Los 11 bulos que los antivacunas repiten sin parar
Un estudio analiza 1,5 millones de mensajes en redes sociales sobre inmunizaci¨®n y concluye que los detractores de este gran avance cient¨ªfico son una comunidad muy cerrada que se retroalimenta constantemente
Fue un simple rasponazo al que los padres no dieron importancia. Una semana despu¨¦s, el ni?o comenz¨® a llorar, a apretar la mand¨ªbula, sufrir espasmos musculares y se le arque¨® el cuello y la espalda. T¨¦tanos. Una enfermedad prevenible con una vacuna que ha logrado reducir un 99% las muertes desde 1940. Los padres tuvieron entonces que recurrir a un helic¨®ptero de emergencia para trasladar al peque?o de seis a?os al hospital, donde pas¨® dos meses en una terrible agon¨ªa en cuidados intensivos. A pesar de la experiencia, sus progenitores rechazaron las vacunas que los m¨¦dicos les recomendaron. Sucedi¨® en Oreg¨®n (Estados Unidos) en 2017 y los gastos m¨¦dicos ascendieron a m¨¢s de 800.000 d¨®lares.
Este caso se conoci¨® en 2019 despu¨¦s de que cinco doctores lo expusieran en una publicaci¨®n cient¨ªfica y se convirti¨® en una de las conversaciones sobre la inmunizaci¨®n que m¨¢s comentarios gener¨® en redes en ese momento. Un ejemplo claro del peligro para la salud p¨²blica que supone este grupo, minoritario en Espa?a, pero con cierta fuerza en lugares como Estados Unidos. La historia del ni?o del t¨¦tanos est¨¢ incluida en un estudio sobre la influencia de la comunidad antivacunas recientemente publicado por la empresa de big data Alto Analytics.
La investigaci¨®n evalu¨® 1,5 millones de interacciones en Facebook, Instagram y Twitter por parte de 830.000 usuarios de 96 pa¨ªses entre febrero y marzo de 2019. Estudiaron solo mensajes en ingl¨¦s por lo que el 41% de ellos proced¨ªan de Estados Unidos, el 4,2% de Canad¨¢, el 4% de Reino Unido y el 1,5% de Australia. Para ello, han utilizado una plataforma de an¨¢lisis de datos propia. Despu¨¦s agruparon las diferentes narrativas utilizando inteligencia artificial.
Dear @POTUS, #WeThePeople, as registered voters throughout the country, request an executive order protecting USA¡¯s #religiousfreedom & putting a stop to Pharma¡¯s agenda for mandating liability free mass vaccinations. ¡°Save our children & their futures¡±#MedicalFreedom #NoMandates
— aspiesmom (@aspiesmom) January 16, 2020
Los resultados sirven para extraer conclusiones sobre c¨®mo combatir bulos en redes y aprender sobre c¨®mo los usuarios se reafirman una y otra vez en lo mismo. "El porcentaje de mensajes en contra de las vacunas es much¨ªsimo menor que los que las apoyan, pero consiguen ser una pi?a y hacer m¨¢s ruido. Cuando haces mucho ruido, generas mucho contenido, esto se indexa muy bien dentro de las redes y en Google y consigues que tenga m¨¢s fuerza", explica Alejandro Romero, director general de Alto Analytics.
"Tienen una serie de mensajes que repiten sin parar y constituyen una narrativa muy potente", recalca Romero. El an¨¢lisis es capaz incluso de establecer una clasificaci¨®n de las 11 creencias sin fundamento cient¨ªfico ni m¨¦dico que esta comunidad se repite sin cesar desde que surgiera este movimiento. Muchas de ellas tienen su origen en el estudio de Andrew Wakfield publicado en 1998 en The Lancet que relacionaba vacunas y autismo. La investigaci¨®n fue retirada poco despu¨¦s cuando se prob¨® que todo part¨ªa de un fallo metodol¨®gico que la invalidaba por completo. Esta sigue suponiendo hoy probablemente la p¨¢gina m¨¢s sonrojante en la historia de esta prestigiosa revista.
Seg¨²n el an¨¢lisis, estos son los mensajes m¨¢s repetidos:
1. Las vacunas causan autismo.
2. Causan par¨¢lisis, problemas en el embarazo, muerte...
3. Solo sirven para enriquecer a las farmac¨¦uticas.
4. Los padres son los ¨²nicos que pueden decidir.
5. Los ni?os reciben muchas m¨¢s vacunas que antes.
6. Las vacunas contienen elementos da?inos.
7. La ciencia no es precisa.
8. Si las vacunas no son da?inas, ?por qu¨¦ hay compensaciones en los tribunales por si fallan?
9. Si las vacunas funcionan, ?c¨®mo pueden suponer una amenaza los ni?os no vacunados a los que s¨ª lo est¨¢n?
10. Las farmac¨¦uticas amenazan a los cient¨ªficos.
11. Las madres saben lo que es mejor para sus hijos antes que las farmac¨¦uticas corruptas.
El estudio se?ala la fuerte cohesi¨®n de estos usuarios. "Casi todos los perfiles est¨¢n muy aislados de otras comunidades de usuarios y solo unos pocos interact¨²an fuera de este entorno. Esto da evidencia de que est¨¢n estrechamente conectados y coordinados de alguna forma. Est¨¢n continuamente reafirm¨¢ndose en sus ideas y una vez que caes dentro, eres arropado por todas esas teor¨ªas antivacunas", indica Romero.
Hemos observado que los antivacunas segmentan mucho su mensaje y que uno de sus objetivos son las mujeres en edad f¨¦rtil
El inter¨¦s de los resultados de esta investigaci¨®n, m¨¢s all¨¢ del an¨¢lisis del movimiento antivacunas, es utilizar estas conclusiones para estudiar la manipulaci¨®n en redes sociales de otros grandes temas, como el cambio clim¨¢tico. "Vemos que es un comportamiento similar al de los que niegan el cambio clim¨¢tico. Se basan en la desconfianza a las instituciones, acad¨¦micos y cient¨ªficos. Proponen alternativas basadas en la opini¨®n o en procedimientos infundados que no siguen el m¨¦todo cient¨ªfico", puntualiza Romero.
Los investigadores examinaron tambi¨¦n 715 publicaciones patrocinadas en Facebook y observaron que en la muestra, solo el 20% eran de contrarios a la profilaxis, pero obten¨ªan un mayor alcance con menos inversi¨®n. "Para llegar al mismo n¨²mero de gente, los provacunas invierten de media un 50% m¨¢s de presupuesto. Hemos observado que los antivacunas segmentan mucho su mensaje y que uno de sus objetivos son las mujeres en edad f¨¦rtil, el momento de la vida en el que por lo general de toma la decisi¨®n de inmunizar a un ni?o", se?ala Romero.
Otra de las caracter¨ªsticas fundamentales de las publicaciones de estos sectores es que imitan la apariencia de las organizaciones cient¨ªficas o gubernamentales: "Si no lees el texto parece el post de una instituci¨®n oficial".
"La comunidad de la salud p¨²blica en general puede ver en este estudio el impacto de las plataformas digitales y el siguiente paso podr¨ªa ser elaborar una serie de mensajes clave sencillos de comunicar que desmonten los argumentos falsos", a?ade el experto. Romero apunta que el humor puede ser una posible herramienta. "A veces, los argumentos y teor¨ªas conspiranoicas son tan peregrinas que incluso se les podr¨ªa dar la vuelta y mostrarlas con humor. Este movimiento tambi¨¦n usa im¨¢genes impactantes o incluso memes y tambi¨¦n se podr¨ªa determinar si valen para desmontar sus mensajes".
Gepostet von All For Them am Mittwoch, 11. Oktober 2017
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