C¨®mo tener carisma

Las redes sociales han promovido que muchas personas hagan un escaparate de s¨ª mismas. Sin embargo, mientras la mayor¨ªa pasan inadvertidas, m¨¢s all¨¢ del c¨ªrcu?lo de familiares y amigos, otras logran desplegar un poder de atracci¨®n que les abre puertas. ?Cu¨¢les son sus secretos? El carisma es crucial en una cita rom¨¢ntica o para vender un producto. Y, sin duda, algunas personas tienen un talento innato para dejar huella. La buena noticia, seg¨²n Olivia Fox Cabane, es que cualquiera puede desarrollar su magnetismo. En su libro El mito del carisma menciona tres actitudes para lograr este efecto en los dem¨¢s.

Presencia. En palabras de Fox Cabane, ¡°ser carism¨¢tico no depende de cu¨¢nto tiempo tengas, sino de lo presente que est¨¢s en cada interacci¨®n¡±. Las personas carism¨¢ticas recuerdan tu nombre e incluso aquello que les contaste en tu ¨²ltimo encuentro, porque prestan atenci¨®n a lo que sucede a su alrededor ¡°en lugar de estar atrapados en sus pensamientos¡±, apunta esta autora nacida en Par¨ªs.

Poder. Otro de los rasgos del carisma es que la persona se muestra ¡°empoderada¡±, es decir, con la capacidad para llevar a cabo aquello que se propone. Sobre esto, la psic¨®loga social Amy Cuddy tiene una c¨¦lebre charla TED en la que habla de las posturas de poder. Nuestros gestos hablan de qui¨¦nes somos y c¨®mo nos sentimos. Un ejemplo sencillo: tener los hombros ca¨ªdos hacia delante es una se?al de debilidad, porque el mundo nos pesa o estamos amedrentados. En cambio, una postura erguida ¡ªsin rigidez¡ª, con la cabeza alta y los brazos cruzados, expresa confianza. Cuddy recomienda explorar con diferentes posturas c¨®mo nos sentimos.

Calidez. Las personas carism¨¢ticas son atrayentes porque nos hacen sentir en casa. Utilizan un tono de voz agradable, que resulta acogedor a la par que no agresivo, y sus mensajes parten de la honestidad ¡ªhablan de lo que conocen¡ª sin juicios. Un ejemplo ha sido el ¨¦xito durante la pandemia de Adriene Mishler, una instructora de yoga con m¨¢s de nueve millones de suscriptores en YouTube. El secreto de esta exactriz es su cercan¨ªa y naturalidad. Siempre sonriente y de voz serena, los seguidores la perciben como una amiga y mentora. El perro apacible que siempre la acompa?a, Benji, acaba de a?adir familiaridad a los encuentros.

Presencia, poder y calidez son, por tanto, las se?as del nuevo carisma. Sin embargo, tambi¨¦n depende de no pisar ciertas minas que deval¨²an la propia imagen.

Acaparar la atenci¨®n. El carisma depende tambi¨¦n de saber retirarse a tiempo. Si, tras causar una buena impresi¨®n al contar una historia, nos alargamos demasiado, la magia se acaba desvaneciendo y la fascinaci¨®n se transmuta en cansancio.

Contar problemas o criticar. Recitar un cat¨¢logo de lamentaciones no nos catapultar¨¢ a la cima de la popularidad. Las personas carism¨¢ticas brillan por lo contrario: saben mostrar un punto de luz all¨ª donde la mayor¨ªa solo ve oscuridad. Por parecido motivo, las personas criticonas resultan cansinas y adem¨¢s ponen a la audiencia en guardia, ya que todo el mundo teme ser el siguiente en ser denostado.

Distraerse con el m¨®vil. Nada resulta menos atractivo que alguien consulte su celular si le estamos contando algo importante. La escucha es una de las capacidades de las personas carism¨¢ticas. Andr¨¦s Mart¨ªn Asuero, pionero del mindfulness en Espa?a, afirma: ¡°La gente importante no deja el m¨®vil sobre la mesa¡±. Cree que estar pendiente del tel¨¦fono hace parecer vulnerable, como si tu suerte dependiera de responder a tiempo. Los carism¨¢ticos saben que el mundo les esperar¨¢.

Francesc Miralles es escritor y periodista especializado en psicolog¨ªa.