La ruta de las pagodas de Myanmar: un viaje para hacer una vez en la vida

Las pagodas doradas dominan el paisaje de Myanmar, la antigua Birmania, sin lugar a dudas, un destino por descubrir en el sudeste asi¨¢tico. El pa¨ªs, cuyo primer Gobierno democr¨¢tico se escogi¨® en 2015, vive t¨ªmidamente momentos de apertura, de transici¨®n hacia la modernizaci¨®n, sin embargo, sus tradiciones y paisajes siguen tan arraigados como siglos atr¨¢s. Viajar a Myanmar es hacer un salto en el tiempo, detenerlo para admirar la belleza de sus pagodas, paisajes, r¨ªos, pueblos y ciudades, tan aut¨¦nticas como ex¨®ticas tambi¨¦n para aquellos viajeros que han recorrido ya mucho mundo. Siempre habr¨¢ una sorpresa en Myanmar con la que no contabas. Con m¨¢s de 100 grupos ¨¦tnicos y 4.000 pagodas, el pa¨ªs cuenta con aut¨¦nticas maravillas, lugares importantes para el budismo, la religi¨®n que sigue imperando. Los monjes budistas en Myanmar son, como se?ala Lonely Planet, venerados como aut¨¦nticas estrellas del rock.

Hay muchas maneras de visitar el pa¨ªs, pero una de las m¨¢s recomendables es a trav¨¦s de sus pagodas. La de Shwedagon debe figurar en el mapa de cualquier ruta que se preste, es con seguridad el monumento religioso m¨¢s impresionante en el sur de Asia, una obra maestra que solo podr¨¢s encontrar en Yang¨®n.

Si te interesa profundizar y hacer una ruta por sus pagodas m¨¢s significativas, EL PA?S VIAJES y el experto en Asia ?lvaro Planchuelo te ofrecen la posibilidad de viajar durante 13 d¨ªas por Myanmar. Esta aventura, que se propiciar¨¢ el pr¨®ximo 7 de abril de 2025, recorrer¨¢ todo el pa¨ªs, desde la cosmopolita Yang¨®n hasta la culturalmente diversa Mandalay, los legendarios templos de Bagan y la famosa vida flotante sobre el lago Inle. Una ruta que todo gran viajero debe experimentar. En este enlace tienes m¨¢s informaci¨®n.

YANG?N Y LA GRAN PAGODA DEL SURESTE ASI?TICO

La antigua capital de Myanmar hasta 2005 (ahora es Naipyid¨®) cuenta con numerosos puntos interesantes. No es balad¨ª que sea una de las ciudades m¨¢s pobladas del pa¨ªs con cuatro millones de habitantes y un importante centro comercial, aunque, eso s¨ª, muy arraigado a sus costumbres y creencias, donde el budismo sigue siendo la religi¨®n imperante por delante del hinduismo, el cristianismo y el islam.

Yang¨®n, a orillas del r¨ªo que lleva su mismo nombre, destaca sobre todo por su gran pagoda Shwedagon, un monumento con 2.600 a?os de historia y cuya aguja se eleva a 326 pies en el aire, atrayendo a peregrinos de todo el mundo. Sus 100 metros de alto cubiertos de oro llaman la atenci¨®n de cualquier visitante, y no solo por eso, sino tambi¨¦n porque es la m¨¢s sagrada del pa¨ªs, ya que alberga algunas de las reliquias de Buda, entre las que destacan un trozo de tela y ocho cabellos de Siddharta Gautama.

Entrar en esta pagoda es toda una experiencia para cualquiera. Para empezar, hay que descalzarse para entrar, una vez all¨ª sorprende ver la cantidad de vida y rituales que se llevan a cabo. Las oraciones se realizan dando vueltas en el sentido contrario a las agujas del reloj.

El viaje de ?lvaro Planchuelo y EL PA?S VIAJES, por ejemplo, propone experimentar aqu¨ª una de sus ceremonias. Despu¨¦s de disfrutar de la impresionante puesta de Sol con el fondo de la pagoda Shwedagon, participar¨¢n en el encendido de l¨¢mparas de aceite, un ritual budista muy simb¨®lico, donde creen que encender m¨¢s de 1.000 l¨¢mparas especiales les bendecir¨¢ con sabidur¨ªa e iluminaci¨®n. Esta ceremonia es m¨¢gica: las vistas de la pagoda con todas esas peque?as luces brillantes es un momento especial que se debe vivir por lo menos una vez en la vida.

Adem¨¢s de esta gran pagoda, Yang¨®n cuenta con muchas m¨¢s: la pagoda Chauk Htat Gyi y su enorme Buda reclinado de 217 pies de largo, uno de los m¨¢s grandes de Myanmar y de los m¨¢s visitados. Y no es la ¨²nica que tiene un Buda de tama?o colosal, en la Pagoda Ngahtatgyi, situada dentro del monasterio Ashay Tawya Kyaung, hay otra gran estatua de Buda conocida como el Buda de los cinco pisos.

EL LAGO INLE Y SUS PAGODAS

El recuerdo de recorrer el lago m¨¢s importante de Myanmar sobre una de sus barcazas tradicionales es un preciado regalo de viaje. En el coraz¨®n del pa¨ªs, el lago Inle supera los 120 kil¨®metros cuadrados de extensi¨®n, siendo uno de los m¨¢s altos de Myanmar y una atracci¨®n tur¨ªstica en s¨ª misma. Navegar por sus aguas dulces, Reserva de la Biosfera por la Unesco, es una experiencia vital. Mercados, templos sagrados, jardines flotantes, aldeas de pescadores y los m¨ªticos ¡°remeros de piernas¡± figuran en su mapa. El sue?o de cualquier fot¨®grafo es capturar, precisamente, la destreza con la que los pescadores de la etnia intha sujetan los remos con sus piernas, dejando sus manos libres para manipular la red de pesca c¨®nica. Seguramente todo este ingenio corporal es posible gracias a la tranquilidad de las aguas de Inle.

La pagoda de Phaung Daw Oo, el lugar religioso m¨¢s sagrado del sur del Estado de Shan, convive en este paisaje. Se encuentra en el pueblo de Ywama, y es la protagonista de un importante festival anual de pagodas. En el interior de Phaung Daw Oo hay cinco reliquias creadas en tiempos del rey Alaungsithu, estas figuras son transportadas en unas barcazas durante el festival, que suele durar unos 18 d¨ªas, y que van parando en cada uno de los pueblos y aldeas del lago Inle.

Tambi¨¦n en este mismo escenario destaca la pagoda Nyaung Oak, en el pueblo de Indein. En realidad, no es solo una, sino un conjunto de pagodas que sobreviven al paso del tiempo, algunas de ellas, de los siglos XIV-XVIII, se encuentran en ruinas.

BAGAN Y SUS PAGODAS

Los da?os del terremoto de 2016 son a¨²n visibles en los m¨¢s de 3.000 templos que existen en Bagan -se dice que se construyeron hasta 10.000 templos, pagodas y monasterios-. La imagen es espectacular, de las m¨¢s m¨¢gicas que se pueden encontrar en Myanmar. Todos ellos se sit¨²an entre el siglo XI y el siglo XIII, algunos se han restaurado y otros se encuentran en declive, pero quiz¨¢ ese sea su principal encanto. Bagan es un lugar tur¨ªstico ya que es patrimonio mundial de la Unesco, pero, sobre todo, es un enclave religioso. Un lugar de peregrinaje en el budismo. Sus puestas de Sol entre los templos son de lo m¨¢s destacado de cualquier viaje a Myanmar, tambi¨¦n los vuelos en globo aerost¨¢tico. Ver todas las pagodas a vista de p¨¢jaro hacen que la experiencia sea mucho m¨¢s completa, si cabe.

En Bagan se encuentra la espl¨¦ndida pagoda Shwezigon, construida por el rey Anawrahta en el siglo XI; la estructura dorada en forma de campana se convirti¨® en el prototipo de pr¨¢cticamente todas las pagodas posteriores en Myanmar. Junto a ella, destacan el templo de Ananda, que es una obra maestra encalada de la arquitectura Mon, con cuatro budas de pie, y es el hogar de murales bien conservados del siglo XVIII. Construido en 1901 por Kyansittha, se dice que el templo representa la sabidur¨ªa infinita de Buda.

LAS PAGODAS DE MANDALAY

La segunda ciudad m¨¢s importante de Myanmar destaca por los pintorescos paisajes que se crean a ambos lados de su r¨ªo Irawadi. Es aqu¨ª donde se puede apreciar la vida de la ciudad: botes de cola larga, balsas de bamb¨² y ferris llevando mercanc¨ªas marcan el ritmo de su d¨ªa a d¨ªa.

La campana de Mingun, con un peso de m¨¢s de 87 toneladas y m¨¢s de 3,7 metros de altura, es la campana sin fisuras m¨¢s grande del mundo y otro de los atractivos tur¨ªsticos de Mandalay. Tambi¨¦n figuran en esa lista la pagoda Hsinbyume (Ma Thein Tan), un templo encalado en color blanco construido para parecerse al monte Meru, y la pagoda Mingun, que se construy¨® con la intenci¨®n de que fuera la m¨¢s grande del mundo, pero que nunca lleg¨® a acabarse.

Adem¨¢s, en Mandalay se encuentra Shwe Kyaung (monasterio del Palacio de Oro), un excelente ejemplo de edificio tradicional de madera, y la pagoda Kuthodaw, que alberga el libro m¨¢s grande del mundo. Consta de 1.460 p¨¢ginas, cada una de tres pies y medio de ancho, cinco pies de largo y cinco pulgadas de espesor. Cada p¨¢gina est¨¢ hecha de m¨¢rmol y se coloca en posici¨®n vertical sobre un soporte propio; combinadas, las p¨¢ginas del libro cubren 13 acres, impresiona su magnitud.

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