El PNV rompe con la ¡°realidad virtual¡± de EH Bildu en el nuevo estatuto

El objetivo de los juristas designados por el PNV, PSE-EE y Elkarrekin Podemos de articular un proyecto de reforma del Estatuto que no desborde el marco constitucional, aunque exhiban diferencias, ha reabierto la crisis entre los soberanistas vascos. El divorcio jur¨ªdico entre EH Bildu y el PNV ¡ªpese a que pactaron las bases pol¨ªticas¡ª ha elevado la tensi¨®n entre ambos. El experto del PNV, el exdiputado Mikel Legarda, describe en su explicaci¨®n de voto que la izquierda abertzale defiende ¡°una realidad virtual a la que se quiere dar apariencia de validez jur¨ªdica¡±.

M¨¢s informaci¨®n

Urkullu propone una Espa?a confederal inspirada en el modelo de la Uni¨®n Europea

El PNV apela al soberanismo pactado en el nuevo estatuto

Una ¡°realidad virtual¡± que choca con el discurso de ¡°realismo pol¨ªtico¡± al que apela el lehendakari ??igo Urkullu cada vez que tiene ocasi¨®n. En ese contexto, la decisi¨®n del PNV de desmarcarse de las bases, de car¨¢cter soberanista de la izquierda abertzale y de buscar un acuerdo para actualizar el Estatuto de Gernika junto a socialistas vascos y Elkarrekin Podemos, aleja el fantasma de catalanizar Euskadi.

Ahora la Ponencia de Autogobierno tiene por delante, al menos dos a?os para pulir los tres proyectos que le han llegado, el firmado por PNV, PSE-EE y Elkarrekin Podemos con votos particulares en asuntos como el derecho a decidir, la Idenitidad Nacional o las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, la del PP, y la de EH Bildu. El trabajo jur¨ªdico, m¨¢s all¨¢ del ideario pol¨ªtico de los partidos, lo que ha hecho es dinamitar el espejismo de unidad soberanista que cre¨® el acuerdo entre PNV y Bildu con el que el grupo de expertos comenz¨® a trabajar.

La constataci¨®n de que el partido de Andoni Ortuzar, m¨¢s all¨¢ de compartir objetivos pol¨ªticos, no se iba a sumar a una estrategia de confrontaci¨®n lleg¨® con el debate sobre las consultas. El jurista designado por el PNV, Mikel Legarda explica que el partido de Andoni Ortuzar ¡°no quiere recurrir a v¨ªas de hecho al margen del ordenamiento¡± jur¨ªdico actual, entre otras razones porque el encargo que el Parlamento vasco a los juristas fue el de crear un proyecto normativo con visos de efectos jur¨ªdicos plenos y no una ¡°realidad virtual a la que se quiere dar apariencia de validez jur¨ªdica¡±.

Esa andanada a EH Bildu tuvo sus primeros efectos el pasado mayo. EH Bildu anunci¨® en plenas elecciones municipales del 26M que presentar¨ªa su propio proyecto de estatuto a la vista de que el PNV se desmarcaba. Arnaldo Otegi acus¨® al PNV de traicionar las bases pactadas, al tiempo que ve¨ªa c¨®mo se alejaba la posibilidad de abrir en Euskadi un nuevo frente al Estado.

La desconfianza hist¨®rica entre el PNV y EH Bildu vuelve al primer plano a falta de escasos seis meses para que se suspenda el Parlamento vasco y Euskadi se sumerja de nuevo en unas elecciones, esta vez auton¨®micas.

El enfado de la izquierda abertzale con ese carril que se iba configurando entre socialistas peneuvistas y morados, iba m¨¢s all¨¢ de los desacuerdos en la formulaci¨®n del derecho a decidir, ¡ªrelegado a una disposici¨®n adicional segunda y con una redacci¨®n muy cuidada¡ª, o de la ¡°identidad nacional vasca¡± ya que el PNV tambi¨¦n renunci¨® al establecimiento de una relaci¨®n ¡°de naturaleza confederal plena con el Estado¡±, pese a que lo compart¨ªa en las bases pactadas con EH Bildu.

Legarda explica que ¡°su materializaci¨®n plena exige la previa modificaci¨®n del ordenamiento jur¨ªdico vigente, lo que est¨¢ ¡ªpor el momento¡ª m¨¢s all¨¢ de la capacidad del Estatuto¡±. Un, ¡°por el momento¡±, que tiene relaci¨®n con la posici¨®n del PSOE de revisar el Cap¨ªtulo VIII de la Constituci¨®n que regula la organizaci¨®n territorial del Estado.

El jurista propuesto por los socialistas, el catedr¨¢tico de Derecho Constitucional, Alberto L¨®pez Basaguren, tiene muy claro y valora la coincidencia con el PNV y Podemos en el sentido de que ¡°no se puede verbalizar¡± y menos en un texto jur¨ªdico, como hace EH Bildu, ¡°que el Pa¨ªs Vasco tiene derechos que no tiene. S¨ª se puede decir que aspira a ellos o que quiere que se le reconozcan, pero eso es radicalmente diferente¡±.

Seguridad

?Sin embargo, el empe?o por no desbordar la Constituci¨®n no significa que el PNV renuncie a algunas de sus demandas hist¨®ricas y que se las discuta a los socialistas. En el cap¨ªtulo 100, que hace referencia a la Seguridad, la redacci¨®n pactada entre PNV y Elkarrekin Podemos elimina la capacidad del Gobierno central para decidir la intervenci¨®n de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. ¡°Estas podr¨¢n intervenir a requerimiento del Gobierno Vasco, o cuando estimen que el inter¨¦s general del Estado est¨¦ gravemente comprometido, pero siendo necesaria la aprobaci¨®n de la Junta de Seguridad¡±.

L¨®pez Basaguren fija su voto particular y devuelve al Gobierno la capacidad de hacerlo dando cuenta a las Cortes Generales. ¡°Podr¨¢n intervenir bajo la responsabilidad exclusiva del Gobierno, dando este cuenta a las Cortes¡±, enmienda.

En el caso de Navarra y la posibilidad de establecer relaciones institucionales singulares no solo con la comunidad vecina, sino con las provincias vasco francesas, la redacci¨®n del PNV, PSE y Podemos, los tres partidos que gobiernan en la comunidad foral, apela al m¨¢ximo respeto a las instituciones respectivas, a la voluntad de la ciudadan¨ªa atendiendo a la normativa sobre la materia de los distintos territorios, Estados, y de la Uni¨®n Europea, y en el marco de los procedimientos legales vigentes en cada momento.