La piedra de S¨ªsifo
Eso es lo que somos, sombras, solo sombras, sombras con el alma a cuestas. Hay quien la lleva a la espalda, en forma de mochila, y hay quien en forma de maleta con ruedas o bien como una simple bolsa de dos asas. Hay quien la lleva dentro, pero no es lo com¨²n porque el alma est¨¢ externalizada ya, entendiendo por externalizaci¨®n el ejercicio de contratar a terceros para llevar a cabo servicios que tradicionalmente se realizaban dentro: el procesamiento de las n¨®minas de una empresa, por ejemplo, la selecci¨®n de personal, la atenci¨®n al cliente, la contabilidad, incluso la producci¨®n. Usted puede fundar una empresa textil sin abrir un solo taller porque encargar¨¢ que le hagan las camisas o los pantalones en s¨®tanos que ni siquiera tienen nombre. O puede abrir un restaurante sin cocina porque le traer¨¢n la comida de una empresa de c¨¢terin que se encuentra en los bajos de un edificio cualquiera de vecinos. Podr¨ªa incluso constituir una sociedad m¨¦dica sin tener a un solo m¨¦dico en plantilla.
A base de externalizar esto y lo otro, hemos acabado externalizando el alma, que era lo m¨¢s dif¨ªcil de subcontratar, pues tal es el verdadero nombre de esta pr¨¢ctica que sirve para abaratar costes y delegar responsabilidades. Nunca, como en esta imagen, hab¨ªamos comprendido la calidad de met¨¢fora del equipaje de mano, que viene a ser tambi¨¦n la piedra de S¨ªsifo, es decir, el s¨ªmbolo de los esfuerzos frustrantes e in¨²tiles de los seres humanos, pues apenas lo hemos deshecho al llegar al hotel cuando tenemos que volver a hacerlo para salir de ¨¦l. He ah¨ª nuestras sombras, la m¨ªa o la de usted, pues son intercambiables.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.