Planes redondos de enoturismo
Pueblos vin¨ªcolas, bodegas centenarias o con firma de grandes arquitectos, vi?edos en altura o junto al mar. Cinco deliciosas rutas por Galicia, La Rioja, Castilla y Le¨®n, Catalu?a y Andaluc¨ªa
El enoturismo est¨¢ en auge, y fruto de este creciente inter¨¦s es la proliferaci¨®n de rutas del vino que abarcan pr¨¢cticamente todas las regiones vitivin¨ªcolas espa?olas. Desde luego, hay donde elegir, porque Espa?a, con sus m¨¢s de 960.000 hect¨¢reas de vi?edo ¡ªuna de las mayores extensiones del mundo¡ª, re¨²ne las mejores condiciones para convertir el enoturismo en una de las experiencias m¨¢s atractivas y gratificantes. La oferta es tambi¨¦n diversa gracias a la cambiante orograf¨ªa del pa¨ªs: basta con recorrer medio centenar de kil¨®metros para disfrutar de una gran variedad de paisajes y climas. Todo ello engarzado en propuestas que a¨²nan historia, arte y gastronom¨ªa.
Las 29 rutas del vino que se pueden realizar actualmente en Espa?a proporcionan una gozosa y pedag¨®gica inmersi¨®n en el h¨¢bitat de las bodegas, para comprender las condiciones naturales y t¨¦cnicas que explican la calidad de sus vinos. Podemos disfrutar de la belleza de los paisajes vitivin¨ªcolas mediante instructivos paseos por los vi?edos, cuyo cromatismo cambiante modula el ritmo del ciclo vegetativo de las cepas. En este contacto con el territorio uno llega a comprender c¨®mo las caracter¨ªsticas del suelo, el clima y los varietales (los diferentes tipos de uva) determinan la personalidad y caracter¨ªsticas de cada vino. A su vez, el recorrido por las instalaciones de elaboraci¨®n completa un peque?o curso de enolog¨ªa cuyo remate final llega con una cata. Incluso en ocasiones cabe la posibilidad de ir m¨¢s all¨¢, y prolongar la experiencia pernoctando en la propia bodega; deleitarnos con la rica gastronom¨ªa, moderna o tradicional, de los restaurantes de la zona, y redondear el viaje callejeando por los pueblos m¨¢s bellos de la comarca vitivin¨ªcola en cuesti¨®n.
Estas son cinco posibilidades para, a trav¨¦s del enoturismo m¨¢s cuidado, recuperarse del largo confinamiento.
Galicia: piedra y vid
Un recorrido por la comarca pontevedresa del Saln¨¦s, valle de vid y herbal, para visitar sus pazos y beber sus vinos resulta una experiencia inolvidable. Algunas de estas residencias se?oriales, envueltas en verdores de jard¨ªn y florestas naturales, albergan bodegas de porte, como Fefi?anes, en Cambados, un magistral edificio del siglo XVI que es palacio y plaza ensimismada. O Pazo de Se?orans, en Vilanovi?a, una hermosa representaci¨®n de las casas solariegas del siglo XVI donde se elabora uno de los mejores blancos de albari?o. Sin olvidar Barrantes, una casa-torre a orillas del r¨ªo Umia cuyos fundamentos se remontan a finales del siglo XV, con bodega construida en granito del pa¨ªs.
En la bodega O Pazo de Se?orans, en Vilanovi?a, se elabora uno de los mejores albari?os
M¨¢s all¨¢ del vino, la zona ofrece la posibilidad de visitar el Pazo Carrasqueira, casa rural del siglo XVII que el matrimonio Pintos-Hermida ha convertido en hotelito con todo lujo de detalles, donde se pueden contratar visitas culturales con itinerarios programados, rutas de senderismo o paseos ornitol¨®gicos. Y al que le guste sentir ¡ªo, mejor, presentir¡ª el rumor del oleaje, al visitar el Saln¨¦s debe hacer parada y fonda en el parador de Cambados, frente a la r¨ªa de Arousa. Desde las nobles aunque algo austeras habitaciones de esta mansi¨®n solariega, el antiguo Pazo Baz¨¢n, hay que dejarse llevar por el vuelo blanco de las gaviotas y so?ar con la aventura del mar y del vino.
Rioja: arquitectura entre vi?edos
Pasear por el vi?edo riojano, de suaves pendientes entre los meandros del r¨ªo Ebro, es adentrarse en la historia enol¨®gica de Espa?a, que ha tenido en Rioja el paradigma del vino de crianza. Por aqu¨ª pas¨® el Camino de Santiago, sembrando la Ruta Jacobea de hermosas joyas rom¨¢nicas. Los monjes benedictinos de Borgo?a transitaron por estas tierras trayendo devoci¨®n, cepas y conocimientos vitivin¨ªcolas. Vi?as, sendas, fuentes, regatos, castillos y ermitas esperan al viajero amante del vino. Hay mucho que ver, que oler, que degustar. Pero tal vez la arquitectura de sus bodegas sea uno de los mayores atractivos. Empezando por Laguardia (?lava), villa medieval minada de bodegas subterr¨¢neas, simb¨®licamente defendidas por murallas jubiladas, desde donde acercarse a contemplar el sinuoso perfil de la bodega Ysios, proyectada por Santiago Calatrava, con la ondulada esbeltez de su cubierta laminar en aluminio recort¨¢ndose ante la sierra de Cantabria.
En la Laguardia espera la bodega Ysios, dise?ada por Calatrava, recort¨¢ndose ante la sierra de Cantabria
En Samaniego, enclave fortificado que cuenta con palacio e iglesia parroquial como restos de su pasada nobleza, tiene su asiento la nueva bodega Baigorri, dise?ada por I?aki Aspiazu. Y en Elciego, donde el arte arquitect¨®nico se funde con la elaboraci¨®n de vino, sorprende al viajero el impacto est¨¦tico de la sede social de la bodega Marqu¨¦s de Riscal, firmada por el prestigioso arquitecto Frank Gehry. Con la luz cambiante parece cobrar vida el titanio de sus formas voladizas con tonos lilas. Su propuesta Ciudad del Vino ¡ªque reabre sus puertas el 1 de julio¡ª engloba un restaurante asesorado por Francis Paniego, cocinero con estrella Michelin, una vinoth¨¦rapie y un hotel gestionado por el grupo hotelero Starwood Hotels & Resorts que forma parte de su prestigiosa Luxury Collection.
Castilla y Le¨®n: vino y cordero
Si el agua del Ebro se transmuta en nuestros vinos m¨¢s prestigiosos, no le anda a la zaga el Duero, r¨ªo vitivin¨ªcola por excelencia que refresca zonas con denominaciones de origen tan conocidas como Ribera del Duero, Toro, Cigales, Rueda, Tierra de Zamora, Arribes del Duero o, ya en Portugal, Alto Douro. R¨ªo de vino e historia, de bellas riberas y oteros, con el vi?edo de tinto fino (tempranillo) abrazando sus sobrias villas vitivin¨ªcolas, alimenta en sus pastos el ganado lanar que adquieren en los asadores la categor¨ªa de manjar regio.
Bajo el castillo de Pe?afiel hay dos kil¨®metros de galer¨ªas y t¨²neles donde Protos cr¨ªa sus vinos
Hay que detenerse en Pe?afiel, con su soberbio castillo del siglo XI en el filo estrat¨¦gico de un pe?¨®n, donde se encuentra el Museo del Vino (turismopenafiel.com), moderno y pedag¨®gico. Bajo las ra¨ªces del castillo, en su enorme vientre de tierra, hay dos kil¨®metros de galer¨ªas y t¨²neles donde Protos, el primero, que eso quiere decir el nombre, un gigante de tres millones de botellas, cr¨ªa sus vinos (bodegasprotos.com). Historia embotellada que contrasta con su nueva bodega, dise?ada por los arquitectos Richard Rogers y Alonso Balaguer. Cerca se levanta el conjunto cisterciense del monasterio de Santa Mar¨ªa de Valbuena, con unos soberbios frescos de primitivo g¨®tico franc¨¦s.
Aqu¨ª, las posibilidades de recorrer bodegas y vi?edos en pocos kil¨®metros a la redonda son amplias. Otra visita obligada es la localidad vallisoletana de Valbuena de Duero, donde se encuentran las instalaciones de Vega Sicilia, que elabora uno de los mejores vinos del mundo. Hay que solicitar permiso para visitar la bodega, lo que no siempre es f¨¢cil de conseguir. En cualquier caso, los hermosos vi?edos de la zona, con el r¨ªo Duero como integrante imprescindible del paisaje, compensan sobradamente el viaje.
Andaluc¨ªa: filigrana y embrujo
Amplias y variadas son las posibilidades que ofrece para el enoturismo la regi¨®n andaluza. Desde el interior malague?o, con sus pueblos moriscos encalados hasta el caballete del tejado, con Ronda, la capital vitivin¨ªcola del tinto andaluz, y la Axarqu¨ªa, perfumes de flor y almizcle, donde se cultivan algunos de los mejores moscateles de Espa?a. Pero puestos a escoger, C¨¢diz, salada claridad, como cant¨® el poeta Machado. En la costa atl¨¢ntica se encuentran pueblos de tanta belleza como tradici¨®n marinera. Sanl¨²car de Barrameda, a orillas del parque nacional de Do?ana, donde el vino fino se llama manzanilla. Y en la campi?a, so?ando con el mar, Jerez de la Frontera, con sus vi?edos sobre tierra blanca albariza, con el tiempo detenido entre caballos, arte y vino.
Visita imprescindible es Gonz¨¢lez Byass y sus catedrales del vino, una de las mayores bodegas del pa¨ªs. Aqu¨ª nace, en 1844, T¨ªo Pepe, el primer fino. Sus naves de crianza ¡ªLos Ap¨®stoles, La Cuadrada, La Concha¡ª transportan al visitante a otra dimensi¨®n enol¨®gica, llena de magia y embrujo. En Sanl¨²car de Barrameda, Barbadillo, fundada en 1837, es toda una instituci¨®n. No solo posee la bodega mayor y m¨¢s importante, sino que ha sido pionera en lanzar al mercado una manzanilla en ¡°rama¡±. Pero donde destaca Barbadillo es en la elaboraci¨®n de sus reliquias, viejos vinos generosos, de soberbia factura, tanto amontillados como olorosos y dulces. Williams & Humbert, Emilio Lustau o Fundador Pedro ?Domecq, cuyo complejo recuerda el Jerez del siglo XVIII¡, todas merecen una visita a sus instalaciones tocadas por la gracia gaditana y el hechizo de sus vinos.
M¨¢s informaci¨®n vitivin¨ªcola en un clic
Asociaci¨®n Espa?ola de Ciudades del Vino. Informaci¨®n de las 40 ciudades espa?olas asociadas donde el vino es fundamental en su econom¨ªa. Los municipios que la integran entienden que el vino determina desde el perfil urban¨ªstico y paisaj¨ªstico hasta la estructuraci¨®n del mercado laboral y su cultura (acevin.es).
Rutas del vino de Espa?a. Organiza viajes a medida en regiones vitivin¨ªcolas de la Pen¨ªnsula y publica magacines informativos, el ¨²ltimo en este mes de junio (wineroutesofspain.com).
Enoturismo del vino. Ofrece packs regalo para sorprender con una escapada por Espa?a con el vino como gran protagonista del viaje, y tambi¨¦n organiza visitas a bodegas, experiencias gastron¨®micas y diferentes planes de fin de semana (turismodevino.com/enoturismo).
Asociaci¨®n de Museos del Vino. Su objetivo es difundir la cultura del vino en general y la de cada zona vitivin¨ªcola en particular. Ofrece informaci¨®n y contacto de museos del vino de Espa?a, en concreto se encuentran 32 en su p¨¢gina web (museosdelvino.es).
Catalu?a: milagro vitivin¨ªcola
Pocas zonas vitivin¨ªcolas catalanas son capaces de ofrecer tantos atractivos para el enoturismo como el Priorat, con sus impresionantes formaciones tect¨®nicas, donde el sol mediterr¨¢neo eleva notablemente la temperatura por el d¨ªa, mientras el viento seco del Ser¨¦ enfr¨ªa las noches. Y ese contraste alumbra uvas potentes y estructuradas. Esta comarca tarraconense es un circo de monta?as dram¨¢ticas, sue?o de los escaladores, salpicado de pueblos, a cual m¨¢s entra?able. Durante el camino la mirada recorre un panorama de vi?edos hermosos y sorprendentes, tapizando los bancales de licorella (pizarra). Origen y s¨ªntesis de la grandeza de estas tierras benditas es Scala Dei, a los pies del Montsant, con sus vi?edos fundacionales y sus ruinas cubiertas de yedra, donde la que fuera zona comercial y agr¨ªcola de los monjes es ahora La Conreria d¡¯Scala Dei, un edificio restaurado como hotel de 4 estrellas.
En el Priorat hay mucho que andar, visitar y beber, pero quien mejor ha sabido combinar el trabajo del vino y el disfrute tur¨ªstico es Xavi Buil, de Buil & Gin¨¦, con su flamante edificio forrado de pizarra frente a la ermita de la Consolaci¨®n, en Gratallops. Gema es el alma de la preciosa tienda y quien gu¨ªa a los visitantes, desde la vi?a hasta las profundidades, por el mundo del sabor y el conocimiento de la comarca a trav¨¦s de una innovadora cata comparada.
En el otro extremo, en Girona, l¡¯Empord¨¤ ofrece una conjunci¨®n de factores ¨²nicos: suelos de pizarra, terrazas sobre el Mediterr¨¢neo, fuerte insolaci¨®n y el viento tramontana que seca y enloquece. Aqu¨ª el vino es una singularidad que no admite median¨ªas. Un punto de partida puede ser Mas Vivent, una mas¨ªa del siglo XIX rodeada de parques naturales.
Una abad¨ªa muy enol¨®gica
Las bodegas espa?olas est¨¢n apostando fuerte por el enoturismo, con una amplia oferta de servicios. Un buen ejemplo es Abad¨ªa Retuerta (abadia-retuerta.com). Ubicada junto a Sard¨®n de Duero (Valladolid), en un recodo del r¨ªo Duero entre Tudela de Duero y Pe?afiel, ha hecho una fuerte inversi¨®n en su vanguardista bodega y en la transformaci¨®n de la abad¨ªa del siglo XII, convertida en un exclusivo hotel de 5 estrellas. Entre sus propuestas de enoturismo destaca Experiencia Terru?o, un educativo paseo por los tres pagos de la finca, con posterior recorrido por la nave de elaboraci¨®n y la sala de barricas, para finalizar con una cata dirigida de tres exclusivos vinos de los vi?edos visitados (50 euros). M¨¢s completa es su Inmersi¨®n Enol¨®gica, una experiencia que permite explorar el entorno natural, los pinares, el p¨¢ramo y los vi?edos, con el Duero como referente. Interesante la parada en el huerto biodin¨¢mico de la finca, que ofrece la oportunidad de recolectar hortalizas y verduras frescas de temporada. Durante el paseo se degusta un aperitivo con productos de la regi¨®n, acompa?ado por un vino de la bodega. La propuesta incluye una cata comentada del tinto Abad¨ªa Retuerta Selecci¨®n Especial y otros cuatro vinos (150 euros). Quien quiera profundizar en los aspectos enol¨®gicos cuenta con Winemaker's Collection, un paseo por las principales variedades nacionales e internacionales plantadas en la finca, y cata posterior de tres vinos (50 euros). Otras propuestas son Aroma Lab, una forma divertida de distinguir los diferentes aromas del vino a trav¨¦s de frutas, flores, especias¡ (60 euros), y Picnic en e-Bike, ruta en fat-bike (bici de llanta gorda) el¨¦ctrica por vi?as, lagunas, bosques y ¨¢rboles centenarios, rematada por un aperitivo bajo una encina centenaria (60 euros). Pasear a caballo, viajar en globo, contemplar la V¨ªa L¨¢ctea con un telescopio o una exhibici¨®n con aves de presa son otras actividades incorporadas a la experiencia enoturista.
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