Ni?os con TDAH: riesgos y secuelas que deja el confinamiento por la covid-19

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El peligro de etiquetar a los ni?os: ¡°?No me llames as¨ª, me haces sentir muy peque?o!¡±

D¨¦ficit de atenci¨®n, hiperactividad e impulsividad son las tres caracter¨ªsticas que muchos hogares en Espa?a han sufrido con especial virulencia durante la pandemia, el confinamiento y la posterior vuelta a una normalidad at¨ªpica. Se estima que el Trastorno por D¨¦ficit de Atenci¨®n e Hiperactividad, que este lunes 13 de julio conmemora su D¨ªa Internacional, afecta a un 6,8% de la poblaci¨®n escolar espa?ola. Ni?os y adolescentes que durante meses han visto reducida su interacci¨®n y apoyo en el colegio, sus relaciones sociales, actividad f¨ªsica y, en ocasiones, tambi¨¦n sus terapias y seguimiento para tratar este trastorno del neurodesarrollo. El reciente estudio Salud Mental en la Infancia y la Adolescencia en la era de la covid-19, elaborado por la Plataforma de Asociaciones de Psiquiatr¨ªa y Psicolog¨ªa Cl¨ªnica por la Salud Mental de la Infancia y Adolescencia de Espa?a, alerta de las posibles secuelas emocionales para los m¨¢s peque?os y las particularidades de los ni?os y j¨®venes con TDAH.

Seg¨²n recoge este informe, en uno de los primeros estudios que ha analizado las secuelas del confinamiento entre la poblaci¨®n infantil china con Trastorno por D¨¦ficit de Atenci¨®n e Hiperactividad (muestra de 241 familias) se observ¨® un aumento de estr¨¦s agudo, cambios en el comportamiento y estado de ¨¢nimo de los menores. Los investigadores destacaban c¨®mo la incertidumbre, ansiedad y el propio estr¨¦s de los padres podr¨ªa influir en ellos. ¡°Los ni?os con TDAH no pueden recibir atenci¨®n oportuna y profesional en el hogar. Se podr¨ªa suponer que la mayor¨ªa de los padres de estos ni?os no son expertos en la materia, pero se les impone una responsabilidad educativa, adem¨¢s de manejar todos los problemas emocionales y de comportamiento de los ni?os, 24 horas, siete d¨ªas a la semana. Por otro lado, la preocupaci¨®n de los adultos por la crisis puede exacerbar a¨²n m¨¢s el bienestar psicol¨®gico de los ni?os y empeorar sus problemas de comportamiento¡±, advert¨ªan los autores.

Y esto si nos referimos a las familias de ni?os con TDAH confirmado y padres que recibieron previamente orientaci¨®n psicoeducativa para acompa?ar a sus hijos y teleasistencia de los terapeutas durante los meses de confinamiento. Pero tambi¨¦n existen casos de menores que estaban en fase de evaluaci¨®n antes de la pandemia. Para ellos se ha retrasado un posible tratamiento farmacol¨®gico o psicol¨®gico, y han podido empeorar, sobre todo en la etapa adolescente, cuando se produce un desequilibrio entre el desarrollo de su ¡°cerebro emocional¡± e impulsivo y el cerebro racional, que puede provocar un aumento de conductas desafiantes y disruptivas.

¡°La mayor parte de las familias de menores con TDAH han sufrido frustraci¨®n, impotencia y estr¨¦s, que est¨¢ muy relacionado con la desregulaci¨®n emocional de estos ni?os. En esta ¨¦poca es necesario m¨¢s que nunca el di¨¢logo familiar, sobre todo con los adolescentes. Hay que explicarles claramente qu¨¦ necesitamos o queremos de ellos, porque son inteligentes y en la mayor¨ªa de los casos quieren agradar a sus padres, no buscan el conflicto. Solo necesitan tener claro qu¨¦ se espera de ellos y abrir espacios para que ellos tambi¨¦n puedan expresar c¨®mo se sienten o qu¨¦ les preocupa¡±, apunta la psiquiatra Abigail Huertas, portavoz de la Asociaci¨®n Espa?ola de Psiquiatr¨ªa del Ni?o y Adolescente (AEPNyA), que recomienda ¡°economizar la energ¨ªa mental¡± en casa. ¡°Hay que ponerse en ¡°modo supervivencia¡± en cuanto a los l¨ªmites y normas familiares. En esta ¨¦poca de crisis deber¨ªamos enfadarnos por cosas graves, no por un calcet¨ªn en el suelo. Y al mismo tiempo facilitar la convivencia con rutinas: mantener una buena higiene del sue?o, durmiendo con las persianas levantadas para que se despierten temprano con la luz del sol, menos horas de pantallas y m¨¢s ejercicio f¨ªsico este verano, establecer pautas y tareas claras, espec¨ªficas, como la colaboraci¨®n en el orden y la limpieza de casa, que pueda mantener su atenci¨®n durante cortos per¨ªodos de tiempo¡±.

Escuela online con TDAH

Adem¨¢s de los problemas de comportamiento y convivencia, otra de las dificultades que han encontrado los alumnos con TDAH ha sido el cierre de las escuelas. Si para ellos podr¨ªa ser complicado mantener la atenci¨®n y concentraci¨®n focalizada en su profesor de carne y hueso, atender las clases online ha sido un reto sin precedentes.

¡°Los padres han intentado capear el temporal como han podido, sin recursos y poniendo parches, como dejarles solos con el ordenador o la tablet, confiando en que atender¨ªan las clases, porque al mismo tiempo ten¨ªan que teletrabajar y llevar la casa. En muchos casos no se ha podido dar a los ni?os el apoyo y la adaptaci¨®n metodol¨®gica que ten¨ªan en el colegio, ni hemos podido seguir con las terapias presenciales. Adem¨¢s, la falta de actividad f¨ªsica tambi¨¦n les ha afectado a nivel cognitivo: cuando practican deporte es cuando est¨¢n m¨¢s permeables para aprender. Si no hay actividad f¨ªsica, la atenci¨®n se reduce y m¨¢s cuando se trata de permanecer sentado frente a una c¨¢mara del ordenador¡±, se?ala el doctor Iban Onandia, neuropsic¨®logo experto en TDAH.

En la mayor¨ªa de los casos han perdido cuatro meses de clase, actividades extraescolares y deporte organizado. Pero el largo verano y la incierta vuelta al colegio en oto?o no mejoran las perspectivas acad¨¦micas de estos ni?os. Seg¨²n un estudio de 2017, que analizaba el rendimiento de 766.244 escolares con TDAH en Escocia, estos menores podr¨ªan presentar peores resultados en los ex¨¢menes, dificultades de adaptaci¨®n en la escuela, m¨¢s necesidades educativas especiales y aumento del absentismo y abandono escolar.

La implicaci¨®n de familias, profesionales de la salud y profesores ser¨¢ clave para que su reincorporaci¨®n el pr¨®ximo curso no deje a nadie atr¨¢s. Entre las recomendaciones para preparar la vuelta al colegio se encuentra dividir claramente los tiempos de estudio de los tiempos de ocio, priorizar la calidad de lo aprendido sobre la cantidad de horas en su silla, alternar actividad f¨ªsica (como sentadillas, pedaleras o ejercicios de mindfulness) y actividad cognitiva, y leer en voz alta el temario o buscar la explicaci¨®n en videotutoriales que sustituyan la ardua lectura de la asignatura en papel.

¡°Una de nuestras preocupaciones es que cuando se reabran los colegios, se intente dar en un mes el contenido que no se ha impartido en cuatro meses. Esto va a ser un problema, no solo para los ni?os con TDAH, sino cualquiera con dificultad de aprendizaje. Sabemos que hay un momento, en el primer tercio de la Secundaria, en el que muchos ni?os con TDAH ¡°desenchufan¡± de la escuela. A largo plazo, y esto es lo triste, lo que veremos ser¨¢n padres que se ¡°profesionalizan¡±: he conocido muchos casos de familias, sobre todo madres que piden excedencias, que casi se sacan de nuevo Secundaria para explicar el temario en casa. Padres que estudian los temarios de sus hijos, preparan esquemas, se graban v¨ªdeos para hacerlo m¨¢s atractivo e interesante. Y el problema es que eso deber¨ªa ser una respuesta metodol¨®gica y no familiar. Las escuelas sin m¨¢s dotaci¨®n y recursos, sin suficiente profesorado, sin formaci¨®n espec¨ªfica y sin inter¨¦s por asegurar el aprendizaje de estos menores presentan un escenario en el que quiz¨¢ estemos perdiendo una gran oportunidad de mejorar el sistema educativo¡±, concluye el doctor Onandia.