Marlaska regresa a Melilla tras una nueva noche de tensi¨®n en el per¨ªmetro fronterizo

El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha regresado este s¨¢bado a Melilla despu¨¦s de una tensa jornada en la que se produjeron varios intentos masivos de acceder a la ciudad a trav¨¦s de la valla que la separa de Marruecos. Durante la madrugada, entre 150 y 300 personas se han aproximado, hasta en tres ocasiones, de forma violenta al per¨ªmetro, lanzando piedras, seg¨²n ha confirmado la Delegaci¨®n del Gobierno.

Es el segundo viaje de Marlaska a Melilla en la ¨²ltima semana y desde que se desatase el pasado lunes la crisis fronteriza en Ceuta, que parece tener sus propias r¨¦plicas en la otra ciudad aut¨®noma. El martes, ya acompa?¨® al presidente, Pedro S¨¢nchez, en una visita rel¨¢mpago en la que se reuni¨® con la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, y el presidente de la ciudad, Eduardo de Castro. En esta ocasi¨®n, el ministro ha liderado una reuni¨®n con los responsables del despliegue fronterizo activado desde el martes y ha anunciado el refuerzo de efectivos de la Guardia Civil.

Desde el pasado lunes y aunque en mucha menor medida que Ceuta, Melilla tambi¨¦n sufre una presi¨®n extraordinaria en su per¨ªmetro fronterizo, donde se ha desplegado el Ej¨¦rcito en apoyo de la Guardia Civil. La actividad al otro lado del vallado es inusual, tambi¨¦n porque una mayor¨ªa de quienes han intentado atravesarlo son marroqu¨ªes. La tarde del viernes, 40 personas consiguieron acceder a la ciudad tras forzar el enrejado que soporta la valla fronteriza con Marruecos por el cauce de un r¨ªo. Entre 250 y 300 personas lograron romper los candados que manten¨ªan cerradas los portones que permiten el paso del agua ante la pasividad de las fuerzas de seguridad marroqu¨ªes, que s¨ª actuaron durante la noche.

Los intentos se han repetido ya durante dos noches consecutivas por el entorno de los pasos de Barrio Chino, Farhana y Mariguari, m¨¢s peque?os que el paso internacional de Beni Enzar y m¨¢s accesibles. A comienzos de la semana ya se produjeron las primeras entradas a trav¨¦s de otro punto cr¨ªtico del vallado, por el que marca el l¨ªmite entre la playa sur de la ciudad y el puerto marroqu¨ª de Beni Enzar, similar a los espigones de Benz¨² y El Tarajal, en Ceuta. Ir¨®nicamente, ese es tambi¨¦n uno de los accesos m¨¢s dif¨ªciles, especialmente en grupo, ya que exige atravesar todo el puerto, vigilado por las fuerzas de seguridad marroqu¨ªes.