Cary Grant, el revolucionario: LSD para las amas de casa y la relaci¨®n que extra?¨® a todo Hollywood
El 29 de noviembre falleci¨® hace 33 a?os el actor icono de la elegancia, leyenda del cine y fuente de continuos rumores sobre una vida que result¨® dif¨ªcil de comprender en la era dorada del celuloide

Cary Grant (Bristol, 1904 - Iowa, 1986) falleci¨® el 29 de noviembre, hace 33 a?os, pero nunca hemos dejado de hablar de ¨¦l. Como icono de elegancia masculina suele ocupar espacio en publicaciones de moda y como leyenda del cine no deja de provocar inter¨¦s y discursos nost¨¢lgicos sobre unos tiempos en los que la relaci¨®n entre una estrella, una c¨¢mara y el p¨²blico era mucho menos alambicada que hoy.
Pero, posiblemente a su pesar, gran parte del inter¨¦s que suscita Grant se debe todav¨ªa a su vida privada. Hace apenas dos semanas la que fue su esposa durante tres a?os en la d¨¦cada de los sesenta, la actriz Dyan Cannon (Washington, EE UU, 1937), desvelaba que rechaz¨® una oferta millonaria para escribir un libro destapando secretos sobre su matrimonio. La oferta vino, adem¨¢s, de Jackie Kennedy, que en la ¨²ltima etapa de su vida trabaj¨® como editora de libros y logr¨® que Michael Jackson escribiese sus ¨²nicas memorias en 1987 (Moonwalker).
"Casi nunca daba entrevistas. Y despu¨¦s de empezar a consumir ¨¢cidos llam¨® personalmente a la revista Good Housekeeping y les dijo: ¡®?Quiero hablar sobre esto al mundo! Ha cambiado mi vida. Todo el mundo deber¨ªa probarlo" Mark Kidel, director del documental Becoming Cary Grant
La vida de Cary Grant, que se cas¨® cinco veces y tuvo una hija (precisamente con Cannon y a sus 62 a?os) sigue siendo objeto de inter¨¦s tres d¨¦cadas despu¨¦s de su muerte por el abismo que existe entre el personaje elegante, seductor, seguro de s¨ª mismo y con una calmada vis c¨®mica que conocimos en la pantalla, y el hombre atormentado, rebelde y arriesgado que fue en realidad.
Dos hechos llaman la atenci¨®n sobre todos los dem¨¢s: uno es su relaci¨®n con el LSD, sustancia alucin¨®gena que empez¨® a consumir de modo terap¨¦utico ¡ªfue una controvertida moda entre 1950 y 1965 en Estados Unidos y hoy est¨¢n resurgiendo los estudios que defienden su uso en microdosis como antidepresivo¡ª y, seg¨²n ¨¦l, lo salv¨® de una depresi¨®n. La infancia de Grant fue muy triste: su hermano muri¨® muy joven de tuberculosis, su padre era alcoh¨®lico y su madre depresiva. Cuando Cary ten¨ªa nueve a?os, su padre envi¨® a su madre a una instituci¨®n de salud mental y le dijo que hab¨ªa muerto. Al a?o siguiente, el padre se cas¨® con otra mujer. El actor no supo hasta la treintena, cuando era una estrella de cine, que su madre segu¨ªa viva en una cl¨ªnica de salud mental. Cary Grant tuvo una infancia tan infeliz que, a comienzos de su carrera, decidi¨® falsearla y contar que ven¨ªa de una buena familia del teatro ingl¨¦s. ?
¡°Cary era un hombre muy discreto¡±, record¨® en 2017 en las p¨¢ginas de The Guardian Mark Kidel, director del documental Becoming Cary Grant. ¡°Casi nunca daba entrevistas. Y despu¨¦s de empezar a consumir ¨¢cidos llam¨® personalmente a la revista Good Housekeeping [hist¨®rica publicaci¨®n femenina estadounidense sobre hogar, salud y cocina] y les dijo: ¡®?Quiero hablar sobre esto al mundo! Ha cambiado mi vida. Todo el mundo deber¨ªa probarlo¡±. Grant acab¨® dando esa entrevista: en la p¨¢gina 64 del n¨²mero de septiembre de 1960, una de las mayores estrellas de la pantalla recomend¨® a todas las amas de casa estadounidenses que empezasen a consumir LSD.

Pero el misterio m¨¢s duradero sobre Grant son sus relaciones personales. Muchos se han apresurado a afirmar que era homosexual, entre ellos el madame Scotty Bowers en su escandaloso libro de memorias Servicio completo, o el dise?ador de vestuario Orry-Kelly, que afirm¨® haber tenido una relaci¨®n amorosa con ¨¦l cuando el actor era joven y acababa de llegar a Nueva York. Kelly tambi¨¦n a?adi¨® que, por aquel entonces, el actor trabajaba como escort, o sea, hombre de compa?¨ªa para mujeres adineradas. Otros lo desmienten: ¡°Jam¨¢s vi ninguna indicaci¨®n de eso¡±, dijo Cannon. La hija de Grant y Cannon, Jennifer, escribi¨® en 2011 en unas memorias sobre su padre: "?Experiment¨® sexualmente mi padre? No lo s¨¦. ?Y yo? ?He experimentado con mi sexualidad? ?Y t¨²? Si la experimentaci¨®n hace que uno sea gay, entonces me figuro que casi todo el mundo lo es".
La orientaci¨®n sexual de Cary Grant siempre quedar¨¢ expuesta a los rumores y las interpretaciones personales. Por su parte, ¨¦l siempre mantuvo que era heterosexual y, a menudo, fanfarrone¨® de ello con sentido del humor. ¡°Cuando era joven y muy popular, me encontraba a chicas con su novio y cuando ellas dec¨ªan algo bonito sobre m¨ª ellos soltaban: ¡®S¨ª, pero he o¨ªdo que es marica¡±, cont¨® Grant a The New York Times en una entrevista publicada en 1977. ¡°Es rid¨ªculo, pero lo dicen de todos nosotros [en referencia a los actores]. Pero debo decir que ese chico me est¨¢ haciendo un favor. N¨²mero uno, est¨¢ expresando sus propias inseguridades sobre la chica. N¨²mero dos, ha provocado curiosidad en ella sobre m¨ª. N¨²mero tres, probablemente esa chica acabe en mi cama para comprobarlo por s¨ª misma. Por otra parte, s¨¦ que un matrimonio es feliz y seguro cuando un chico llega y me dice: ¡®A mi mujer le encantas¡±.
Paramount vendi¨® a la prensa la noci¨®n de que Cary Grant y Randolph Scottt eran dos grandes conquistadores que compart¨ªan una casa que llamaron ¡°el sal¨®n de los solteros¡±. Para reforzar esta idea, se difundieron noticias sobre se?oritas que continuamente visitban la casa
Rumores aparte, lo que es indudable es que Grant dinamit¨® un mont¨®n de convencionalismos sobre c¨®mo deb¨ªa comportarse y vivir una gran estrella masculina del Hollywood de los a?os treinta (cuyo estrellato se extendi¨® hasta los cincuenta). Y eso ocurri¨® especialmente durante los 12 a?os en los que vivi¨® con Randolph Scott (Virginia, EE UU, 1898- California, EE UU, 1987) entre 1932 y 1944. Si es un rumor persistente que Grant era gay, Randolph Scott es considerado universalmente su supuesto novio.
Los dos eran actores famosos, j¨®venes y guapos. Grant era el ep¨ªtome de la elegancia brit¨¢nica, Scott el de la masculinidad del vaquero (protagoniz¨® famosas pel¨ªculas del oeste como Esp¨ªritu de conquista o Los cautivos). Se conocieron en 1932 en los estudios Paramount, cuando Scott estaba rodando Sky Bride (un drama a¨¦reo con guion de Joseph L. Mankiewicz) y Grant trabajaba en Pecadores sin careta. Juntos protagonizaron S¨¢bado de juerga, donde luchaban por el amor de una mujer, Nancy Carroll. Muy poco despu¨¦s se fueron a vivir juntos a una casa en primera l¨ªnea de playa en Santa M¨®nica (California).
Por aquel entonces los estudios controlaban hasta el ¨²ltimo recoveco de la vida de sus estrellas. Que dos de la Paramount compartiesen casa levantaba algunas cejas, as¨ª que la productora vendi¨® a la prensa la idea de que ambos eran dos grandes conquistadores que compart¨ªan una casa que llamaron ¡°el sal¨®n de los solteros¡±. Para reforzar esta idea se difundieron noticias sobre se?oritas que entraban y sal¨ªan continuamente de la casa y, lo mejor de todo, los dos posaron para un reportaje fotogr¨¢fico donde ense?aban su hogar.
Vistas hoy, esas im¨¢genes resultan alucinantes: en una de las eras m¨¢s represivas en Estados Unidos, Cary y Randolph posan en su casa¡ como si fueran una pareja rom¨¢ntica. Algo que obviamente no era la intenci¨®n entonces y que solamente el tiempo y nuestra mirada, diferente hoy a la de hace ochenta a?os, ha creado. Pero la relectura contempor¨¢nea de las im¨¢genes es impactante e innegable: Cary y Randolph cenando con velas. Cary y Randolph posando con un caniche. Cary y Randolph cocinando y lavando los platos. Cary tocando el piano mientras Randolph le lee una partitura. Cary y Randolph jugando a la pelota en ba?ador. Cary y Randolph haciendo ejercicio juntos. Compru¨¦belo usted mismo:






Los dos se casaron varias veces, claro. En 1934, mientras viv¨ªa con Scott, Grant se cas¨® con la actriz Virginia Cherrill. Los rumores dijeron que el matrimonio hab¨ªa sido impuesto por Paramount (este tipo de uniones era habitual en la era de los estudios por motivos de marketing, no ten¨ªa por qu¨¦ ser ¨²nicamente para ocultar una supuesta homosexualidad). El matrimonio dur¨® siete meses: ella afirm¨® que Grant beb¨ªa demasiado, se volv¨ªa abusivo y discut¨ªan sin parar. Al divorciarse, ¨¦l volvi¨® a vivir con Randolph en la casa de Santa M¨®nica. Durante esos 12 a?os de convivencia intermitente se volver¨ªa a casar con una rica heredera, Barbara Hutton, en 1942. Esta vez el matrimonio dur¨® algo menos de tres a?os.
Por si todo esto fuera poco, en 1938 Grant protagoniz¨® un cl¨¢sico del cine en el que populariz¨® la palabra gay. El t¨¦rmino gay es relativamente nuevo: nadie llamaba "gay" a Grant o a Scott porque esa palabra no exist¨ªa con ese significado por aquel entonces. Los llamaban, en todo caso,?fags (maricas). Gay sirve en ingl¨¦s para denominar a alguien alegre, hedonista, sin preocupaciones. Su uso para referirse a un hombre homosexual no comenz¨® a popularizarse hasta los a?os sesenta en los pa¨ªses anglosajones. Pero cuando lo escuchamos por primera vez, con ese uso concreto, fue en la boca de Cary Grant.
Un ¨²ltimo detalle convirti¨® su relaci¨®n, fuese de la naturaleza que fuese, en algo con una conexi¨®n que parece superar lo terrenal: Grant falleci¨® en noviembre de 1987 y Scott lo hizo solo tres meses despu¨¦s, en enero de 1988
En La fiera de mi ni?a (1938) hay una escena en la que Katharine Hepburn roba la ropa de Grant mientras este se est¨¢ duchando y ¨¦l se ve obligado a ponerse lo ¨²nico que encuentra en el cuarto de ba?o de ella: una bata de seda con plumas. La estampa no desentonar¨ªa hoy en un desfile del dise?ador Palomo Spain, pero, por aquel entonces, funcionaba como reclamo c¨®mico: un hombre vestido de mujer era algo muy gracioso. Al ser descubierto vestido de mujer y preguntado por el motivo, ¨¦l responde: ¡°?Me he vuelto gay de repente!¡±. Es la primera vez que la palabra gay, con ese significado, es usada en la pantalla.
Por encima de si era gay o no lo era, la actitud de Grant era incre¨ªblemente libre para aquella era. Si era gay, tuvo el valor de irse a vivir con otro hombre en una ¨¦poca en la que ning¨²n actor de Hollywood lo hac¨ªa. Si no lo era, tuvo el valor de jugar con ello y re¨ªrse de los rumores en episodios como el de La fiera de mi ni?a. Si era bisexual, o si sencillamente tuvo curiosidad por experimentar, lo manej¨® con asombrosa mano izquierda para no dejar de trabajar y mantener el cari?o de millones de espectadores de car¨¢cter conservador.
Grant y Scott dejaron de vivir juntos en 1945. Se dice que mantuvieron su amistad. Y un ¨²ltimo detalle convirti¨® su relaci¨®n, fuese de la naturaleza que fuese, en algo con una conexi¨®n que parece superar lo terrenal: Grant falleci¨® en noviembre de 1987 y Scott lo hizo solo tres meses despu¨¦s, en enero de 1988.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
