frustraciones de los m¨¦dicos que lo est¨¢n aplicando en los grandes hospitales. Y tambi¨¦n con una agenda apremiante para la ministra de Sanidad y los consejeros de Salud. El bloqueo pol¨ªtico podr¨¢ afectar a otros departamentos, pero aqu¨ª es donde nos estamos jugando la salud de los votantes. Y, mientras los cient¨ªficos siguen perfeccionando la t¨¦cnica, hay un mont¨®n de cosas que los pol¨ªticos pueden ir haciendo para facilitar las cosas a los investigadores, a los m¨¦dicos y a los pacientes.

La penicilina del c¨¢ncer no solo no existe, sino que es muy improbable que llegue a existir. Ning¨²n cient¨ªfico del campo conf¨ªa en hallar un medicamento que erradique la mayor¨ªa de los tumores, como los antibi¨®ticos hicieron con las infecciones. Lo que un onc¨®logo considera una estrategia exitosa siempre es algo m¨¢s modesto que eso, como un nuevo tratamiento que ayuda a un peque?o porcentaje de pacientes de un tipo concreto de c¨¢ncer. Y la inmunoterapia, sin duda, ha superado con creces ese list¨®n. Se ha puesto a prueba en casos graves de melanoma, pulm¨®n, mama, vejiga, linfoma, ri?¨®n y colon, con resultados muy dispares. En p¨¢ncreas no funciona, ni en el 40% de los casos de pulm¨®n, ni en el 50% de los de est¨®mago, ni en el 95% de los de colon. Sumando todos los tipos particulares, sin embargo, cabe concluir que la inmunoterapia ha funcionado en una cuarta parte de los pacientes de otro modo incurables. En oncolog¨ªa, eso se llama un ¨¦xito, por m¨¢s que solo sea un cuarto de ¨¦xito.

El objetivo de los cient¨ªficos, como es l¨®gico, es ampliar ese porcentaje todo lo posible. En el mundo est¨¢n en marcha ahora mismo 2.000 ensayos cl¨ªnicos de peque?o nivel para examinar esa cuesti¨®n y otras relacionadas. Los investigadores ya han encontrado una clave importante: para que la inmunoterapia funcione, es preciso que las defensas del paciente ya hubieran reaccionado contra el tumor antes de empezar el tratamiento. Ah¨ª, sobre ese sistema inmune que ya hab¨ªa reconocido a las c¨¦lulas cancerosas, es donde las actuales estrategias de estimulaci¨®n funcionan de manera eficaz. Es un resultado importante que ya ha abierto muchas v¨ªas de investigaci¨®n. Nada de eso llegar¨¢ de martes a jueves.

Pero no hace falta esperar a eso para que los pol¨ªticos se pongan a resolver unos cuantos problemas muy importantes que ya estamos viendo en el estado actual de la t¨¦cnica. Seg¨²n los onc¨®logos, ahora mismo no est¨¢ garantizada la equidad de acceso a la inmunoterapia en todos los territorios espa?oles. Si uno tiene un c¨¢ncer, es mejor que viva en una gran ciudad o en una comunidad bien financiada. Con un tratamiento que cuesta 3.000 euros por paciente y mes, y suele llevar un periodo de dos a?os, que a veces deber¨ªan ser ampliables seg¨²n los m¨¦dicos, esta cuesti¨®n tiene implicaciones ¨¦ticas y jur¨ªdicas muy profundas. De aqu¨ª a las elecciones queda un buen trecho para hacer cosas vitales, y seguro que los hastiados votantes apreciar¨ªan una iniciativa cre¨ªble al respecto.

LA CIENCIA DE LA SEMANA es un espacio en el que Javier Sampedro analiza la actualidad cient¨ªfica. Suscr¨ªbete a la newsletter de Materia y lo recibir¨¢s cada s¨¢bado en tu correo, junto con una selecci¨®n de nuestras mejores noticias de la semana.