Jaime Beriestain: ¡°Me gustar¨ªa dise?ar la Moncloa. No tiene sabor, no tiene alma, no tiene calidez¡±
El interiorista chileno ha tenido que echar el cierre a su m¨ªtica tienda-caf¨¦ de Barcelona: la cuarentena ha rematado un proyecto afectado ya por el proc¨¦s en Catalu?a. Ahora, se enfoca en los muchos encargos internacionales que llegan a su estudio, y en ser feliz
El 20 de abril, el interiorista Jaime Beriestain (Santiago de Chile, 1969) anunciaba a trav¨¦s de Instagram el cierre inminente de su caf¨¦ y concept store en Carrer de Pau Claris de Barcelona. En la red social se sinceraba sobre la profunda tristeza que implicaba el cese de este punto de encuentro emblem¨¢tico de la capital catalana, tras siete a?os de esfuerzos por mantenerlo a flote. "Soy de esas personas que cuando una receta no va bien, la repite y la repite hasta que sale. De esa misma manera, he procurado llevar este negocio durante todos estos a?os de la mejor manera posible. He intentado levantarlo, cambiarlo y animarlo trayendo cosas bonitas a la tienda, nuevas recetas, preparando cursos de cocina, talleres¡ Una diversidad de cosas para conseguir que este negocio funcionase y poder tirar hacia adelante".
Grandes esfuerzos que no terminaron de cuajar: tras vivir su momento m¨¢s dif¨ªcil en 2017 con la ca¨ªda del 40% de las ventas, el cierre definitivo fue inevitable. Pero este interiorista chileno afincado en Barcelona desde el comienzo del nuevo milenio, hace gala de un firme optimismo y no se deja "vencer f¨¢cilmente por las adversidades". La vida contin¨²a, al igual que los diversos proyectos que asume cada a?o al frente de Jaime Beriestain Studio desde 2002.
A su extenso portafolio de residencias particulares, restaurantes y hoteles repartidos por el mundo (Hotel The One en Lisboa, Philosophia Book Caf¨¦ de Barcelona o el nuevo rostro de Torre Glorias, antigua torre Agbar, entre otros) se suma ahora el interiorismo del segundo hotel que la cadena Radisson Blu abre en Marruecos. Situado en Casablanca, en el distinguido barrio del Boulevard Mohamed V que custodia edificios art d¨¦co y la antigua Medina, este monumental edificio de 120 habitaciones nace con la premisa del integrar el lado m¨¢s contempor¨¢neo del pa¨ªs y volcarse a su vez en la creatividad local y en la tradici¨®n de su artesan¨ªa.
Para el dise?o de su interior, Beriestain ide¨® una paleta neutra de grises que diera "una apacible sensaci¨®n de retiro". Sobre ella, se asentar¨ªan los colores caleidosc¨®picos de la obra de Mohamed Melehi y la pincelada de talentos emergentes en el arte marroqu¨ª. Un hotel a modo de galer¨ªa de arte a con jarrones-escultura de la dise?adora francesa Corinne Bensimon producidos por artesanos locales, y la luz baidan¨ª como protagonista constante del proyecto.
La ciudad de Casablanca se manifiesta en multitud de elementos formales por todo el edificio. Las celos¨ªas irregulares en lat¨®n tubular que act¨²an de muros de separaci¨®n, los biombos de espejo envejecido con apliques de alabastro o el uso de Tadelakt, una especie de la cal, en el revestimiento de las paredes son algunos ejemplos. No faltan detalles puramente contempor¨¢neos; es el caso del m¨¢rmol Calacatta que compone los pilares o los paneles retroiluminados de Honey Onyx, que ejercen de mostradores en la recepci¨®n del hotel.
Su selecta lista de mobiliario en habitaciones y zonas comunes se nutre de iconos contempor¨¢neos, como el sill¨®n Caratos de B&B Italia del lobby, el sof¨¢ biplaza Da Vinci de Torre 1961 y el taburete Aleta de la firma Viccarbe para la zona del bar. El resultado es un espacio que fusiona el dise?o actual con la tradici¨®n y que Federico J. Gonz¨¢lez Tejera, CEO y presidente de Radisson Hotel Group, afirma que refleja la esencia del propio grupo hotelero: "Para nosotros la hospitalidad es lo primero, pero dentro de nuestro ADN tambi¨¦n est¨¢ el dise?o. Un sello que ha marcado a nuestra compa?¨ªa desde que inauguramos, en 1960, el primer hotel de dise?o de mundo en Copehnague. El buen interiorismo nos diferencia".
Jaime Beriestain Studio firma, adem¨¢s, algunas de las piezas clave del mobiliario, como las bancadas y las mesas de m¨¢rmol Marquina del restaurante. El dibujo de las alfombras, producidas por Cotlin, que descansan en las estancias privadas tambi¨¦n llevan su sello. Para las paredes, Beriestain se decant¨® por el modelo Vinyl Stingray Grey Gull de Phillip Jeffries, la firma de papeles pintados de lujo que sustenta el dise?ador americano.
P.- Este es el primer proyecto suyo que se conoce tras comunicar el cierre definitivo del Jaime Beriestain Caf¨¦ en Barcelona. ?Es una v¨ªctima de la crisis de la covid-19?
R.- El cierre por el coronavirus fue la gota que colm¨® el vaso. Los problemas comenzaron en octubre de 2017, con la declaraci¨®n de independencia en Catalu?a. Mi negocio se vio terriblemente afectado. Desde el refer¨¦ndum las ventas cayeron un 40%. Los turistas no ven¨ªan y los locales muchas veces no pod¨ªan acceder a la tienda porque las calles estaban cortadas. Cuando parec¨ªa que nos est¨¢bamos recuperando, algo que cost¨® m¨¢s de dos a?os, entonces lleg¨® la pandemia y ha sido insostenible.
"Los problemas comenzaron con la declaraci¨®n de independencia en Catalu?a. Las ventas cayeron un 40%. Los turistas no ven¨ªan y los locales muchas veces no pod¨ªan acceder a la tienda porque las calles estaban cortadas"
P.- ?C¨®mo afectan las medidas de distancia social que deben tomarse tras la pandemia en el concepto de interiorismo de un hotel o un restaurante?
R.- Ya estamos dise?ando proyectos con los nuevos criterios de higiene que se han impuesto, donde el mantenimiento ha de ser f¨¢cil y se debe fomentar el touchless (poder realizar gestiones sin necesidad de tocar superficies). El nuevo cliente poscovid estar¨¢ muy atento a la seguridad que ofrecer¨¢n los nuevos establecimientos y eso debe ser una prioridad.
P.- En 2010 puso en marcha el 'shoowroom' con una selecci¨®n de muebles restaurados de mediados del siglo XX, libros y otros objetos decorativos que dar¨ªan lugar a la 'concept store' que acompa?aba al caf¨¦. ?Qu¨¦ va a hacer con todo eso?
R.- He realizado un traspaso con todo el contenido y ahora est¨¢ en otras manos en forma de outlet de liquidaci¨®n. Pero no lo gestionamos nosotros.
P.- Siempre ha dicho que descubri¨® su pasi¨®n por el interiorismo muy pronto, pero ?sabr¨ªa decirnos cu¨¢l fue el primer recuerdo que tiene asociado a la decoraci¨®n?
"Los muebles de mediados del siglo XX y los objetos de la tienda los he traspasado con el espacio. El nuevo due?o los tiene en liquidaci¨®n"
R.- De peque?o jugaba a transformar el espacio, sin saber a¨²n que me iba a dedicar a ello. Quer¨ªa cambiar mi casa, no me gustaban los lugares donde viv¨ªa. Entonces me imaginaba a trav¨¦s de los libros, especialmente de la literatura del siglo XIX, porque es muy descriptiva, c¨®mo deb¨ªan ser los espacios¡ Me quedaba dormido pensando "?qu¨¦ puedo hacer para cambiar esta habitaci¨®n?, ?y si muevo la mesa o cambio la estanter¨ªa?". Al final, descubres que la decoraci¨®n y el interiorismo es eso, tener la capacidad de imaginarte los espacios tridimensionalmente con solo entrar en ellos y verlos de otra manera. Si puedes hacer eso, ser¨¢s un gran dise?ador.
P.- Tras una d¨¦cada en activo en Santiago de Chile, su ciudad natal, decidi¨® mudarse a Barcelona. ?Por qu¨¦? Vine aqu¨ª en el a?o 2000 para estudiar dise?o en la BAU (Centro Universitario de Dise?o de Barcelona). Cuando termin¨¦ el curso, particip¨¦ en un concurso para el dise?o del hotel Hilton de Barcelona y esa experiencia me motiv¨® para abrir mi propio estudio en 2002 y quedarme en la ciudad. Desde entonces, he firmado multitud de trabajos de interiorismo y hemos crecido como estudio, lo que nos permite estar trabajando en varios proyectos a nivel internacional en ciudades como Roma, Viena o Santiago de Chile. Paralelamente, seguimos trabajando en territorio nacional, sobre todo, en Barcelona y en Madrid.
P.- La versatilidad y el eclecticismo son dos se?as de identidad en su trabajo. A¨²n as¨ª, ?siente predilecci¨®n por alg¨²n periodo decorativo?
R.- Me encanta la arquitectura cl¨¢sica, pero eso no quiere decir que vaya a poner columnas en un espacio dis?ado por m¨ª. Los a?os cuarrenta, a nivel de arquitectura, y los cincuenta en cuanto a dise?o, con el estilo midcentury, aportaron tantas cosas novedosas que gracias a eso estamos hoy aqu¨ª. Por ello, siempre miramos esas ¨¦pocas.
P.- ?Qu¨¦ no veremos jam¨¢s en un dise?o de Jaime Beriestain?
R.- El kitsch. Yo no soy nada as¨ª y creo que, aunque respete mucho ese movimiento, probablemente nunca usar¨ªa ese estilo en mis proyectos. Me encanta la elegancia en cualquier ¨ªndole, ya sea mezclando un estilo sport o siendo muy sofisticado y elegante a la vez. Pero el kitsch nunca va a ser elegante.
P.- Ha dise?ado multitud de hoteles y residencias privadas, pero si tiene que imaginarse un proyecto completamente distinto, ?con qu¨¦ le gustar¨ªa atreverse?
"De peque?o quer¨ªa cambiar mi casa, no me gustaban los lugares donde viv¨ªa. Me quedaba dormido pensando '?y si muevo la mesa?"
R.- La Moncloa. Creo que realmente le hace falta un cambio de estilo contempor¨¢neo. Algo m¨¢s adecuado para el pa¨ªs, para que nos represente a todos. No tiene sabor, no tiene alma, no tiene calidez.
P.- En el proceso creativo, ?c¨®mo canaliza las necesidades y gustos del cliente en su propio estilo?
R.- Mi carrera y mis dise?os tienden siempre a la calidez del espacio como hilo conductor. Son sitios para ser vividos, sitios donde la gente quiere estar. Cada uno es diferente porque los hacemos para un cliente en particular. No hago lo que me gusta a m¨ª sino que ideo para los dem¨¢s. Soy un profesional al que le gusta escuchar a su cliente porque a trav¨¦s de su manera de vivir logro entenderle. Ah¨ª es donde empiezo a poner mi sello en una identidad ajena. El estilo del estudio se basa en la forma de crear y desarrollar los proyectos, pensando en los clientes y no en la satisfacci¨®n de egos.
"Nunca habr¨¢ elementos kitsch en un proyecto m¨ªo. Me encanta la elegancia de cualquier ¨ªndole, ya sea mezclando un estilo?sport con algo m¨¢s sofisticado. Pero el kitsch nunca va a ser elegante"
P.- ?C¨®mo es un cliente ejemplar?
R.- Aquel que es libro abierto y nos aporta multitud de detalles. Lo m¨¢s complejo de un cliente, y de cualquier proyecto en general, es que no sepa comunicar o expresar lo que quiere y siente. Esta incapacidad para la comunicaci¨®n es muy dif¨ªcil, porque al final no somos magos, no tenemos una bola m¨¢gica que nos permita adivinar sus preferencias. A m¨ª me interesa saberlo todo del cliente. C¨®mo vive, cu¨¢les son las cosas que m¨¢s le gustan. Si el proyecto es una casa quiero enterarme de si recibe o no a gente, de si tiene mucha ropa, si la dobla o si cuelga las camisas. Vamos a hacer un trabajo para ¨¦l y tiene que abrirse.
P.- ?De qu¨¦ cree que peca la profesi¨®n hoy en d¨ªa?
R.- De poca originalidad. Todo se parece. Y creo que es porque hay demasiada informaci¨®n. Lo dif¨ªcil en esta profesi¨®n es tener una voz propia y hacer las cosas distintas siendo lo que te gusta.
P.- ?Ha visto mermada su libertad creativa al frente de un gran proyecto, como puede ser un hotel?
R.- Siempre existen restricciones cuando se trabaja para un lugar comercial, sobre todo a nivel de normativas de seguridad o de durabilidad. Esto hace que todo sea m¨¢s complejo, pero no a costa de mi libertad creativa. Simplemente hay que saber adaptarse.
P.- ?En qu¨¦ proyectos se encuentra inmerso ahora mismo?
R.- Actualmente mi estudio est¨¢ dise?ando un hotel de cuatro estrellas en Roma, uno de cinco estrellas en Viena y otro muy interesante en Marbella. Por el lado privado, tenemos una gran casa en Chile para un coleccionista de arte y hemos puesto en marcha un grupo de edificios residenciales en Mosc¨², con un cliente que ha apostado por una manera m¨¢s europea y exquisita de entender los acabados, materiales y colores.
P.- ?De qu¨¦ manera ha influido el entorno del nuevo Radisson Blu en Casablanca en el dise?o de sus interiores?
R.- El hotel se encuentra en un enclave id¨®neo, rodeado de edificios art d¨¦co. Cuando planteamos el proyecto, mi idea central era trasladar ese estilo de los a?os treinta a uno m¨¢s contempor¨¢neo. Para las zonas comunes y las habitaciones, me decant¨¦ por colores claros y un toque en metal dorado, tan caracter¨ªstico de esa ¨¦poca. Tuve muy en cuenta el gran n¨²mero de zonas comunes que contiene el edificio, como un lobby de grandes dimensiones, el spa, la terraza, dos restaurantes, las salas de reuniones¡ Por ello intent¨¦ que fuera lo m¨¢s c¨¢lido y confortable posible. El resultado es un hotel boutique internacional, de estilo sofisticado y atemporal.
P.- Marruecos experimenta una doble cara en cuesti¨®n de alojamiento. Por un lado, los modelos m¨¢s tradicionales como los riads, por otro, los 'country clubs' en las afueras de las grandes urbes. ?D¨®nde ubicar¨ªa el Radisson Blue?
R.- Casablanca es una ciudad enfocada al negocio y no tan tur¨ªstica como su vecina Marrakech. El cliente no quer¨ªa que su hotel fuera como los dem¨¢s en la ciudad, de una clara tem¨¢tica marroqu¨ª y ¨²nicamente para turistas. Buscaban algo muy diferente, un hotel internacional para un p¨²blico marroqu¨ª que visite la ciudad ya sea por ocio o por negocios, a?adiendo un toque local para la clientela internacional. En esta ciudad se echaba de menos un hotel contempor¨¢neo, y por ello quise aportar una visi¨®n m¨¢s europea y sofisticada.
P.- Y, sin embargo, en el proyecto no faltan cer¨¢micas y jarrones de barro de alfareros locales, celos¨ªas artesanales o incluso el uso de la cal en las paredes.
R.- Cada d¨ªa resulta m¨¢s esencial el uso de materiales nobles y naturales. Para m¨ª, la calidez y el envejecimiento l¨®gico del material enriquecen todo el proyecto. El recubrimiento de las paredes se ha hecho con una t¨¦cnica que se llama Tadelakt, una especie de revestimiento obtenido a partir de la cal que se emplea desde hace varios siglos en Marruecos. No solo aporta una est¨¦tica concreta de gran personalidad a los espacios, tambi¨¦n es un elemento duradero y resistente pese a su tacto suave.
P.- Y si a la cal se suma la luminosidad caracter¨ªstica de Casablanca, el interiorismo no abandona cierto sabor local. ?El juego de las luces se ha llevado tambi¨¦n a la decoraci¨®n?
R.- En pa¨ªses como Marruecos, la luz es esencial. He intentado trabajar con la misma metodolog¨ªa con la que ellos tratan la luz, ya sea a trav¨¦s de celos¨ªas o, por ejemplo, de l¨¢mparas en las que proviene de una zona trasera y genera ese efecto de luz y sombra. En este proyecto, luchamos por convencer al cliente sobre la necesidad de un lobby precedido de un gran espacio para la recepci¨®n y el ¨¢rea del bar. No podemos estar m¨¢s satisfechos con el resultado.
La doble altura, tanto en la fachada como en la parte posterior, genera una sensaci¨®n a sus hu¨¦spedes de estar en un espacio totalmente abierto, sin barreras visuales desde la calle. A trav¨¦s de los grandes ventanales que coronan el espacio entra toda esa luz tan caracter¨ªstica de la ciudad de Casablanca.
P.- ?C¨®mo se eligen los artistas y las piezas para un hotel que es a su vez una galer¨ªa?
R.- Por una parte, hemos apostado por Mohamed Melehi, que es una de las grandes figuras del arte marroqu¨ª reconocido internacionalmente, con un estilo que simboliza la uni¨®n de la Bauhaus con el arte Isl¨¢mico. Sus obras se exhiben en las zonas comunes; est¨¢n llenas de color y consiguen cambiar por completo la atm¨®sfera del espacio.
Pero, adem¨¢s, me encanta apostar por el arte emergente que desarrollan los j¨®venes de las ciudades donde trabajo. Para las habitaciones, los propietarios convocaron un concurso dentro de una escuela de arte cercana. Se propuso una tem¨¢tica a los alumnos de ¨²ltimo a?o y ellos desarrollaron su propuesta. Las obras de los artistas ganadores del concurso se colgaron en las paredes de las estancias privadas.
P.- ?Entre sus planes de futuro se encuentra abrir un nuevo espacio propio?
R.- Desde que abr¨ª mi despacho en Barcelona hace ya m¨¢s de 20 a?os hemos estado al frente de m¨²ltiples encargos a nivel nacional e internacional. Mi estudio me necesita hoy m¨¢s que nunca. Adem¨¢s, estos a?os he dejado de lado mi vida personal por ello. Ahora pienso darme el tiempo que necesito para ser feliz.
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