Un arma ecol¨®gica¡­ por los pelos

Si como sostiene Gilles Lipovetsky en su ¨²ltimo ensayo, Gustar y emocionar, el futuro est¨¢ ¡°en la hibridaci¨®n de lo ecol¨®gico y la seducci¨®n¡±, es probable que la pujante econom¨ªa circular, partidaria de disminuir el despilfarro en favor de una ¡°feliz sobriedad¡±, tenga algo que decir. Hoy, ante los desaf¨ªos planetarios, se imponen las exigencias de reducir impactos negativos sobre el medio ambiente y de inventar soluciones y acciones pragm¨¢ticas que atiendan necesidades reales.

En esa l¨ªnea, la asociaci¨®n francesa Coiffeurs Justes (Peluqueros Justos, que suma 3.700 peluquer¨ªas abonadas y 6.000 profesionales), por medio de su fundador, el peluquero Thierry Gras, instalado en Saint-Zacharie (en la Provenza), ha puesto en marcha un proyecto basado en la recolecci¨®n del pelo sobrante de las peluquer¨ªas. La idea es reutilizarlo como abono (la mezcla de pelo y compost da un estupendo fertilizante), como repulsivo natural para proteger vi?as e incluso como descontaminante de hidrocarburos en los oc¨¦anos.

Hace tiempo que Gras se desmarc¨® de la pasi¨®n consumista y se dej¨® tentar por iniciativas alternativas convencido de que la creatividad emprendedora y las redes solidarias pueden ayudar a mejorar el mundo. En 2015 cre¨® la marca Hairdresser Fair, iniciativa preocupada, entre otras cosas, por igualar los precios de los cortes de pelo en mujeres y hombres. Coiffeurs Justes gestiona toneladas de pelo, seleccionado y preparado para ser transformado. Gras se explica: ¡°El pelo representa en torno al 50% de la basura de una peluquer¨ªa. El objetivo es que no se tire ni un solo pelo m¨¢s en Francia, en Europa o en el planeta. Es una l¨¢stima desprenderse de un material con tantas propiedades. Cuando empec¨¦, las grandes marcas me dijeron: ¡®Ning¨²n peluquero se esforzar¨¢ por enviarte los sacos¡¯, pero ahora lo hacen miles¡±.

Cada bolsa contiene 2,5 kilogramos de pelo. Una vez recibido, se entrega a un Centro de Inserci¨®n por la Actividad Econ¨®mica, donde se modifica a gran escala para luego poder utilizarlo, detalla Gras, ¡°en limpieza de cuencas de retenci¨®n de agua o en la creaci¨®n de barreras flotantes que en el mar pueden absorber petr¨®leo en caso de un vertido accidental¡±. Se refiere al desastre ecol¨®gico acontecido en las costas de isla Mauricio el pasado 25 de julio, causado por el derrame de 1.000 toneladas de fuel. Aconsejados por ¨¦l, contra aquella marea negra, algunos habitantes de Mauricio se lanzaron a improvisar barreras de contenci¨®n absorbentes hechas con pelo.

¡°Una de las cualidades del cabello es que es lipol¨ªfico¡±, afirma, ¡°la materia grasa se le adhiere, no penetra en su interior, por eso se puede lavar y reutilizar. Un kilo de pelo absorbe ocho litros de hidrocarburos. Es una barbaridad¡±. Algo que saben bien en la vecina Cavalaire-sur-Mer (pueblo costero de la Costa Azul), cuyo puerto se limpia con estos cilindros de cabello. Seg¨²n su alcalde, Philippe Leonelli, ¡°se quedan flotando en el mar, absorben la materia contaminante y a su vez protegen nuestro medio ambiente y nuestra biodiversidad marina¡±.