Detenidos cinco funcionarios de la c¨¢rcel de Navalcarnero acusados de introducir droga para los presos

La Guardia Civil ha detenido este mi¨¦rcoles a cinco funcionarios ¡ªuno de ellos jubilado¡ª destinados en el Centro Penitenciario de Navalcarnero (Madrid) acusados de introducir droga y otros objetos prohibidos en la prisi¨®n, como tel¨¦fonos m¨®viles, seg¨²n confirmaron a EL PA?S fuentes penitenciarias y cercanas a la investigaci¨®n. En la operaci¨®n fueron arrestadas, al menos, otras cinco personas, la mayor¨ªa reclusos que presuntamente participaban en la venta de la droga a otros internos.

El operativo, que se inici¨® a primera hora de la ma?ana, incluy¨® el rastreo de las taquillas de los detenidos con la ayuda de perros adiestrados en la detecci¨®n de drogas. Durante los registros, que se prolongaron durante gran parte de la jornada, el juez prohibi¨® la entrada y salida del centro de funcionarios, trabajadores externos y presos de permiso. Fuentes del instituto armado y de Instituciones Penitenciarias han declinado confirmar los detalles de la operaci¨®n al haberse decretado el secreto de las actuaciones.

En junio pasado, la Guardia Civil detuvo a otros cuatro funcionarios de prisiones, estos destinados en la c¨¢rcel de Valdemoro, tambi¨¦n en Madrid, acusados de organizaci¨®n criminal, tr¨¢fico de estupefacientes y cohecho como supuestos integrantes de una trama similar. Tres de ellos fueron encarcelados por orden del juez. Entonces, la operaci¨®n tambi¨¦n incluy¨® el registro de un funcionario de la c¨¢rcel de Navalcarnero, que finalmente no fue imputado.

La investigaci¨®n que ha desembocado en las detenciones de este mi¨¦rcoles se inici¨® en 2019, aunque se intensific¨® durante el primer estado de alarma por la pandemia, cuando se detect¨® que en la prisi¨®n de Navalcarnero segu¨ªa circulando droga pese a que entonces, para minimizar el riesgo de expansi¨®n del coronavirus dentro de la c¨¢rcel, el Ministerio del Interior hab¨ªa suprimido tanto las visitas a los presos por parte de familiares y amigos (incluidos los encuentros con contacto f¨ªsico o vis a vis) como los permisos de salida de los internos, las dos principales v¨ªas de entrada de estupefaciente en las prisiones.

Entonces, el aislamiento al que fueron sometidos los centros penitenciarios provoc¨® un descenso dr¨¢stico del tr¨¢fico de drogas en su interior y un aumento considerable del precio de las dosis. Como consecuencia de ello, la bellota de hach¨ªs, que antes de estallar la crisis sanitaria costaba una media de 100 euros dentro de prisi¨®n, pas¨® a pagarse a 150 euros o m¨¢s. Lo mismo ocurri¨® con el pollo (gramo) de coca¨ªna, que de 60 euros subi¨® hasta los 90 e, incluso, los 100 euros, seg¨²n constataron fuentes penitenciarias.

Esta carencia de droga, que en algunas c¨¢rceles provoc¨® tensi¨®n entre presos, muchos de ellos con el s¨ªndrome de abstinencia, fue menor en algunos centros, como el de Navalcarnero, lo que dispar¨® la sospecha de que el estupefaciente estaba entrando en este penal por otras v¨ªas. Las pesquisas apuntan ahora que los funcionarios ahora detenidos eran los presuntos responsables de ello para aprovecharse de esta coyuntura.

En los ¨²ltimos a?os, las cifras de incautaciones de estupefacientes dentro de las c¨¢rceles se han incrementado a pesar de que el n¨²mero de presos ha descendido de manera significativa: de 4.500 intervenciones de droga en 2012 se ha pasado a m¨¢s de 5.100 en 2018 a pesar de que hab¨ªa 10.000 reclusos menos. En 2019, ¨²ltimo a?o del que hay datos disponibles, se intervinieron en prisi¨®n cerca de 3.500 psicotr¨®picos; 30 kilos de cannabis y 417 gramos de hero¨ªna, seg¨²n una respuesta del Portal de Transparencia. En ese mismo periodo, 53 reclusos fallecieron por reacci¨®n adversa a las drogas. Durante el primer estado de alarma, cuando las c¨¢rceles estuvieron aisladas entre mediados de marzo y finales junio de 2020, se produjo un descenso brusco de estas muertes por sobredosis: solo tres casos, cuando solo en enero y febrero anterior se hab¨ªan registrado un total de 12.