PNV y PSE ultiman su acuerdo para gobernar en Euskadi
El nuevo Estatuto y el traspaso de competencias son los ¨²ltimos escollos
PNV y PSE acaban de entrar en la semana definitiva. Una vez fundidos sus programas electorales en uno, las dos formaciones trabajan a contrarreloj para limar los desacuerdos que puedan producirse a lo largo de la legislatura, sobre todo en temas como el nuevo Estatuto y la negociaci¨®n de las transferencias pendientes. A falta de decidir si la secretaria general del PSE, Idoia Mendia entrar¨¢ en el Ejecutivo, el pr¨®ximo viernes es el ¨²ltimo d¨ªa para presentar candidaturas a lehendakari y los partidos necesitan 24 o 48 horas m¨¢s para que lo aprueben sus ¨®rganos ejecutivos. El jueves 3 de septiembre ser¨¢ la investidura del I?igo Urkullu y el d¨ªa 5 jurar¨¢ su cargo en la Casa de Juntas, ante el ?rbol de Gernika.
Los desacuerdos est¨¢n siendo m¨¢s complejos que los acuerdos. PNV y PSE pactaron con bastante celeridad la acci¨®n del Gobierno para los pr¨®ximos cuatro a?os en torno al empleo y las ayudas a todos los sectores que est¨¢n sufriendo con la pandemia, aunque no ha trascendido si Empleo y Trabajo van a seguir como departamentos separados, el primero en manos del PNV y el segundo en manos del PSE, o si se van a fundir en una sola consejer¨ªa. Lo que s¨ª est¨¢ claro es que esa ser¨¢ prioridad. ¡°Va a ser una legislatura marcada por lo social¡±, coinciden ambas delegaciones, con unos objetivos claros: Reforzar la sanidad p¨²blica y el modelo de las residencias, y devolver la tasa de paro a porcentajes inferiores al 10%, como ya se hab¨ªa encarrilado en febrero de este mismo a?o, antes de que la covid-19 dejara la econom¨ªa al borde del coma.
Pero a la hora de redactar un acuerdo que sujete a ambas formaciones, el desarrollo del nuevo Estatuto de Gernika sigue siendo la principal preocupaci¨®n. La clave vuelve a ser que ambos partidos se comprometan a que cualquier avance en esa materia se produzca siempre dentro del marco legal. El lehendakari, I?igo Urkullu tuvo que recordar varias veces durante el debate en la ponencia de Autogobierno y durante la redacci¨®n posterior de los expertos que era preferible un ejercicio de realismo pol¨ªtico para ampliar en marco estatutario dentro de los l¨ªmites que establecen el Estatuto y la Constituci¨®n que arriesgarse al fracaso de su actualizaci¨®n intentando superarlos.
Los dos partidos trabajan en una redacci¨®n que, dando libertad a las aspiraciones de cada formaci¨®n, encarrile las eventuales tensiones y diferencias que puedan producirse a la hora de reactivar la ponencia de Autogobierno. En la pasada legislatura las diferencias se produjeron entre el acuerdo inicial en las bases del nuevo Estatuto entre el PNV y EH Bildu, en temas como el derecho a decidir y su ejercicio pactado o la separaci¨®n de vascos entre residentes y nacionalizados. La redacci¨®n posterior del articulado entre los expertos de los partidos, produjo un mayor acercamiento en temas sociales entre el PNV, el PSE y Elkarrekin Podemos, y un distanciamiento entre el PNV y EH Bildu, aunque todav¨ªa hay discrepancias sobre la evoluci¨®n que va a tener el texto definitivo. El acuerdo de Gobierno que firmaron en 2016, en el l¨ªmite de los plazos para hacerlo, ten¨ªa 80 p¨¢ginas, garantizaba la estabilidad del Gobierno m¨¢s all¨¢ de las discrepancias y dejaba libertad a los socios de gobierno siempre que la acci¨®n pol¨ªtica no desbordara la legalidad.
Otro de los focos est¨¢ en la negociaci¨®n de las transferencias pendientes. Ambos partidos trabajan en la posibilidad de dar cabida en la representaci¨®n del Gobierno vasco en la Comisi¨®n Mixta de Transferencias y en las delegaciones negociadoras, a miembros de las consejer¨ªas afectadas en la competencia que se negocia. El calendario de transferencias ya est¨¢ pactado con el Gobierno de Pedro S¨¢nchez ¨Dlas tres primeras se cerrar¨¢n este mismo mes de septiembre¨D pero a partir de ah¨ª las dos administraciones tienen que afrontar las negociaciones para las m¨¢s complicadas como la Gesti¨®n Econ¨®mica de la Seguridad Social que afecta a varias consejer¨ªas, o la de Prisiones.
Una vez cerrados los cap¨ªtulos program¨¢ticos, PNV y PSE empiezan a hablar ya del reparto del poder y cada partido elegir¨¢ a quienes estar¨¢n al frente de cada departamento, aunque no se esperan grandes cambios y posiblemente el PSE-EE seguir¨¢ teniendo tres carteras frente a ocho el PNV ¨Dnueve con la presidencia¨D. Si hasta ahora los socialistas gestionaban las carteras de Turismo Comercio y Consumo, Vivienda y Medio Ambiente, y una tercera de Trabajo y Justicia, con un impacto en el gasto muy inferior, el hecho de que el PSE-EE aporte esta vez la mayor¨ªa absoluta al PNV ¨Den la anterior legislatura se quedaron a un esca?o¨D hace pensar que dispondr¨¢n de una estructura algo reforzada. De eso, y de que los partidos se pongan de acuerdo en dotar a la nueva estructura del Gobierno vasco de dos vicepresidencias, depender¨¢ que la secretaria general de los socialistas vascos, Idoia Mendia, acabe por decidirse a entrar en el Gobierno. Ganar¨¢ visibilidad para rentabilizar la acci¨®n de los socialistas en el Ejecutivo, como le recuerdan algunos compa?eros, pero perder¨¢ autonom¨ªa para la cr¨ªtica pol¨ªtica, como le recuerdan otros.
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