Rosado es m¨¢s que un color

EL VINO QUE MEJOR luce en Instagram ha dejado de ser cosa menor. El renovado inter¨¦s por la categor¨ªa no solo ha llevado a subir el list¨®n para buscar el ¡°gran rosado¡±, sino que ha tra¨ªdo buenas dosis de diversidad, originalidad y diversi¨®n.

El rosado m¨¢s viejo que he probado es un Sexto A?o de L¨®pez de Heredia de la d¨¦cada de los setenta. Tras la decadente nariz con aromas a champi?¨®n y tierra h¨²meda que parec¨ªan anunciar una muerte casi segura, el paladar superaba airoso la prueba a base de nervio y viveza. ¡°Hubo una ¨¦poca en la que nadie apreciaba los vinos viejos. Los rosados de 10 y 20 a?os me los he bebido con mis amigos¡±, reconoc¨ªa con tristeza en una cena Mar¨ªa Jos¨¦ L¨®pez de Heredia, cuarta generaci¨®n de la bodega riojana que m¨¢s tercamente ha mantenido las formas de hacer de anta?o y que cumplir¨¢ 150 a?os en 2027.

Que un rosado fuera un vino fino que adem¨¢s pudiera envejecer era una idea inconcebible hace solo una d¨¦cada. El perfil m¨¢s extendido era el de un producto tecnol¨®gico que deb¨ªa oler ostentosamente a fruta roja y ser lo suficientemente ligero para poder beberse generosamente en los meses de calor. Un vino joven pensado para tomar en el a?o, porque a medida que se acercaba la siguiente cosecha empezaban a desvanecerse sus atributos frutales y deca¨ªa el color.

Su versi¨®n rural eran los claretes que se elaboran mezclando uvas blancas y tintas y en los que la maceraci¨®n con las pieles pod¨ªa tener mayor protagonismo. En su origen, eran el mero reflejo de la convivencia de variedades de diferente tonalidad en la vi?a. Ocurr¨ªa as¨ª en Cigales; en el entorno de Aranda, en la Ribera del Duero, antes de que la tempranillo colonizara totalmente el vi?edo; o en el valle del Najerilla, en Rioja. No es casualidad que el clarete m¨¢s famoso de esta ¨²ltima regi¨®n sea el de Cordov¨ªn, el ¨²nico municipio de la denominaci¨®n en el que se cultivan casi igual n¨²mero de hect¨¢reas de variedades blancas que tintas.

El renacimiento actual del rosado tiene mucho que ver con su ascenso internacional. Aunque la curva de crecimiento estaba empezando a frenarse antes de la llegada de la covid-19, es una de las grandes historias de ¨¦xito reciente del vino junto a la de los espumosos. Ha tenido dos grandes aliados. El primero, el acceso al mercado del lujo liderado por la nueva hornada de vinos de Provenza, la regi¨®n rosa por excelencia con inquilinos tan ilustres como Brad Pitt y Angelina Jolie. El segundo, el efecto amplificador de Instagram, la red social perfecta para reproducir sus sofisticadas presentaciones y asociarlas a un estilo de vida feliz y despreocupado.

En Espa?a, donde el consumo de rosado es bastante menor que en Francia y otros pa¨ªses, la onda expansiva se manifest¨® primero por la v¨ªa del color y la obsesi¨®n por reproducir los tonos p¨¢lidos de la regi¨®n francesa, ya fuera por imposici¨®n de importadores y mercados o por miedo a quedarse fuera de la tendencia. Pero tras unos a?os de vacilaciones y duplicidades (muchos productores optaron por ampliar la gama y sumar a su rosado de siempre otro con el nuevo color pol¨ªticamente correcto), los ejemplos m¨¢s interesantes han venido desde la b¨²squeda de la calidad, la revisi¨®n de los estilos tradicionales, la identificaci¨®n de terru?os y variedades con mejores aptitudes para expresarse en versi¨®n rosa y, en muchos casos, envejecimientos similares a los que se practican con blancos y tintos.

Que firmas o figuras de peso como Marqu¨¦s de Murrieta, Bertrand Sourdais, Marqu¨¦s de Riscal, Cellers Scala Dei, Muga o Ram¨®n Bilbao hayan decidido tener rosados de primera l¨ªnea, con precios de entre 20 y 50 euros, a menudo innovando en t¨¦cnicas y variedades y buscando capacidad de envejecimiento, habla de la ambici¨®n de la categor¨ªa. Que j¨®venes productores exploren caminos menos trillados ¡ª?incluso arriesgados¡ª es un pasaporte seguro a la diversidad. Hoy, en Espa?a, casi cualquier tipo de elaboraci¨®n o estilo tiene una expresi¨®n rosa: espumosos, crianza en madera, hormig¨®n, tinaja y hasta bajo velo de flor.

Durante este tiempo, L¨®pez de Heredia ha seguido fiel a su filosof¨ªa. Pero en el actual contexto el Vi?a Tondonia Gran Reserva, ¨²nico rosado que se elabora con esta categor¨ªa de envejecimiento y que solo sale al mercado en las mejores a?adas, es pura modernidad y vino de culto.

Arbay¨²n Rosado de Guarda 2019. Navarra. Baja Monta?a Vi?edos y Bodegas. Garnacha. 13,5%. Precio: 9 euros.

El rosado navarro de garnacha de siempre llevado a las alturas por el gran especialista Fernando Chivite, fallecido recientemente. Tras firmar el popular Gran Feudo y el ambicioso Colecci¨®n 125, en Arbay¨²n quiso demostrar la capacidad de guarda trabajando con garnachas viejas de monta?a capaces de aportar estructura y delicadeza a la vez. El resultado es un vino fragante, jugoso, equilibrado y de fant¨¢stica textura a un precio que es un aut¨¦ntico regalo. Para explorar la evoluci¨®n en botella es recomendable el formato m¨¢gnum.

Les Prunes Blanc de Mand¨® 2019. Valencia. Les Filles d¡¯Am¨¤lia (Celler del Roure). Mand¨®. 12%. Precio: 11 euros.

No hay nada convencional en este vino elaborado con mand¨®, una variedad tinta de vibrante acidez que se est¨¢ recuperando con entusiasmo en Valencia y otras zonas de Espa?a. Se elabora como un blanco (de ah¨ª el nombre) con el primer mosto flor que sale del prensado y se cr¨ªa en la antigua bodega de tinajas de Celler del Roure. Encandila por la frescura de la fruta roja ¨¢cida, los toques de hierbas silvestres y la sapidez de su paladar levemente salino. Una de las puertas que se abren para dibujar las nuevas fronteras de los rosados espa?oles.

P¨ªcaro del ?guila Clarete Ecol¨®gico 2018. Ribera del Duero. Dominio del ?guila. Tempranillo, albillo y otras. 14%. Precio: 23 euros.

Uno de los productores m¨¢s destacados de la nueva generaci¨®n del vino espa?ol, Jorge Monz¨®n, luch¨® para poner la palabra ¡°clarete¡± en la etiqueta de este rosado y dignificar as¨ª este estilo tan nuestro cuyo rasgo distintivo es la mezcla de uvas blancas y tintas. Trabajado en madera, el vino tiene la estructura de un tinto, la frescura de un blanco y un muy buen desarrollo en botella (la a?ada 2016 que a¨²n se puede encontrar en algunos lugares es la mejor prueba de ello). Una fant¨¢stica respuesta a las modas y tendencias internacionales.