Stephen Lironi: de producir a Jon Bon Jovi a regentar tres restaurantes espa?oles en Londres
Fue una figura clave de la escena pospunk escocesa con el grupo Altered Images. Luego, un reputado productor musical en EE UU. Hoy es propietario de tres restaurantes de cuerpo escoc¨¦s y alma espa?ola en la capital de Reino Unido. Este es su fascinante viaje
En el verano de 1974, una familia escocesa decidi¨® recorrer con su coche el trayecto que separa Glasgow de Palam¨®s. En el asiento trasero, un chaval de 10 a?os de nombre Stephen y de apellido Lironi no pod¨ªa imaginar el efecto que tendr¨ªa dos d¨ªas despu¨¦s de abandonar su fr¨ªa ¡ªincluso en verano¡ª ciudad natal su primer contacto con el mar Mediterr¨¢neo. ¡°Ese color, esa agua¡, ese pa¨ªs, a¨²n bajo el franquismo, que parec¨ªa otro planeta. Esos chipirones. El sabor de esos chipirones a¨²n lo siento en mi boca¡±. Casi 50 a?os m¨¢s tarde, en la planta baja del restaurante Maresco, situado en el Soho londinense, Lironi recuerda aquel viaje inici¨¢tico, el que es uno de los motivos por los que actualmente regenta tres locales de conexi¨®n espa?ola en la capital del Reino Unido. Pero el escoc¨¦s no siempre fue un restaurador. De hecho, ni siquiera hoy se considera como tal. ¡°A ver, con 18 a?os estaba en Top of the Pops¡±, recuerda sobre su primera aparici¨®n en el programa musical m¨¢s c¨¦lebre de la historia de la BBC.
En 1982, Altered Images, una de las bandas escocesas de pospunk m¨¢s exitosas, sufri¨® un cisma interno. Su bater¨ªa y su guitarrista dejaron el grupo. El sello se apresur¨® en buscar reemplazo. Pensaron que el mejor candidato ser¨ªa un chaval que hab¨ªa estado tocando en varios grupos de la escena de Glasgow. ¡°Era yo, un tipo que pod¨ªa tocar la guitarra y la bater¨ªa, dos al precio de uno. Barato, muy barato [en espa?ol]¡±, recuerda Lironi. El actual restaurador fue uno de los responsables del giro estil¨ªstico de la banda, que abandon¨® su sonido m¨¢s guitarrero para abrazar elementos m¨¢s cercanos a la m¨²sica disco. Ese tercer largo de la banda, titulado Pink, fue un enorme ¨¦xito. ¡°Me mud¨¦ a Los ?ngeles¡±, recuerda el escoc¨¦s enfatizando el s¨ªmbolo de estatus que en aquella ¨¦poca, dentro del ecosistema de la industria del disco, significaba mudarse a California. All¨ª desarroll¨® una larga y exitosa carrera como productor musical, hasta que una ma?ana de invierno, hace 15 a?os, cay¨® en sus manos un art¨ªculo del rotativo brit¨¢nico The Guardian. En la pieza se explicaba c¨®mo mucho del mejor marisco recolectado en las costas escocesas terminaba consumi¨¦ndose en Espa?a, pues en aquellas tierras no era tan apreciado como en nuestras barras y mesas. De golpe, Lironi tuvo una epifan¨ªa. Record¨® aquel viaje a Palam¨®s cuando era un ni?o, aquellos chipirones, aquel azul mediterr¨¢neo. Empaquet¨® sus cosas y volvi¨® al Reino Unido con el objetivo de montar un restaurante en el que se sirviera marisco escoc¨¦s y recetas de la gastronom¨ªa marinera espa?ola. ¡°No sab¨ªa nada de restauraci¨®n. De hecho, a¨²n creo que no s¨¦ nada. Me preguntaban si en el restaurante iba a haber esto o aquello, y yo no ten¨ªa ni idea de a qu¨¦ se refer¨ªan. Lo ¨²nico que sab¨ªa era lo que me gustaba. Y as¨ª es hasta hoy¡±.
La primera aventura en el mundo de la restauraci¨®n en Londres fue Bar Esteban, una suerte de taberna en la que se conjugaban los dos elementos que all¨¢ por 2013 defin¨ªan la moda de lo espa?ol en el Reino Unido: tapas y fino. En la cocina, Pablo Rodr¨ªguez (ex Jean Luc Figueras) y, en la sala, Naroa Ortega (ex Etxebarri) ayudaron a Lironi a convertir su primer emprendimiento en un algo de ¨¦xito. La siguiente parada ser¨ªa Escocesa, donde realmente llevar¨ªa a la realidad aquella visi¨®n de mezclar el marisco de su Escocia natal con la gastronom¨ªa espa?ola. Ubicado en el barrio de Stoke Newington, el restaurante pronto se convirti¨® en una instituci¨®n. ¡°No pod¨ªa ni lograr mesa yo¡±, recuerda Lironi.
En una de las paredes de Escocesa luce desde su apertura un ne¨®n con la leyenda ¡°Dream Baby Dream¡±, uno de los temas m¨¢s c¨¦lebres del d¨²o de punk industrial Suicide, con quienes, sobre todo su vocalista, Alan Vega, Stephen Lironi trabaj¨® en su tiempo como productor musical en EE UU. Se lo trajo desde su casa en Hollywood Hills. ¡°Creo que ahora mismo hay m¨¢s rock and roll en las cocinas que en los estudios de grabaci¨®n. M¨¢s tatuajes, m¨¢s egos y m¨¢s gritos¡±. ?Y m¨¢s drogas? ¡°No s¨¦. Creo que no. Mira, trabaj¨¦ con gente muy dispar y casi nunca me encontr¨¦ con artistas muy jodidos por las drogas. Lo que realmente nos jodi¨® fue el mp3. De golpe, un d¨ªa nos despertamos y era lo m¨¢s buscado en internet. En cuesti¨®n de meses, la industria del disco se fue al carajo. Para gente como yo, que vivimos de nuestros porcentajes en la venta de discos, que no vendemos camisetas ni salimos de gira, fue un mazazo¡±. ?Teme que algo similar le pueda suceder en la restauraci¨®n? ?Existe un riesgo de obsolescencia similar en este negocio? ¡°Para m¨ª, no. Pero b¨¢sicamente porque yo solo s¨¦ hacer una cosa: restaurantes que me gustan. No puedo seguir modas. Solo me interesa estar al frente de locales a los que me gustar¨ªa acudir como cliente. Por mucho tiempo que pase, a¨²n siento que soy ajeno a esto. Cuando se empieza a cocinar en los turnos diarios, yo me voy a solucionar problemas. Lejos de la cocina. Es lo que hac¨ªa como productor musical y es lo que hago en mis restaurantes¡±.
En las casi tres d¨¦cadas en las que el escoc¨¦s estuvo en el coraz¨®n de la industria del disco, trabaj¨® con gente como Jon Bon Jovi o Hanson. Hoy se siente fuera de todo eso. Ya casi no va a conciertos. ¡°No s¨¦, me gusta mucho Glen Campbell y hace unos a?os fui a verle en directo y me pareci¨® un rollo. La banda era como muy de funcionarios, sin pasi¨®n¡±. Admite Lironi que siempre ha sido muy mani¨¢tico con la m¨²sica que le gusta, distanciando lo que es el gusto personal del trabajo. ¡°Me emociona una canci¨®n cada dos a?os. Hay cosas que llegan y est¨¢n bien, pero emocionarme emocionarme, un tema cada par de a?os. Y ahora, ni eso¡±. A pesar de esta desconexi¨®n, durante la pandemia volvi¨® a la producci¨®n musical. No fue complicado encontrar secuaces para la aventura, pues lleva casi 40 a?os casado con Clare Grogan, la que fuera vocalista de Altered Images, aquel grupo con el que apareci¨® en Top of the Pops. ¡°Es jodido estar en un grupo y en una relaci¨®n a la vez¡±, recuerda. ¡°No empezamos nuestra relaci¨®n sentimental hasta que la banda se disolvi¨®. Y aqu¨ª estamos. Menudo milagro¡±. En casa, confinados, compusieron y grabaron Mascara Streakz, un ¨¢lbum firmado por Clare ¡ªun verdadero icono pop en el Reino Unido, no solo por su pasado musical, sino tambi¨¦n por su exitosa carrera como actriz¡ª en el que canta la hija de ambos e incluso tiene un cameo el perro de la familia. ¡°Lo hicimos todo en casa. Lo quisimos intentar en el primer confinamiento, pero hac¨ªa demasiado buen tiempo. En el segundo confinamiento, el tiempo era una mierda, as¨ª que nos dedicamos a beber vino y hacer m¨²sica. Y sali¨® ese disco¡±.
Stephen viaja cuatro o cinco veces al a?o a Espa?a. Cree que es por trabajo, pero tiene hoy un problema distinguiendo el trabajo del placer. ¡°Es que, si me dicen que ir a probar vinos es trabajo, pues me r¨ªo, no s¨¦¡±, dice mientras se encoge de hombros. Su principal inquietud es poder contratar personal, algo que el Brexit ha convertido en un infierno y que lastra el negocio, sobre todo su ¨²ltima aventura, ese Maresco en pleno Soho. ¡°Escocia no vot¨® por eso. Cada vez que alguna mierda del Brexit me afecta, recuerdo eso¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.