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Cuando un c¨¢ncer prematuro y devastador acab¨® con la vida de David Delf¨ªn hace casi tres a?os, la moda espa?ola se qued¨® hu¨¦rfana. Hu¨¦rfana de un creador fundamental que era mucho m¨¢s que un hacedor de ropa. Diego David Dom¨ªnguez Gonz¨¢lez (M¨¢laga, 1970) era un artista completo y complejo, que dej¨® un legado mucho m¨¢s all¨¢ de sus prendas, en las que adem¨¢s supo mezclar el arte, la abstracci¨®n, su universo personal y la tendencia. Unas prendas que ahora viven su primera gran retrospectiva.

La exposici¨®n hom¨®nima sobre el modisto malague?o, que se inaugura el jueves y podr¨¢ visitarse de forma gratuita hasta el 10 de mayo en la sala Canal de Isabel II de Madrid, tiene, c¨®mo no, "un transfondo de homenaje", como explica su comisario, Ra¨²l Marina. "Por su gusto por la vanguardia, su transgresi¨®n y originalidad, por su valor".?Pero no se hace, remacha, con motivo del fallecimiento de Delf¨ªn.?

Tres exposiciones sobre moda han precedido a esta y han tenido un gran ¨¦xito en la capital. Tras muestras sobre figuras m¨¢s cl¨¢sicas, pero que fueron rompedoras y reconocidas en su momento, como Jes¨²s del Pozo?(comisariada por Esperanza Garc¨ªa Claver) o Manuel Pertegaz?(de Ra¨²l Marina con Amalia Descalzo), y despu¨¦s de crear Modus, una muestra colectiva sobre la moda espa?ola, junto a Wanda Morales, Marina y el entonces responsable de esta muestra, el consejero Jaime de los Santos, buscaron algo m¨¢s contempor¨¢neo. "Merec¨ªa ser expuesto, darle valor", explica. "Fue un soplo de aire fresco para la pasarela. Con David, que ven¨ªa del mundo del arte, lleg¨® una tanda de dise?adores que vino a romper", relata Marina.?

La exposici¨®n llega este a?o porque "2020 es una cifra redonda. David habr¨ªa cumplido 50 a?os y celebrar¨ªa 20 de su primera colecci¨®n", explica el comisario. En ella se repasa su trayectoria a trav¨¦s de 60 de sus piezas m¨¢s ic¨®nicas, expuestas de forma cronol¨®gica. Creaciones frescas, absolutamente contempor¨¢neas y muy reconocibles, como sus vestidos de vendas, sus bordados de hormigas, sus corazones de punto de cruz o sus chaquetas militares.?"Sus referentes van m¨¢s all¨¢ de lo est¨¦tico porque ¨¦l se identificaba con los artistas", explica Marina. "Buscar lo inc¨®modo era para ¨¦l un ejercicio art¨ªstico. Escrib¨ªa con la mano izquierda, la que parece in¨²til, para hacerla ¨²til. Su caligraf¨ªa fue su primer ejercicio de simbolismo".

Ra¨²l Marina recuerda con cari?o su primera gran colecci¨®n, Cour de Miracles, que supuso todo un incendio en la pasarela, con sus modelos con las cabezas tapadas. "Desde el planteamiento, con el simbolismo y la decadencia, que ven¨ªa del mundo de las ideas, a la puesta en escena, como de performance... Su manera de dise?ar surg¨ªa de un universo muy especial. Se mov¨ªa entre las ideas y las emociones, part¨ªa de conceptos muy internos. Siempre fue muy valiente y sus colecciones eran una extensi¨®n de su intimidad. El psicoan¨¢lisis, lo perverso, la dualidad, Bu?uel y Viridiana, el surrealismo y Magritte... se ve¨ªan y entend¨ªan en sus dise?os", rememora el experto, que afirma haber tenido acceso a piezas de sus 31 colecciones, adem¨¢s de a bocetos, material de trabajo,?v¨ªdeos, fotograf¨ªas y polaroids, escritura, poes¨ªas... El fot¨®grafo Gorka Postigo, quien fue su pareja y junto al que cofund¨® su marca Davidelfin, ten¨ªa todo guardado.?

"Gorka [Postigo] me abri¨® las puertas de todo. Hab¨ªa una producci¨®n enorme", agradece Marina, que explica que no hay objetos personales para no condicionar la mirada del visitante. Y con tanto material, con tanto que contar, ?puede ser esto el germen de un museo de David Delf¨ªn? Marina tiene claro que s¨ª. Y que esto es solo el primer paso.