Cinco maneras de expresar amor (y solo una te ayudar¨¢)
Las dificultades surgen cuando no se cumplen las expectativas cruzadas. El problema no radica en la falta de sentimientos, sino en las distintas formas de mostrarlos
Muchas parejas se rompen porque no se sienten queridas. Uno espera algo que nunca ocurre y se siente frustrado porque la otra persona no valora los esfuerzos que ha hecho por ella. Las dificultades surgen porque no se cumplen las expectativas cruzadas. En el fondo, el problema no radica en la falta de amor, sino en las distintas maneras de expresarlo. Imagine que un espa?ol y un japon¨¦s intentan conversar sobre literatura en sus lenguas maternas. Habr¨ªa un desencuentro en la conversaci¨®n. Pues en el amor sucede algo parecido.
El estadounidense Gary Chapman, considerado uno de los grandes gur¨²s en el mundo de las relaciones afectivas, sostiene que cada persona tiene un dep¨®sito de amor. Debe sentir que este est¨¢ lleno para percibir que su relaci¨®n va bien y sentirse querido. El problema es que dicho dep¨®sito solo se llena en el lenguaje que esa persona entiende. Por eso necesitamos conocer de qu¨¦ manera se puede expresar el amor para afianzar nuestra pareja o, incluso, para salvarla. Chapman es autor del superventas Los cinco lenguajes del amor. La primera versi¨®n se public¨® en 1992 y, hasta la fecha, ha vendido m¨¢s de 11 millones de copias solo en ingl¨¦s. Adem¨¢s, se ha traducido a 49 idiomas y est¨¢ considerado uno de los libros m¨¢s importantes en la materia.
Decirle a nuestra pareja que la quieres es solo uno de los lenguajes amorosos. Existen cuatro m¨¢s. Seg¨²n Chapman, solemos tener un lenguaje primario o preferido relacionado con nuestra infancia. De lo que hayamos visto cuando ¨¦ramos peque?os o de nuestra manera de ser. Este lenguaje primario no tiene por qu¨¦ ser el mismo del de nuestra pareja. Ese es el motivo por el que nos sentimos perdidos o incomprendidos. Como vimos al principio, uno habla castellano y, el otro, japon¨¦s. Por eso, sugiere conocer cu¨¢les son los cinco idiomas, analizar nuestras preferencias y, lo m¨¢s importante, saber las de nuestra pareja. En la medida en que conversemos sobre nuestras necesidades y seamos capaces de adaptarnos a lo que la otra persona necesita (y el otro haga lo propio), se reducir¨¢n los conflictos o, al menos, ser¨¢ m¨¢s f¨¢cil la comunicaci¨®n. Para conseguirlo disponemos, incluso, de una encuesta (en ingl¨¦s). De esa manera podemos conocernos un poco m¨¢s.
A continuaci¨®n, veremos cu¨¢les son los cinco lenguajes que propone Chapman para expresar amor:
Palabras de afirmaci¨®n. En este apartado est¨¢ el poder de la palabra expresada en cartas, conversaciones, mensajes¡ No es decir un simple te quiero, sino todo aquello que signifique valoraci¨®n positiva del otro, orgullo por lo que hace la pareja o la felicidad que sentimos porque est¨¦ a nuestro lado.
Dar y recibir regalos. No tienen por qu¨¦ ser objetos materiales de gran valor. Basta con detalles capaces de sorprender a la otra persona, incluso experiencias inolvidables, como un p¨ªcnic bajo las estrellas o un paseo por un lugar bonito. En este lenguaje lo que se valora es que el otro se haya acordado de nosotros y lo exprese con un detalle, una experiencia o que haya dedicado tiempo a prepararlo.
Actos de servicio. Las personas que utilicen este lenguaje valoran que el otro haga alguna acci¨®n por ¨¦l (o ella). Basta con una simple tarea dom¨¦stica (limpiar la casa o el coche), un favor (enviar una carta) o hacer tareas tediosas. Si el acto en cuesti¨®n resulta muy arduo, la persona que se mueve en este lenguaje valorar¨¢ a¨²n m¨¢s el gesto.
Tiempo de calidad. En este caso, lo que m¨¢s se aprecia es el tiempo dedicado sin interrupciones de terceros. Una experiencia que genera espacio para conversar o para profundizar en el v¨ªnculo. Se aprecia especialmente la atenci¨®n completa a la pareja.
Contacto f¨ªsico. Una caricia, un abrazo o hacer manitas. Son gestos que hace que la otra persona se sienta querida. No significa necesariamente un contacto sexual, m¨¢s bien se trata de una forma delicada de expresar emociones a trav¨¦s del cuerpo.
Cada lenguaje tiene una mayor o menor importancia dependiendo de cada persona. Si estamos con alguien que tiene una preferencia similar a la nuestra, la relaci¨®n resultar¨¢ m¨¢s f¨¢cil. El problema surge cuando lo que a nosotros nos importa figura en el cuarto o quinto puesto del otro. En ese caso, habr¨¢ que dedicar mucho trabajo para conocernos mutuamente y saber adaptarnos a nuestra pareja.
Pilar Jeric¨® es emprendedora, escritora, conferenciante, doctora en Organizaci¨®n de Empresas y divulgadora de investigaciones sobre el comportamiento humano. www.pilarjerico.com
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