La Polic¨ªa frustr¨® un acto de protesta contra la cumbre de la OTAN dentro del Museo del Prado
La Operaci¨®n Eirene se salda sin detenciones y con pocos incidentes rese?ables, entre ellos el intento frustrado de una veintena de activistas de entrar en la pinacoteca con pancartas
La Operaci¨®n Eirene, el despliegue de m¨¢s de 10.000 polic¨ªas para garantizar la seguridad de la cumbre de la OTAN en Madrid, ha concluido este jueves sin detenciones y con m¨ªnimos incidentes y todos de poca entidad. El m¨¢s relevante, desconocido hasta ahora, se produjo el pasado 23 de junio, cinco d¨ªas antes de la llegada de los mandatarios de 40 pa¨ªses a Espa?a, cuando 21 activistas del colectivo ecologista Extinction Rebellion ¨Del mismo que protagoniz¨® el pasado 6 de abril un acto de protesta en el Congreso de los Diputados con el lanzamiento de agua tintada de rojo¨D intentaron colarse como visitantes en el Museo del Prado para protagonizar un acto de protesta antimilitarista con pancartas, seg¨²n confirman a EL PA?S fuentes policiales. Los activistas fueron interceptados por la Polic¨ªa cuando a¨²n estaban en las colas de acceso y, tras ser identificados, se les propuso para una sanci¨®n y se les impidi¨® entrar en la pinacoteca.
Seg¨²n detallan estas fuentes, la intervenci¨®n policial se produjo despu¨¦s de que el equipo de seguridad del museo ¨Ddonde se celebr¨® este jueves una cena de los mandatarios participantes a la cumbre y sus acompa?antes¨D hiciera llegar ese mismo d¨ªa a los responsables de la Operaci¨®n Eirene su sospecha de que se preparaba una acci¨®n contra la cumbre en las salas de la pinacoteca tras detectar que una persona hab¨ªa adquirido un elevado n¨²mero de entradas, 40. La Polic¨ªa Nacional despleg¨® entonces un dispositivo de vigilancia en los alrededores que permiti¨®, poco despu¨¦s, interceptar a una veintena de activistas de Extinction Rebellion que, en peque?os grupos, esperaban ya para acceder al interior.
Cuando fueron cacheados, los agentes les intervinieron pancartas y caretas con las im¨¢genes de varios de los mandatarios asistentes a la cumbre. Tras identificarles y retirarles las entradas para que no pudieran entrar en el museo, la polic¨ªa les dej¨® marchar. Extinction Rebellion protagoniz¨® posteriormente dos actos de protesta contra la OTAN. El primero, el pasado lunes, en el Museo Reina Sof¨ªa, donde una treintena de activistas consiguieron acceder a su interior y tumbarse ante el Guernica con pancartas en las que se le¨ªa ¡°la guerra es la muerte del arte¡±. Fueron desalojados a los pocos minutos. Al d¨ªa siguiente, en la jornada de inicio de la cumbre, activista del grupo fueron identificados y propuestos para sanci¨®n tras hacer pintadas en la fachada de la Escuela de Guerra del Ej¨¦rcito en Madrid en un acto en el que exig¨ªan la salida de los ¡°se?ores de la guerra de Madrid¡±, en referencia a los dirigentes de la OTAN.
Manifestaciones sin incidentes
Fuentes policiales mostraban este jueves su satisfacci¨®n por el resultado del operativo de seguridad y la ausencia durante los d¨ªas que ha durado la cumbre de los grupos radicales que habitualmente provocan altercados durante la celebraci¨®n de este tipo de eventos internacionales. El propio ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, resum¨ªa el ¨¦xito del operativo con la frase ¡°cero incidentes, cero detenidos¡±. Estas mismas fuentes admiten que en las jornadas previas al inicio de la cumbre, en las redes sociales y los chats de aplicaciones de mensajer¨ªa instant¨¢nea frecuentados por radicales se hab¨ªa incrementado el n¨²mero de los mensajes en los que se hac¨ªan llamamientos a provocar disturbios aprovechando la celebraci¨®n de manifestaciones de protesta contra la Alianza Atl¨¢ntica. ¡°Pero siempre eran gen¨¦ricos, sin planes concretos para hacerlo¡±, precisan.
De hecho, de la decena de manifestaciones que se han celebrado en Madrid en los d¨ªas previos y durante las tres jornadas de la cumbre (algunas en contra de la OTAN, otras de apoyo y el resto por motivos ajenos a la misma), en ninguna se han registrado incidentes rese?ables, seg¨²n destacan fuentes de la Delegaci¨®n del Gobierno. De hecho, la baja participaci¨®n ha sido la nota dominante en todas ellas, con una asistencia que ha quedado por debajo de las previsiones anunciadas por los organizadores cuando comunicaron su celebraci¨®n.
As¨ª, el viernes 24, la concentraci¨®n convocada por el sindicato CNT frente a la sede del Cuartel General del Ej¨¦rcito ten¨ªa prevista la asistencia de medio centenar de personas, cifra que no se alcanz¨®. Un d¨ªa m¨¢s tarde, el llamamiento de la Uni¨®n de Juventudes Comunistas tampoco congreg¨® a las 300 personas previstas por los organizadores. Lo mismo ocurri¨® con la marcha motera celebrada por Justicia Salarial Policial (Jusapol, una plataforma de polic¨ªas y guardias civiles que reclamaba mayores retribuciones), que empez¨® anunciando 3.000 asistentes y finalmente congregaron a poco m¨¢s de 200. Tampoco quedaron lejos de la asistencia esperada los otros actos convocados por esta asociaci¨®n policial.
En la concentraci¨®n que m¨¢s preocupaba a los responsables de seguridad, una convocada por redes sociales que se celebr¨® este mi¨¦rcoles en la plaza madrile?a de Tirso de Molina y que coincid¨ªa en el tiempo con otra similar en el cercano barrio de Lavapi¨¦s, la asistencia se redujo a algo menos de 150 personas. Tampoco se produjeron incidentes. En este caso, la polic¨ªa ¨Dque llev¨® a cabo un visible despliegue de agentes de las Unidades de Intervenci¨®n Policial, los conocidos como antidisturbios¨D se limit¨® a impedir que una veintena de asistentes se desplazaran hacia el Museo de Prado, donde se celebraba en ese momento la cena de mandatarios, y a identificar a dos personas por portar artefactos pirot¨¦cnicos.
La manifestaci¨®n que congreg¨® m¨¢s personas fue la convocada por distintas plataformas de izquierda y que se desarroll¨® el domingo 26 de junio por el centro de Madrid en un ambiente festivo. La misma cont¨® con la presencia de dirigentes de Izquierda Unida y del l¨ªder del PCE, Enrique Santiago, en la actualidad secretario de Estado para la Agenda 2030. La protesta congreg¨® a unas 30.000 personas, seg¨²n la organizaci¨®n, y a 2.200, seg¨²n las estimaciones de la Delegaci¨®n del Gobierno. Fuentes policiales admiten que estaban alerta por si la protesta era instrumentalizada por grupos radicales para provocar incidentes al t¨¦rmino de la misma ¨Dlos responsables de la Operaci¨®n Eirene desplegaron media docena de tanquetas policiales en la Plaza de Espa?a, donde terminaba el acto¨D, pero finalmente no se registraron.
Ese mismo d¨ªa hubo otra concentraci¨®n, en este caso de apoyo a la OTAN, convocada por la comunidad de ucranios en Espa?a, en la que estaba prevista la participaci¨®n de medio millar de personas, que se celebr¨® tambi¨¦n sin incidentes. Este grupo celebr¨® una segunda manifestaci¨®n el mi¨¦rcoles pasado e intent¨® convocar otras dos (una frente al Palacio Real el martes, y otra frente al Museo del Prado al d¨ªa siguiente) que finalmente no fueron autorizadas por haberse presentado la solicitud fuera de plazo. La Delegaci¨®n del Gobierno tambi¨¦n prohibi¨® una concentraci¨®n prevista para este mi¨¦rcoles por la tarde ante la pinacoteca, en este caso contra la OTAN, tras recibir un informe policial que desaconsejaba su celebraci¨®n por motivos de ¡°seguridad¡±, ya que el recorrido y la hora coincid¨ªa, precisamente, con la de celebraci¨®n de la cena de los mandatarios que han asistido a la cumbre.
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