Trans en el deporte: el debate de los 46 cromosomas
Las posturas tr¨¢nsfobas podr¨ªan llegar al COI
El deporte de competici¨®n es un invento del siglo XX, una manera de dar m¨¢s transcendencia a los juegos que naci¨® sin categor¨ªas de g¨¦nero. Poco despu¨¦s, visto que siempre ganaban los hombres ¨Cm¨¢s fuertes, m¨¢s r¨¢pidos, m¨¢s resistentes, gracias a la misma testosterona culpable de los atributos de la masculinidad¨C, se cre¨®, como espacio protegido, la categor¨ªa femenina, para que ellas tambi¨¦n tuvieran campeonas. Y sobre este argumento cultural se han edificado las posturas de todos aquellos que, en la tercera d¨¦cada del siglo XXI se oponen a la participaci¨®n de las mujeres trans en la categor¨ªa femenina. Para el mundo del deporte es m¨¢s importante la igualdad entre las deportistas que la inclusi¨®n de aquellas personas que biol¨®gicamente no nacieron mujeres.
El Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional (COI), que, en sus balbuceos a la hora de afrontar el problema se aline¨® decididamente a favor de la inclusi¨®n de las mujeres trans, decidi¨® finalmente dejar carta libre a las federaciones internacionales, y la mayor¨ªa optaron por prohibir la integraci¨®n, alegando que las ventajas de nacer con 46 cromosomas XY, principalmente la fabricaci¨®n de testosterona, no se pierden nunca aunque la persona se someta a terapias de estr¨®genos. Este argumento es igualmente el que late en las propuestas del feminismo tr¨¢nsfobo que se impusieron en el reciente Congreso del PSOE y que va contra la Ley Trans espa?ola. Sus ponentes llegaron a proponer que solo las ¡°mujeres biol¨®gicas¡± (es decir, XX) podr¨¢n participar en categor¨ªa femenina, cerrando efectivamente no solo a las mujeres trans sino a las mujeres intersexuales, con cromosomas XY y desarrollo sexual diferente, a las que desde su nacimiento se les asign¨® el g¨¦nero femenino. Algunas de ellas, como la atleta sudafricana Caster Semenya, doble campeona ol¨ªmpica a la que la federaci¨®n internacional de atletismo prohibi¨® competir, o la boxeadora argelina Imane Khelif, campeona ol¨ªmpica en Par¨ªs, se han visto sometidas por ello a un escrutinio discriminatorio. No se adivina en el futuro una soluci¨®n a un problema envenenado por la ideolog¨ªa. El presidente de la federaci¨®n internacional de atletismo, el brit¨¢nico Sebastian Coe, es el candidato favorito para presidir desde junio el COI: es tambi¨¦n el principal partidario de la exclusi¨®n de las mujeres trans y tambi¨¦n de las intersexuales de las competiciones femeninas.
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