En la sierra con Neil Armstrong
La actriz y directora teatral Mag¨¹i Mira suele regresar a los paisajes de su infancia, la alicantina sierra de Aitana
La tenemos en Madrid, donde acaba de estrenar, como directora, La velocidad del oto?o en el Teatro Bellas Artes, pero a Mag¨¹i Mira donde hay que buscarla es en los paisajes de su infancia: los de la sierra alicantina de Aitana, un lugar de fuerte magnetismo para ella.
?Guarda buenos recuerdos de la sierra? Excelentes: all¨ª arriba te sientes como un p¨¢jaro, viendo el mar. Se te llena de mariposas el est¨®mago con esos paisajes. Yo he trepado por las pe?as en alpargatas, me he perdido por las noches volviendo a mi casa por caminos llenos de pinos maravillosos, he merendado pan y chocolate en Les Penyes Roges, donde nos llevaba mi madre a los ni?os de la familia.
Intuyo que es una experta en la fauna y la flora locales. Es que he visto de todo: pinos pi?oneros, setas esclatasangs, mucha lagartija, ara?as¡ Y culebras, sobre todo en las balsas de agua, donde nos ba?¨¢bamos.
Parecen las aventuras de Los Cinco en versi¨®n peninsular. Para aventuras, la de llegar al ¡°contaor¡±, un peque?o desfiladero entre dos pe?as por el que pasaban los reba?os de cabras de una en una. Lleva ese nombre porque ah¨ª el pastor aprovechaba para contarlas. Tambi¨¦n recuerdo encerrarme con mi abuela en la bodega de su mas¨ªa para resguardarnos de las tormentas.
Cu¨¦ntenos el momento m¨¢s especial que vivi¨® all¨ª. Pues el d¨ªa que el hombre pis¨® la Luna, en 1969: yo estaba en la monta?a, en medio de la sierra, a la que a veces sub¨ªamos en burro. Se ve¨ªan estupendamente todas las estrellas y, por supuesto, la Luna.
Y hoy, ?c¨®mo se siente al volver?
Ahora voy a ver a la familia y comemos en la Venta de Benimantell, uno de los muchos pueblos que hay en el valle. All¨ª hacen unas cocas fabulosas de verduras, y tambi¨¦n de molletes, que son migas de aceite. Solemos pedir tambi¨¦n la olleta de fresols y naps, es decir, de alubias y nabos.
Todo apto para vegetarianos¡ No tanto: en realidad, aunque el nombre no lo indique, la olleta tambi¨¦n lleva carne de cerdo. Y en la venta cocinan un cordero maravilloso.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.