Estas son las razones que incitan a las adolescentes a dejar la actividad f¨ªsica
La falsa idea de no poder compatibilizar deporte y estudios; y la escasa oferta de actividad para chicas, las conduce al sedentarismo
Hace unos d¨ªas, se hizo p¨²blico, en The Lancet, un estudio de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) en el que se afirma que ¡°la mayor¨ªa de los adolescentes no cumple con las pautas actuales de actividad f¨ªsica¡±. En concreto, la publicaci¨®n habla de que el 80% de los adolescentes de todo el mundo, de entre 11 y 17 a?os, no realiza la actividad diaria m¨ªnima para estar saludable y que los est¨¢ndares de dicha organizaci¨®n establecen en una hora de movimiento diaria.
El dato no es lo ¨²nico que sorprende de este informe. Tambi¨¦n el hecho de que el sedentarismo sea m¨¢s habitual entre chicas que entre chicos. En el total mundial, un 78% de los varones j¨®venes es sedentario, frente a un 85% en el caso de las chicas. Precisamente esta diferencia entre ambos g¨¦neros fue objeto de estudio por parte de Fundaci¨®n Mapfre que, en colaboraci¨®n con la Universidad Rey Juan Carlos, public¨® el pasado verano Mujer Joven y Actividad F¨ªsica, en el que se analizan las razones de que ellas dejen el deporte antes que ellos.
M¨¢s exigentes y estudiosas
Fernando del Villar ?lvarez es coautor de este estudio. ?l encuentra factores internos y externos entre los motivos para un mayor sedentarismo femenino. De entre los primeros, el hecho de que ¡°las chicas tienen una visi¨®n m¨¢s utilitarista de la pr¨¢ctica deportiva, otorgando gran importancia al componente social en la actividad, que en ocasiones no se ve satisfecho en la oferta deportiva actual. Por otro lado, tienen un mayor sentido de la responsabilidad y por tanto, mayor preocupaci¨®n por su rendimiento acad¨¦mico¡±. Pero adem¨¢s, el coordinador del T¨ªtulo de Grado de CC. Actividad F¨ªsica y del Deporte entiende que ¡°la mujer presenta un mayor nivel de autoexigencia y, por ende, percibe un menor grado de competencia y destreza en el desempe?o motriz, lo que obstaculiza su mayor implicaci¨®n en el ¨¢mbito deportivo¡±.
Respecto a los factores externos, el coautor del estudio observa que ¡°la oferta deportiva que existe actualmente fomenta en mayor medida la competitividad que las relaciones interpersonales y el trabajo en equipo, valores con los que se identifican m¨¢s ellas y que, seg¨²n nuestros resultados, contribuir¨ªan a incrementar su inter¨¦s y motivaci¨®n hacia la realizaci¨®n de actividad f¨ªsica¡±. Adem¨¢s, encuentra que a¨²n hay una menor aceptaci¨®n social de la joven como mujer deportista y que cuentan con menor apoyo que los chicos en su entorno pr¨®ximo para seguir haciendo deporte.
A estas conclusiones se ha llegado tras entrevistar a m¨¢s de 10.000 adolescentes y j¨®venes espa?oles de 12 a 25 a?os. Muchas de las entrevistadas ya en pleno sedentarismo, porque su abandono es m¨¢s temprano y abrupto. Generalmente coincide con el paso de la ESO a Bachillerato, en torno a los 16 a?os. Mientras que ellos suelen dejarlo al llegar a la Universidad. Esta es una de las explicaciones a este fen¨®meno, seg¨²n Villar ?lvarez: ¡°La madurez adelantada de la mujer y la aparici¨®n de otros intereses sociales, as¨ª como la falta de continuidad en la oferta deportiva acorde a sus prioridades fuera del contexto escolar¡±. A esto hay que sumarle su mayor inter¨¦s en los resultados acad¨¦micos.
Hacer deporte mejora los resultados acad¨¦micos
Pero este mismo estudio habla de los beneficios acad¨¦micos de la pr¨¢ctica deportiva, porque los buenos resultados acad¨¦micos y el deporte no son incompatibles. M¨¢s bien al contrario. Fernando del Villar ?lvarez: ¡°Si se hace pr¨¢ctica f¨ªsica por la ma?ana y a continuaci¨®n hay que dedicarle cinco horas al estudio, esas cinco horas van a tener m¨¢s rendimiento porque los cambios metab¨®licos de aumento de la circulaci¨®n sangu¨ªnea y aumento de la funci¨®n metab¨®lica hacen que esa persona tenga mayor bienestar mental, mayor capacidad de concentraci¨®n, de atenci¨®n y capacidad ejecutiva¡±. Las chicas para quienes las notas son tan importantes deber¨ªan tener en cuenta que este estudio avala que incorporar 60 minutos de actividad f¨ªsica al menos tres d¨ªas en semana ayuda a mejorar los rendimientos acad¨¦micos.
Por supuesto, la salud en general mejora con la pr¨¢ctica regular de actividad f¨ªsica, ¡°tanto en el plano fisiol¨®gico, psicol¨®gico, como social, contribuyendo positivamente a mejorar la calidad de vida, bienestar personal y desarrollo integral del individuo¡±. El desarrollo de h¨¢bitos positivos de actividad f¨ªsica en estas edades parece ser un ¡°factor preventivo frente al posible desarrollo de enfermedades futuras como la diabetes tipo II, enfermedades cardiovasculares, osteoporosis o el riesgo de padecer diferentes tipos de c¨¢ncer no metast¨¢sico en la edad adulta. Esto, unido a que la pr¨¢ctica de actividad f¨ªsica tambi¨¦n act¨²a como factor protector frente a la adquisici¨®n de h¨¢bitos de vida nocivos, reducci¨®n en el consumo de tabaco, alcohol u otras sustancias il¨ªcitas, ponen de manifiesto la importancia prioritaria de actuar sobre este colectivo ante orientar futuras estrategias de promoci¨®n de la salud p¨²blica¡±, asegura del Villar ?lvarez.
Deportes de equipo para compartir vivencias
Reducir la brecha de g¨¦nero es posible a medio plazo, siempre y cuando se tengan pongan en marcha una serie de medidas estrat¨¦gicas por parte de las administraciones, los centros deportivos y los escolares. El estudio de la Rey Juan Carlos propone, por ejemplo, que ¡°se reformule la oferta deportiva seg¨²n las preferencias de la mujer joven¡±. Es decir, que exista una oferta deportiva diferenciada por g¨¦nero. Porque a ellas les gustan actividades diferentes y, sobre todo, maneras diferentes de ponerlas en marcha. ¡°Son m¨¢s sociales, capaces de encontrar mayor satisfacci¨®n cuando se comparan con un igual y pueden compartir el rendimiento, los retos, los objetivos¡±. Por eso, la oferta no debe ir dirigida a una chica en concreto sino a un colectivo: ¡°Si enganchas a tres amigas, las tres se comprometer¨¢n a ir y se animar¨¢n la una a la otra. En el momento en que una se desenganche, lo dejar¨¢n las tres. Ellas hacen deporte para compartir y tener una vivencia social¡±. Ellos, para ganar.
Quiz¨¢s tambi¨¦n es necesario que la sociedad siga haciendo peque?os cambios en el concepto que se tiene del deporte y, sobre todo, de las deportistas. ¡°Entre las propias chicas a¨²n no es un factor de liderazgo social. Ellas no lo valoran tanto¡±. Tampoco a la hora de divertirse. No escogen actividades l¨²dicas relacionadas con la actividad f¨ªsica tanto como los chicos. El dato lo facilita Carlos Garc¨ªa, CEO de Urban Planet: ¡°El 65% de nuestros clientes son chicos, frente a un 35% de chicas. No obstante, desde la empresa de ocio activo tratan de que estos porcentajes cada vez se igualen m¨¢s¡±. Est¨¢n especializados en ofrecer una manera de entretenimiento diferente a ¡°ni?os y ni?as para poder divertirse al tiempo que hacen ejercicio, alej¨¢ndolos por unas horas de las pantallas¡±. Entre su oferta destaca el parkour, la escalada, la tirolina y, sobre todo, las camas el¨¢sticas.
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