Dundee, epicentro del dise?o escoc¨¦s

A esta ciudad de la costa oriental escocesa, a una hora y media en tren de Edimburgo, se la conoce como Sunny Dundee porque las estad¨ªsticas la a¨²pan al primer puesto de los lugares con m¨¢s d¨ªas de sol de Escocia (que, en honor a la verdad, tampoco son muchos). Cuenta la leyenda que fue una vecina de Dundee quien dio con la receta de la mermelada de naranja, y a ello remite otro de sus esl¨®ganes:¡°Jute, jam and journalism¡± (yute, mermelada y periodismo). Las dos J restantes aluden a que fue un importante centro de producci¨®n textil en el siglo XIX y a que acoge la sede de la editorial D.?C. Thomson, que publica varios peri¨®dicos e historietas famosas como The Beano. Elegida ciudad del dise?o por la Unesco en 2014, tambi¨¦n es conocida por sus aportaciones a la ciencia (?les suena la aspirina?) y los videojuegos (Lemmings o Grand Theft Auto), y por una vibrante escena creativa. A su oferta cultural se sum¨® el pasado septiembre el V&A Dundee (1 Riverside Esplanade), una sucursal del Victoria & Albert de Londres que es, adem¨¢s, el primer museo dedicado al dise?o en Escocia y el nuevo reclamo de esta ciudad de casi 150.000 habitantes.

10.00 2.500 paneles de hormig¨®n

Tras coger fuerzas con una porci¨®n del t¨ªpico Dundee cake (una densa tarta de frutas y almendras) en Clark¡¯s Bakery (3 Annfield St.) (1), una pasteler¨ªa abierta las 24 horas del d¨ªa, se impone visitar el nuevo emblema de Dundee, proyectado por el arquitecto japon¨¦s Kengo Kuma como ¡°una sala de estar para la ciudad¡± por su vocaci¨®n de convertirse en punto de encuentro. En su colecci¨®n permanente, el V&A Dundee (2) exhibe 300 objetos que son un reflejo del mejor dise?o escoc¨¦s de los ¨²ltimos cinco siglos en disciplinas diversas, de la moda a la ingenier¨ªa. Aqu¨ª tambi¨¦n est¨¢ la Oak Room, un sal¨®n de t¨¦ dise?ado por Charles Rennie Mackintosh en 1907 que ha sido cuidadosamente restaurado. Adem¨¢s, el centro albergar¨¢ exposiciones temporales y cuenta con el agradable restaurante Tatha, con vistas al r¨ªo Tay. El edificio, creado con casi 2.500 paneles de hormig¨®n, est¨¢ inspirado en los acantilados escoceses, y es la joya de un ambicioso plan de regeneraci¨®n de los muelles que prev¨¦ invertir unos 1.100 millones de euros en 30 a?os.

13.00 En el barco del capit¨¢n Scott

Al salir del V&A merece la pena subir al RRS Discovery (3), anclado justo al lado. Construido en la ciudad, es el barco con el que a comienzos del siglo XX el capit¨¢n Scott lider¨® la primera expedici¨®n brit¨¢nica a la Ant¨¢rtida. La visita explica la vida a bordo y c¨®mo la tripulaci¨®n sobrevivi¨® atrapada en el hielo dos inviernos. Pregunte despu¨¦s a cualquier lugare?o por el mejor fish and chips de la ciudad y le encaminar¨¢ a Tailend (4) (81 Nethergate), un local donde probar tambi¨¦n el ar?broath smokie, una receta de abadejo ahumado que es una famosa delicia local.

14.00 Homenaje a los Lemmings

El plan de tarde es otro museo. Hay tres donde elegir: el Dundee Contemporary Arts ¡ªDCA¡ª (5) (152 Nethergate) expone arte contempor¨¢neo y es el coraz¨®n creativo de la ciudad; acoge un caf¨¦, cines, una tienda de regalos con detalles originales y un estudio de impresi¨®n donde estampan sus obras los artistas locales. A 10 minutos a pie est¨¢ The McManus: Dundee¡¯s Art Gallery & Museum (6), en un imponente edificio victoriano y con una valiosa colecci¨®n de artes decorativas. Y el Verdant Works (7) es el museo del yute, donde recrean en un antiguo telar reformado el pasado textil de la ciudad. Durante el paseo, hay que prestar atenci¨®n a las estatuas callejeras, pues muchas homenajean a personajes populares del imaginario de Dundee, como los Lemmings del videojuego.

17.00 T¨¦ tras un mostrador de 1868

En la zona comercial hay franquicias y grandes cadenas, pero tambi¨¦n multitud de boutiques que van de lo cl¨¢sico a lo hipster. En la primera categor¨ªa destaca J. A. Braithwaite (8) (6 Castle St.), la tienda m¨¢s antigua de la ciudad que provee de caf¨¦ y t¨¦ desde 1868 y conserva a¨²n los mostradores o las b¨¢sculas originales. Entre las reci¨¦n llegadas est¨¢ Daily Grind (9) (8b Exchange St.), una concept store con cafeter¨ªa y barber¨ªa donde se venden las camisetas irreverentes y con mensaje de la firma escocesa Abandon Ship Apparel. Amantes de la m¨²sica, apunten este nombre: Groucho¡¯s (10) (132 Nethergate). Es una tienda de discos de segunda mano que, dicen, Johnny Marr, de The Smiths, bautiz¨® como ¡°la m¨¢s guay de Gran Breta?a¡±. Y entre comercio y comercio no hay que olvidarse de levantar la vista para admirar edificios como The Old Steeple (11) (la torre medieval de la iglesia de St. Mary, del siglo XV) o la catedral anglicana de St. Paul (12), proyectada por el arquitecto sir George Gilbert Scott, quien dej¨® una profunda huella en Dundee.

19.00 Delfines desde la playa

Para cerrar la tarde merece una visita el Mills Observatory (13), un observatorio astron¨®mico en Balgay Hill, barrio al este de Dundee. Tiene un peque?o planetario, y su potente telescopio permite perderse entre estrellas y planetas (los horarios cambian seg¨²n la estaci¨®n). Tambi¨¦n es buena idea acercarse a Broughty Ferry (14), una zona en las afueras conocida como el Brighton de Escocia, y donde anta?o establecieron sus villas los llamados barones del yute. El barrio es encantador, est¨¢ repleto de tiendas y restaurantes y tiene su propio castillo. Adem¨¢s, entre mayo y septiembre, si la suerte acompa?a, es posible avistar delfines desde la playa. Mejor si es con un helado de Visocchi¡¯s ¡ªuna instituci¨®n desde 1954¡ª en la mano.

21.00 La ginebra local

De vuelta al centro, las opciones para una cena tard¨ªa son numerosas, como corresponde a una ciudad universitaria. El restaurante Brassica (15) tiene una cocina basada en el uso de ingredientes de proximidad. A unos 10 minutos, en Gallery 48 (16) o Jute Caf¨¦ Bar (17) se puede tomar algo ligero rodeado de obras de arte. Para la primera copa, en el cercano Draffens sirven la ginebra local Verdant y originales c¨®cteles en tarros de mermelada de Jam Jar. Y, para bailar hasta tarde, The Reading Rooms (18) (57 Blackscroft) es un club ubicado en una antigua biblioteca victoriana. Si se le hace de d¨ªa, siempre puede acabar la jornada justo como la empez¨®.