Queremos quemarlo todo
Los feminicidios de F¨¢tima e Ingrid son el resultado de una sociedad profundamente violenta, que normaliza la violencia diaria y que crece en un sistema educativo que ignora la perspectiva de g¨¦nero
La emergencia feminicida que cruzamos en el pa¨ªs est¨¢ ligada a un Estado que ignora la emergencia, que no se resuelve con dar con los asesinos de un caso, sino con atender el problema de fondo: 10 mujeres al d¨ªa son asesinadas por el ¨²nico hecho de haber nacido mujeres y una de ellas es una ni?a. El feminicidio infantil en M¨¦xico ha aumentado un 96% en los ¨²ltimos cinco a?os. La crueldad llega a l¨ªmites cada d¨ªa m¨¢s s¨®rdidos. F¨¢tima Cecilia Aldriguett Anton ten¨ªa siete a?os y su cuerpo sin vida fue encontrado, con se?as de abuso, en bolsas de basura. Qu¨¦ brutalmente simb¨®lico es el que haya sido encontrada en bolsas de basura, bolsas de pl¨¢stico hechas para contener los desechos de la vida diaria. El mensaje es claro: los cuerpos sin vida de las ni?as y de las mujeres son desechos. Somos desechables diariamente para el patriarcado. Los feminicidios infantiles lo llevan todo m¨¢s lejos, porque sus cr¨ªmenes suponen la indefensi¨®n de las ni?as y son adem¨¢s de ¡°una vulnerabilidad exponencial¡±, en palabras de Lydiette Carri¨®n.
Con los feminicidios de F¨¢tima e Ingrid Escamilla, los l¨ªmites de la violencia se extreman. Porque no son casos aislados, ambos son resultado de una sociedad profundamente violenta, una que normaliza la violencia en el d¨ªa a d¨ªa, que lucra y consume en redes sociales y medios de comunicaci¨®n las im¨¢genes de las v¨ªctimas, que crece en un sistema educativo que ignora la perspectiva de g¨¦nero, una sociedad que normaliza las bromas mis¨®ginas, que cosifica a las mujeres y que tiene por presidente a un hombre que no ha hecho sino normalizar esa violencia y m¨¢s a¨²n: ignorar p¨²blicamente la emergencia feminicida. Ignorar es una alta forma de la violencia. Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador adem¨¢s condena las marchas y las pintas, pide que se hagan manifestaciones pac¨ªficas y, por si fuera poco, se proclama feminista (que alguien le diga que no es ni puede ser feminista). Condena las manifestaciones y no los feminicidios, no presenta pol¨ªticas ni presupuesto y eso no lo hace aliado, lo hace c¨®mplice. Lo hace parte del engranaje que incrementa los feminicidios cada vez m¨¢s brutales. Claro que queremos quemarlo todo.
Una periodista le pregunt¨® a AMLO en la conferencia matutina por el plan de su Gobierno para atender los feminicidios, a lo que respondi¨®: ¡°Estamos atendiendo las causas y nosotros pensamos que en la medida en que tengamos una sociedad m¨¢s justa, m¨¢s igualitaria, fraterna con valores en donde el individualismo no sea lo que prevalezca sino el amor al pr¨®jimo, el que haya mucho cari?o, que no haya odios, as¨ª vamos a ir enfrentando todos los desaf¨ªos, todos los retos.¡± As¨ª que adem¨¢s de la impunidad del Estado, este es un presidente esquivo y que, de paso, nos moraliza. Predica. Partidiza. AMLO no tiene un posicionamiento y tampoco propone pol¨ªticas p¨²blicas ni un presupuesto, tan urgente ahora. Todo lo contrario. Su Gobierno va en contrasentido. Su muy fallido dec¨¢logo, como un saludo escurridizo, ha sido rebatido frontal e inteligentemente con propuestas concretas por las estudiantes de la Ibero. Y Laura Garc¨ªa, feminista y directora de Fondo Semillas resume bien c¨®mo el Gobierno de AMLO va en contrasentido: ¡°1. Se recort¨® el presupuesto para refugios a mujeres v¨ªctimas de la violencia. 2. Estancias infantiles est¨¢n desapareciendo por falta de apoyo. 3. Se refuerza la militarizaci¨®n en el pa¨ªs. 4. El fiscal general propone eliminar el feminicidio como tipo penal. 5. Se reduce para 2020 en 27% el presupuesto para atender la salud sexual y reproductiva. 6. Se recorta el presupuesto para la CONAVIM. 7. Disminuye el presupuesto para el INMUJERES. 8. AMLO propone consulta para aborto y dice no pronunciarse para evitar ¡°polarizar¡±. 9. No existe un sistema confiable para contabilizar feminicidios. 10. No existen pol¨ªticas para frenar los asesinatos a defensoras.¡± Esta es la postura del gobierno con acciones concretas. Claro que queremos quemarlo todo.
La desaparici¨®n de F¨¢tima fue denunciada el pasado 11 de febrero pero la Fiscal¨ªa inici¨® la investigaci¨®n un d¨ªa despu¨¦s. Ofrecieron dos millones de pesos (unos 106.000 d¨®lares) a quien diera informaci¨®n sobre el caso, dieron con los asesinos, pero, insistimos, ?qu¨¦ presupuesto tiene el Estado ante la emergencia nacional?, ?qu¨¦ acciones va a tomar? AMLO no es el ¨²nico en declarar, otros funcionarios p¨²blicos son parte del mismo engranaje que ignora la emergencia feminicida y que en contrasentido, revictimizan a la familia, como es el caso de Ernestina Godoy, procuradora General de Justicia de Ciudad de M¨¦xico, quien dijo que la mam¨¢ de F¨¢tima tiene problemas mentales. El DIF circul¨® un comunicado revictimizando tambi¨¦n a la familia, especialmente a la mam¨¢ de F¨¢tima. Lo que evidencia, adem¨¢s, el aspecto patriarcal del Estado y, adem¨¢s constata lo obvio: que ser biol¨®gicamente mujer no significa no ser patriarcal. Es un sistema. Los senadores de Morena dijeron en conferencia de prensa: ¡°En el tema de F¨¢tima es el descuido, la responsabilidad tambi¨¦n de los padres¡±.
Todo esto se parece tanto a la reacci¨®n del Estado ante la multiplicaci¨®n de feminicidios en Ciudad Ju¨¢rez en el sexenio de Zedillo. Por ejemplo, como cuenta Jules Falquet sobre las declaraciones de el Gobernador de Chihuahua: ¡°Francisco Barrio (1992-1994) afirma que ¡®las v¨ªctimas sal¨ªan a bailar con muchos hombres¡¯. Insin¨²a incluso a prop¨®sito de una ni?a de diez a?os asesinada, que su dentadura con signos de caries, denotaba la ¡®desintegraci¨®n y la desatenci¨®n familiar¡¯ y sostiene que las cifras de asesinatos de mujeres y chicas j¨®venes son ¡®normales¡¯.¡± Los feminicidios como las reacciones de los funcionarios tampoco son casos aislados: ¡°No es solo un problema individual de cada mujer asesinada y de su familia, sino que afecta a toda la sociedad. Y para prevenirlo se requiere del concurso de todas las instituciones y la aplicaci¨®n seria de la ley.¡±, como dijo recientemente Marcela Lagarde, brillante pensadora, quien adapt¨® el t¨¦rmino feminicidio al contexto mexicano. Pero las instituciones, los funcionarios y el Estado no responden. Claro que queremos quemarlo todo.
Abusaron de una ni?a de siete a?os y la tiraron en bolsas de basura en la calle. Este es un mensaje violento que promueve la violencia machista. El feminicidio de Ingrid Escamilla y la brutalidad con la que su asesino la mat¨® son mensajes en contra de las todas las mujeres porque detr¨¢s de ellos "hay pedagog¨ªa: sirve para que las dem¨¢s nos enteremos, nos aterroricemos y cojamos miedo. Que no seamos due?as ni siquiera del espacio privado (Lagarde)". Claro que queremos quemarlo todo.
Los griegos y los troyanos se masacraron unos a otros por una mujer, pero a ninguno de ellos ¨Ctal vez salvo a Paris¨C les importaba Elena de Troya. Tal vez ella era desechable en plena guerra, pues si todos coincid¨ªan en algo es que deseaban que no hubiera nacido. Incre¨ªble que M¨¦xico sea el ¨²nico pa¨ªs en el que hay un monumento a la madre, una Elena de Troya de piedra, y al mismo tiempo sea un pa¨ªs donde la mujer ¨Csalvo a otras mujeres feministas¨C no importa nada. Porque el cuerpo de una ni?a se desecha en bolsas de basura. Porque es resultado de una estructura social de violencias en contra de las mujeres. Porque quedan impunes los feminicidios. Porque el de F¨¢tima, el de Ingrid, no son hechos aislados. Hasta que entendamos como sociedad que esta es una emergencia nacional, que la violencia ocurre a varios niveles y que alguien le diga a AMLO que los feminicidios son una emergencia nacional y que esta es la prioridad de su Gobierno. Claro que queremos quemarlo todo. Hasta que cambie.
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