Calma en las playas lusas

Los municipios playeros portugueses son de los menos afectados por coronavirus en el mundo, incluso existen peque?os concejos donde no se ha detectado ni un caso desde que la pandemia lleg¨® a Portugal, el 2 de marzo. Es una curiosidad porque el virus no es una especie de caravela (medusa), que se la ve venir; puede llegar con los ba?istas, es decir, la aglomeraci¨®n de personas aumenta el riesgo de contaminaci¨®n en un lugar tan limpio como las playas del Atl¨¢ntico portugu¨¦s.

La Agencia Portuguesa Medioambiental (APA) ha calculado las personas que caben en cada playa para ser un espacio seguro este verano y, milagrosamente, caben m¨¢s que el a?o pasado. En virtud de este herc¨²leo trabajo (han contabilizado las dunas y el periodo de mareas), la popular S?o Jo?o de Caparica puede acoger a 12.200 personas, cuando el a?o pasado, seg¨²n la misma fuente, cab¨ªan 5.770. Para un ba?o seguro no hace falta consultar su p¨¢gina web (apambiente.pt), sino seguir el buen juicio, como evitar playas urbanas en fin de semana, especialmente la marchosa Carcavelos, a 20 kil¨®metros de Lisboa. M¨¢s pr¨¢ctica es la app de Info Praia (infopraia.apambiente.pt), que detalla en tiempo real la ocupaci¨®n de cada arenal con un sem¨¢foro. El rojo no significa que se proh¨ªba la llegada de m¨¢s ba?istas, aunque s¨ª puede haber recomendaciones de la autoridad mar¨ªtima para dirigirse a otros lugares o regresar m¨¢s tarde.

Descartando playas urbanas y las isle?as de Madeira y Azores, el pa¨ªs asegura desde el 1 de julio (cuando se reabren las fronteras con Espa?a) arenales sin agobios, incluso desiertos (igual que los anteriores veranos). Pero si apuntamos a los concejos que no han registrado caso alguno de covid, estos son los ¨²nicos, de norte a sur, en el Portugal continental.

?bidos, de laguna y mar

A 15 kil¨®metros de este coqueto pueblecito al norte de Lisboa est¨¢ la playa del Buen Suceso, entre otras. Esta, sin embargo, es la m¨¢s popular, especialmente si se va con ni?os, pues se junta el mar con la laguna proporcionando tranquilidad y agua calentita, adem¨¢s de contar con unas casetas con lonas que protegen del sol (aunque est¨¢ en cuesti¨®n si se eliminan por motivos de seguridad sanitaria). El lado oce¨¢nico es brav¨ªo y fr¨ªo, pero tambi¨¦n tiene sus adeptos.

Sines, arenal infinito

Sines es la punta sur de un arenal de 55 kil¨®metros de largo que, al norte, acaba en la pen¨ªnsula de Troia. Entre medias, playas excepcionales. La pandemia no se ha cebado en sus concejos, apenas unas decenas de casos, as¨ª que para los menos temerosos son igual de recomendables. La zona ideal para surfistas es S?o Torpes. Es larga, limpia y con algunos buenos restaurantes en los accesos (escondidos). Para los que son m¨¢s de tumbarse en la toalla, Vierinha es perfecta, aunque mejor mirar solo hacia el mar; en el lado opuesto, una enorme petroqu¨ªmica rompe cualquier idilio. De Sines hacia arriba no hay ninguna playa urbana, ni siquiera aldeana. Son arenales aislados con un encanto ¨²nico, como Melides y Santo Andr¨¦, ambos con lagunas que permiten el cambio de agua y temperatura con solo cruzar una duna.

M¨¢s al norte, la brav¨ªa Aberta Nova y encima la de Pego ¡ªhasta que cayeron en desgracia judicial y social, una playa casi privada de la familia Esp¨ªrito Santo¡ª, con aparcamiento cubierto de pago y cerca del restaurante Sal (restaurantesal.pt). Muy cerca, la playa de Carvalhal y su restaurante ofrecen lo mismo a menor precio. Pasada la recomendable playa de Comporta se llega a la punta, Troia. En esta parte otra adinerada familia portuguesa, los Azevedo, edific¨® un hotel rascacielos en medio de lo que deb¨ªa ser un para¨ªso. La espa?ola Sandra Ortega, hija de Amancio Ortega, fundador del imperio Inditex, ha comprado 340 hect¨¢reas a los Azevedo y prometido construir algo m¨¢s respetuoso con el medio ambiente.

Maravilla secreta en Aljezur

Este municipio cuenta con nueve playas, pero Monte Cl¨¦rigo conquista el coraz¨®n de cualquiera. La llegada en coche desde un alto no tiene competencia. La arena invade la carretera antes de llegar al parking, donde se estacionan las prisas y los ruidos. Los surfistas son m¨¢s de Arrifana, arenal bajo un pueblo amurallado, y las familias con ni?os, de Odeceixe, pues recoge la desembocadura del r¨ªo del mismo nombre, con las ventajas que aporta esta duplicidad. Pero un atardecer en Monte Cl¨¦rigo se recuerda siempre.

Las dos costas de Vila do Obispo

Epicentro de la Costa Vicentina, Vila do Bispo es el ¨²nico concejo del pa¨ªs con costa meridional y occidental, gran ventaja en el clima cambiante y de frecuentes nieblas de la zona. Para el mejor abrigo hay que elegir entre las playas de Burgau, Cabanas Velhas, Boca do Rio, Salema, Figueira, Furnas, Zavial, Ingrina, Barranco, Martinhal, Mareta y Beliche. Al norte del cabo de San Vicente, en la costa occidental, Telheiro, Ponta Ruiva, Castelejo, Cordoama, Barriga y Murra??o son m¨¢s agrestes.

Estos concejos con cero virus y playas maravillosas no suelen ser los m¨¢s frecuentados, pues la mayor¨ªa prefiere el sur del Algarve, pol¨ªticos incluidos. No hay peligro si al presidente de la Rep¨²blica, Marcelo Rebelo de Sousa, se le ve en la playa de Gigi o en la populosa de Portim?o, y al exministro de Finanzas, M¨¢rio Centeno, en la playa de Monte Gordo y en Tavira, ya lindando con Huelva, escenarios veraniegos de su ni?ez en Olh?o, que tambi¨¦n se ha librado de la pandemia (apenas 12 casos en tres meses).