El espionaje policial, un ¡°arma para negociar¡± con B¨¢rcenas

En su nacimiento en 1990, el Partido Popular recibi¨® como herencia los fondos de la caja b de Alianza Popular y los modos de actuar de su tesorero Rosendo Naseiro ¡ªperfeccionados despu¨¦s por sus sucesores ?lvaro Lapuerta y Luis B¨¢rcenas¡ª. Treinta a?os despu¨¦s, la formaci¨®n protagoniza el caso Kitchen, un esc¨¢ndalo colosal derivado de su financiaci¨®n irregular, acreditada al menos hasta 2009. Dos jueces de la Audiencia Nacional, Jos¨¦ de la Mata y Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n, investigan una trama urdida en 2013 por el Ministerio del Interior y la c¨²pula de la Polic¨ªa Nacional, siendo presidente Mariano Rajoy, para espiar al extesorero B¨¢rcenas y a su esposa, Rosal¨ªa Iglesias. Se trataba de arrebatarles papeles comprometedores para el partido y sus dirigentes en plena investigaci¨®n judicial del caso G¨¹rtel y de la caja b de G¨¦nova 13.

El robo de los documentos, efectuado por un antiguo empleado de seguridad del PP y exch¨®fer de B¨¢rcenas, Sergio R¨ªos no ten¨ªa por objeto averiguar el patrimonio oculto del extesorero o ayudar al entonces juez del caso, Pablo Ruz, a quien nunca se le facilitaron dichos papeles. Lo que se buscaba era sabotear las pesquisas del magistrado y otorgar a los dirigentes del PP un ¡°arma para negociar¡± con B¨¢rcenas, actualmente en prisi¨®n, adelant¨¢ndose a sus movimientos. As¨ª lo valora Manuel Morocho, el inspector jefe al frente del caso G¨¹rtel y sus causas derivadas, en un informe remitido al actual juez instructor De la Mata. La operaci¨®n fue pagada con 53.000 euros de fondos reservados para R¨ªos, y estuvo respaldada por el aparato de la llamada polic¨ªa patri¨®tica del comisario corrupto Jos¨¦ Villarejo.

Desde febrero de 2009, el PP vive sobresaltos peri¨®dicos por las r¨¦plicas del terremoto G¨¹rtel, una trama corrupta que marc¨® de forma decisiva el legado de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar al frente del partido. La sentencia de su pieza central, en mayo de 2018, prob¨® la existencia de la caja b y un sistema de corrupci¨®n institucionalizada en el PP, y acab¨® propiciando la moci¨®n de censura que ape¨® a Rajoy de la presidencia y de la pol¨ªtica. El temblor del caso Kitchen es de enorme magnitud, y evidencia, cuando menos, que el presidente dej¨® durante su mandato que un entramado parapolicial boicoteara causas judiciales. Las investigaciones en la Audiencia Nacional determinar¨¢n si su actuaci¨®n en el espionaje a B¨¢rcenas fue m¨¢s activa o consciente de lo que su imagen p¨²blica sugiere. O no. De momento, la causa afecta de lleno al ex secretario de Estado de Seguridad, Francisco Mart¨ªnez, imputado desde enero y podr¨ªa alcanzar pr¨®ximamente al exministro del Interior Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz y a la ex secretaria general del PP, Dolores de Cospedal y al esposo de esta, Ignacio L¨®pez del Hierro, cuyas imputaciones solicita la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n.

Todos ellos est¨¢n fuera de la pol¨ªtica ¡ªFern¨¢ndez D¨ªaz y Francisco Mart¨ªnez apartados de las listas por Pablo Casado, y Cospedal por aparente voluntad propia tras conocerse sus conversaciones con Villarejo y despu¨¦s de haber dado su respaldo al actual presidente popular contra su enemiga Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa en las primarias del PP de julio de 2018¡ª. Este ostracismo de la antigua c¨²pula de Interior, que Casado puede argumentar a su favor como una ruptura con el pasado, tiene un potencial destructivo para el PP en los juzgados o incluso en la comisi¨®n de investigaci¨®n sobre el caso Kitchen que se crear¨¢ en el Congreso. Y pol¨ªticamente, la distancia de Casado con sus antecesores ¡ª"en aquella ¨¦poca yo era diputado por ?vila"¡ª tambi¨¦n puede desestabilizar a la formaci¨®n conservadora por lo que pueda interpretarse como una falta de lealtad del l¨ªder.

El exsecretario Mart¨ªnez, en conversaciones recogidas en el sumario, se ha quejado, incluso ante Rajoy, de que el partido le ha dejado ¡°tirado¡±, y ha dejado recados, a trav¨¦s de sus allegados, a Fern¨¢ndez D¨ªaz: ¡°Se arrepentir¨¢. Ni se imagina lo que le espera¡±, dijo en julio de 2019 cuando el exministro, en una entrevista en Vozpopuli, dijo no saber nada del espionaje a B¨¢rcenas. Al presidente de la Audiencia Nacional, Jos¨¦ Ram¨®n Navarro, le confi¨®: ¡°mi grand¨ªsimo error en el ministerio fue ser leal a miserables como Jorge [Fern¨¢ndez D¨ªaz], Rajoy o Cospedal¡±. La declaraci¨®n de Mart¨ªnez ante el juez Garc¨ªa-Castell¨®n, una vez levantado el secreto del sumario, puede sacudir, una vez m¨¢s, al primer partido de la oposici¨®n.

De momento, el p¨²blico se va a tener que familiarizar en las pr¨®ximas semanas con una serie de nombres de la polic¨ªa patri¨®tica, que ya han sonado por sus operaciones encubiertas contra Podemos o el expresidente de la Generalitat Jordi Pujol. Entre ellos figuran el ex director adjunto operativo (DAO), principal mando uniformado, de la Polic¨ªa Eugenio Pino, que coordinaba la operaci¨®n junto con Mart¨ªnez y Enrique Garc¨ªa Casta?o El Gordo, que dirig¨ªa la unidad que realiz¨® los seguimientos irregulares a B¨¢rcenas, con 71 agentes de los que participaron ¡°12 o 14¡±, seg¨²n fuentes policiales. O el inspector Andr¨¦s G¨®mez Gordo, polic¨ªa de confianza y exasesor de Cospedal quien supuestamente abon¨® los fondos reservados al exch¨®fer de B¨¢rcenas junto con el ubicuo Villarejo, quien adem¨¢s tramit¨® su ingreso en la Polic¨ªa como funcionario. Ellos, y sus declaraciones, ser¨¢n los protagonistas de las pr¨®ximas semanas junto a los responsables pol¨ªticos.