Un hotel rural itinerante y desmontable

Temprano, o tarde, en la vida de un arquitecto siempre se cruza una caba?a. Le sucedi¨® a Charlotte Perriand con la Maison au Bord de l¡¯Eau, a Le Corbusier con Le Cabanon o a Jean Prouv¨¦ con la casa modular que dise?¨® en 1944 para alojar a afectados por la guerra y que hoy es una suite entre la naturaleza del Ch?teau La Coste, en el sur de Francia. Tambi¨¦n le ha ocurrido a Norman Foster con la Essential Home y, como integrante del Team 4, con la transparente The Retreat, concebida junto a Su Brunell, Wendy Cheesman y Richard Rogers. En esa l¨ªnea, el estudio madrile?o ?baton dio vida a la vivienda ?PH80, una peque?a casa transportable.

Siguiendo la estela de tantos predecesores, Pol Jord¨¤, arquitecto al frente de Sau Taller d¡¯Arquitectura, tuvo su momento caba?a hace 10 a?os, cuando el estudio recibi¨® una menci¨®n honor¨ªfica en un concurso en M¨²nich para el desarrollo de una unidad habitacional modular y autoconstruible en el ¨¢mbito de una siedlung (aquellos asentamientos que surgieron en Alemania tras la II Guerra Mundial, uno de los ejemplos m¨¢s fascinantes del urbanismo moderno). ¡°En aquel contexto en el que adem¨¢s no ten¨ªamos muchos encargos nos pareci¨® interesante autoconstruir una casa, buscar un sistema constructivo sencillo, que fuera adaptable y reversible. Es decir, la dificultad no estaba en dise?ar una casa que no solo se pudiera montar, sino que tambi¨¦n se pudiera desmontar y volver a montar en otro entorno¡±, cuenta.

Para conseguirlo planearon un armaz¨®n en forma de A (A-frame) aprovechando la simplicidad que otorga la estructura triangular, la ausencia de cubierta y de fachada, y que es indeformable y barato, pues el tri¨¢ngulo resulta estable por s¨ª solo. ¡°Adem¨¢s¡±, dice Pol, ¡°el centro de gravedad es muy bajo, es una estructura que no puede volcar y no necesita cimientos. Se apoya directamente en la tierra con pies regulables de acero inoxidable¡±. En cuanto al material, se opt¨® por la madera, ligera, con poco impacto ambiental y buena reciclabilidad.

Para desechar todo aquello que no fuera vida, Henry David Thoreau se retir¨® a una caba?a en el bosque que llam¨® Walden y que le sirvi¨® para titular uno de los libros de no ficci¨®n m¨¢s vendidos en Estados Unidos. Pol tiene presente a Thoreau y tambi¨¦n a Heidegger, a quien la caba?a de Todtnauberg (Friburgo, Alemania) y su entorno, a 1.100 metros de altitud y con apenas 18 metros cuadrados, le ofrecieron la reflexi¨®n y la contemplaci¨®n necesarias para escribir, entre otros libros, Construir, habitar, pensar.

¡°En 2019 desarrollamos un segundo prototipo. La caba?a se instal¨® y funcion¨® como hotel en Arcal¨ªs, Andorra, durante dos a?os y medio, a 2.000 metros de altitud¡±, cuenta Pol mientras llegamos a Can Sau, una mas¨ªa del Prepirineo catal¨¢n, en el t¨¦rmino municipal de Sant Joan de les Abadesses (su pueblo natal), reciente emplazamiento de La Caba?a, en lo alto de una monta?a con vistas impagables de la Taga, pico m¨ªtico del Ripoll¨¨s.

Este hotel n¨®mada (ideal para dos) se monta y se desmonta en 48 horas y tiene como ¨²nica compa?¨ªa ac¨²stica el sonido de los cencerros de las vacas que pastan alrededor, lo que hace que se conciba como un medio de conexi¨®n entre el interior y el exterior. ¡°El objetivo¡±, contin¨²a Jord¨¤, ¡°es cambiar el paradigma del turismo de monta?a, no se trata de ir a un apartamento, un hotel o un camping y hacer una excursi¨®n el d¨ªa siguiente, sino de ofrecer una experiencia de relaci¨®n total con el entorno. Es como dormir en una tienda canadiense pero con las comodidades de cocina, ba?o, calefacci¨®n¡­ El planteamiento es buscar otras ubicaciones y dejar que donde se ha implantado previamente se regenere, como los reba?os que buscan nuevos lugares con hierba fresca y dejan que aquellos por los que han pasado antes puedan florecer¡±.